ADA celebró sus 60 años con la emisión de un sello postal del Correo Uruguayo

Asimismo, en 2010 ADA creó su estatuto y tramitó ante el Ministerio de Educación y Cultura del Uruguay el reconocimiento de su personería jurídica.

Sesenta años después, ADA se convirtió en una asociación viva que crece­ por la contribución económica de sus socios, la comunidad diplomática y la sociedad civil uruguaya.

Luego de recibir el sello, Blanca Fernández­ finalizó con un agradecimiento a las autoridades del Correo Uruguayo por el valioso apoyo a la asociación.

Renovación para ayudar

Desde que ingresó a ADA el 5 de diciembre de 2023, Blanca Fernández de Hume se dedicó a realizar un diagnóstico para luego implementar una estructura más sólida y permanente. “Estamos orgullosas porque ya tenemos nuestro sitio web, adauruguay.org, y un Instagram funcionando. Creo en la disciplina organizativa en las empresas como un principio para poder obtener buenos resultados”, explicó. La intención de Fernández, como abogada y administradora de empresas, fue dejar una institución más ordenada para que las siguientes integrantes de la comisión puedan continuar con la tarea de ayudar de una manera más sistemática, digitalizada y planificada.

El objetivo de ADA es la ayuda benéfica a instituciones que reciben personas en estado de vulnerabilidad. Para cumplir con esa misión, organizan actividades de distinta índole para recaudar fondos. Entre las organizaciones beneficiarias, se destacan los cotolengos femenino y masculino, las obras Madre Teresa de Calcuta y San Vicente de Paul, o la Escuela Roosevelt, a los que se sumarán otros proyectos, como Manos de Héroes, por ejemplo.

Dentro del nuevo sitio web, los donantes podrán dirigir fondos a esos y otros proyectos que se detallan. “La tendencia hoy por hoy es la transparencia y para eso nos apoyamos en la tecnología. En el sitio se puede acceder a los estatutos, se muestran nuestras actividades, los donadores y contribuyentes”, contó la presidenta. La próxima actividad programada será para el 4 de octubre, cuando se realice la segunda edición del Dancing Party en la Embajada de Paraguay.

ADA se nutre con el aporte y trabajo de las socias que ingresan cada mes, la mayoría embajadoras o esposas de diplomáticos, aunque en la actualidad se abrió para otros miembros de la sociedad uruguaya. Fernández contó que esta iniciativa de integración con la comunidad también las nutre. “Nos hace sentir menos extranjeras y nos da la posibilidad de conocer la cultura local. En consecuencia, el intercambio nos enriquece”.

En sus últimos días en la presidencia, Fernández destacó la oportunidad que ADA le dio para “devolver con un granito de arena todo el cariño” que recibió de la gente durante su estadía en Uruguay con su esposo, el embajador de Chile, Rodrigo Hume. “No hablo solamente de la gente de ADA, sino también de las personas que conocí a través de las instituciones que ayudamos. Esa convivencia te hace crecer como persona y seguimos aprendiendo. Entonces para mí fue un aprendizaje. Doy gracias a Dios por esta oportunidad y espero haber dejado un legado que haga crecer a ADA”.