Los ‘haters’ de la menstruación
Horroriza e indigna que se ayude a las mujeres pobres a costearse productos para atravesar sus períodos, pero no molesta para nada que cada mes tengan que ponerse medias, trapos o pedazos de polifón, que pasen vergüenza en sus centros de estudio o trabajos por mancharse la ropa, o que estén expuestas a infecciones; que se arreglen, ¿no?