• Cotizaciones
    jueves 24 de abril de 2025

    ¡Hola !

    En Búsqueda y Galería nos estamos renovando. Para mejorar tu experiencia te pedimos que actualices tus datos. Una vez que completes los datos, tu plan tendrá un precio promocional:
    $ Al año*
    En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] o contactarte por WhatsApp acá
    * Podés cancelar el plan en el momento que lo desees

    ¡Hola !

    En Búsqueda y Galería nos estamos renovando. Para mejorar tu experiencia te pedimos que actualices tus datos. Una vez que completes los datos, por los próximos tres meses tu plan tendrá un precio promocional:
    $ por 3 meses*
    En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] o contactarte por WhatsApp acá
    * A partir del cuarto mes por al mes. Podés cancelar el plan en el momento que lo desees
    stopper description + stopper description

    Tu aporte contribuye a la Búsqueda de la verdad

    Suscribite ahora y obtené acceso ilimitado a los contenidos de Búsqueda y Galería.

    Suscribite a Búsqueda
    DESDE

    UYU

    299

    /mes*

    * Podés cancelar el plan en el momento que lo desees

    ¡Hola !

    El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
    En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] o contactarte por WhatsApp acá

    Entre la rutina y el azar, el amor

    El estreno de La tregua el jueves 26 en el Auditorio del Sodre coincide con una encrucijada institucional que se ha precipitado en el Sodre en los últimos días, con la renuncia del director artístico de los auditorios y el despido del director del Ballet Nacional del Sodre (BNS), Igor Yebra, quien será sustituido por María Noel Riccetto, una decisión hasta ahora comunicada en forma fragmentada y ambigua por las autoridades.

    Cuando el vasco Igor Yebra llegó a Montevideo para hacerse cargo del BNS, a inicios de 2018, propuso crear una obra nueva, un estreno absoluto. Se trató de El Quijote del Plata, estrenada en 2018 con tal éxito que fue representada en España. Esta producción puso en marcha el proyecto de un segundo estreno mundial dirigido por Yebra: La tregua, una versión en clave de ballet contemporáneo de la novela de Mario Benedetti, publicada en 1960, llevada al cine por el argentino Sergio Renán y que cuenta la historia de amor entre un hombre maduro y una mujer joven en la Montevideo gris y rutinaria, el gran teatro de operaciones del autor de Montevideanos.

    La obra fue elegida en el marco del centenario de Benedetti, que se celebra este año, y Yebra encargó la tarea de crear la coreografía original a Marina Sánchez, una bailarina egresada de la Escuela Nacional de Danza, ligada a la compañía desde mediados de los 90, a quien Julio Bocca eligió en 2014 como una de las coreógrafas emergentes de la compañía. Sánchez es la autora de Zitarrosa en todos y Encuentros, dos piezas que integraron galas del BNS en los últimos años, incluida la reciente Gran gala 2020. En 2017 Sánchez se convirtió en la primera coreógrafa residente en la historia del BNS, por lo que decidió dejar su puesto de bailarina solista y colgar las zapatillas.

    Con la dirección general de Yebra, el proceso creativo de La tregua insumió más de dos años y reunió a varios referentes de las artes escénicas uruguayas. El INAE repitió su apoyo iniciado con El Quijote, consistente en proveer y financiar la participación de un dramaturgo en el equipo: el seleccionado fue Gabriel Calderón. La composición de la música original fue encargada a Luciano Supervielle, quien plasmó su característica fusión clásica, tanguera y electrónica. Hugo Millán, vestuarista habitual de la compañía, aportó su diseño no solo en los textiles, sino también en la escenografía, una serie de módulos móviles que cambian de posición en cada escena. El diseñador Sebastián Marrero asumió la iluminación, un rubro clave en esta puesta que por su carácter despojado confiere a las luces un rol protagónico.

    El hasta ahora director del BNS, Igor Yebra, dijo a Búsqueda que el estreno de La tregua será un acontecimiento seguido de cerca a escala internacional porque el BNS “es una de las pocas compañías que está en plena actividad en el mundo y Benedetti es un nombre de referencia en el mundo hispanoparlante”. Sobre la puesta, afirmó que eligió a Marina Sánchez porque “tiene un potencial de crecimiento muy grande” como coreógrafa y también porque le parecía importante incorporar “la visión actual de una mujer sobre una obra cuyo protagonista es un hombre”.

    La coreógrafa explicó que esta es la obra más extensa que ha creado (70 minutos aproximadamente), que en su coreografía fusiona el universo clásico con diversas vertientes contemporáneas y que a la hora de concebir la coreografía se basó más en el libro que en el filme de Renán, que fue la primera producción del cine argentino en ser nominada al Oscar en 1974. “No porque no me guste la película, que es excelente, sino porque el libro me permitía crear atmósferas más luminosas y me daba mayor libertad para imaginar”. Contó que durante varios meses debatieron (junto con Calderón y Supervielle) cómo llevar la palabra escrita a la acción corporal. Para ello dividió el relato en nueve escenas y se sumaron dos personajes conceptuales: la rutina y el azar. “Buscamos que todo lo que se ve sea lo más universal y atemporal posible. Esto está dado incluso en el vestuario, que no tiene género: hombres de pollera y mujeres de saco y pantalón”. La artista uruguaya no oculta su sueño de que cuando pase el tiempo las compañías de España, Latinoamérica y, por qué no, elencos de otras culturas sigan bailando La tregua, de Marina Sánchez.

    Gabriel Calderón, consultado por Búsqueda sobre su participación como dramaturgo, contó que el equipo tuvo claro desde las primeras reuniones que iba a seguir la historia de amor de Martín y Laura, los protagonistas de la novela. “A Marina le gustaba el tema de la rutina y acordamos que fuera un personaje. También le propuse que otro personaje fuera el azar, más que la muerte. Acordamos que los escenarios iban a ser en la ciudad, en el bar, en la oficina, en el apartamento de Martín”.

    El dramaturgo reorganizó la novela dentro de las escenas, pero no en forma cronológica. Hay citas del novelista que se mezclan con acciones y personajes de la nueva versión. “Hay un guion que se llama Diario de La tregua. Es un homenaje a la novela. Allí escribí también algo personal y amplifiqué todas las ideas que venían de la novela y que podían generar movimientos”.

    Finalmente, Luciano Supervielle describió la intervención de piezas de Beethoven y Vivaldi que hace en la banda sonora. “Al principio tiene una impronta netamente clásica, pianística y orquestal, que me permitió adentrarme en terrenos muy interesantes y placenteros”. Luego la música muta hacia sonoridades más cercanas al ambiente de Bajofondo, caracterizado por la mezcla de tango con arreglos electrónicos. También construyó paisajes sonoros reconocibles, como la calle y la oficina, a través de sonidos grabados y luego sampleados.

    Este trabajo quedará grabado a fuego en la memoria de Supervielle, ya que a fines de 2019 falleció su esposa y luego pasó varios meses paralizado “hasta que el retorno y la programación de las fechas (10 funciones, del jueves 26 al domingo 6 de diciembre) lograron que retomara el vínculo con la música y con esta banda sonora. Por eso La tregua es para mí tan especial”.

    Vida Cultural
    2020-11-19T00:58:00