¿Cómo ha sido tu relación con Uruguay?
Para mí, Uruguay es como un primo muy cercano. Es un país familiar y hermano, donde crecimos compartiendo muchas cosas en común. Cuando comenzaba mi carrera, me veían en series, y luego con la música esa conexión se fortaleció. He pasado muchos veranos allí, y tengo muchos recuerdos. Me acuerdo una vez que fuimos a Punta del Este a filmar con La Banda del Golden Rocket (serie de telvisión de 1991 a 1993) y terminamos jugando al fútbol en un descampado donde, años más tarde, construyeron el hotel Enjoy. También tengo un gran recuerdo de un hermoso show en la estación de trenes de Montevideo (AFE, en 2004) y del concierto del año pasado en el Auditorio del Sodre, que me encantó.
Concierto Diego Torres.jpg
Diego Torres en concierto.
Y para este regreso, ¿qué va a ver la gente que vaya al Antel Arena?
Quiero que el concierto sea un viaje, una experiencia para disfrutar y darlo todo, ya que el público llega con esa necesidad. Va a ser un recorrido a través de muchas canciones de diferentes épocas, incluyendo lo mejor de mis discos. Habrá versiones a todo ritmo y otras más íntimas, en formato unplugged, con nuevos arreglos y algunas canciones inéditas. Me gusta darle cosas diferentes a la gente. Es increíble ver que, después de tantos años en la música, mis temas siguen enganchando, atrayendo a nuevos oyentes que tienen ganas de escuchar y de disfrutar del show.
¿Alguna sorpresa para el concierto? ¿Un dúo con Ruben Rada?
¡Amo a Rada! Nunca se sabe qué puede suceder, y eso es lo maravilloso de los shows… (ríe) Es un bonito desafío regresar a Montevideo a un lugar bien grande como el Antel Arena y presentar con mi banda un espectáculo que tendrá lo mejor de mi carrera.
Mencionás que parte del show vas a hacer unplugged. Se cumplen 20 años del disco que grabaste para la MTV. En Uruguay fue disco de platino. ¿Cómo lo recordás?
¡Sí, ya han pasado 20 años! Lo que vivimos con ese disco fue realmente especial y un gran desafío. En ese momento, Sony atravesaba una etapa complicada, con cancelaciones de contratos y un caos interno. Todo estaba en duda. Fue cuando decidimos defender la propuesta que MTV nos había hecho. Al ver la convicción de mi equipo, en la discográfica se dieron cuenta de que debía hacer ese disco. Realizar un Unplugged por primera vez fuera de Estados Unidos, específicamente en Buenos Aires, fue una gran responsabilidad. Tuvimos tres meses para preparar el show, y salió todo perfecto. Lo considero de los discos más emblemático de mi carrera.
Cuando compones una canción, ¿tenés en cuenta cómo reaccionará el público que asistirá a tus conciertos?
Siempre cuando estás haciendo un disco pensás que esas canciones las vas a tener que tocar en vivo, entonces ya pensás que son estructuras diferentes. Amuleto, la canción nueva, por ejemplo, termina con un solo de guitarra. En vivo va a explotar y voy a terminar con el coro, seguramente. Pero no la puedo hacer eterna en un track que vas a escuchar en una plataforma de streaming.
Con una nueva canción que se suma a tres discos en cuatro años, y mientras trabajas en uno nuevo, ¿sentís la necesidad de escribir? ¿Es un impulso que surge naturalmente para vos en este momento?
Sí, sí, siento la necesidad de estar activo, de escribir y componer, de enfrentar nuevos desafíos y salir de mi zona de confort. También me motiva trabajar con personas nuevas que aportan diferentes perspectivas. Y una necesidad constante de hacer giras y ofrecer algo fresco al público.
¿Se canta mejor en momentos de felicidad o en períodos de tristeza?
Se canta siempre.
¿Y se compone, también?
Se compone siempre, en momentos buenos y en momentos malos.
¿Y la canción cambia según el momento? ¿En situaciones difíciles, por ejemplo, es más melódica?
La música siempre ha sido mi forma de expresar lo que siento y de navegar por momentos difíciles. Al escribir, a menudo encuentro respuestas y señales que no aparecen en la vida cotidiana. Mejor que ayer, por ejemplo, tiene un toque tanguero. El coro dice: 'Y me levanté y conté un, dos, tres para volver a empezar’ (canta). Hay que arrancar porque la vida es eso, arrancar. Refleja un poco mi identidad como argentino y mi amor por el tango y otros ritmos latinos.
¿Cómo ves la música latina actual? Viajas por el continente y seguro escuchas mucho reguetón por ahí, ¿no es así?
Hay de todo. Con frecuencia, la música latina se asocia únicamente con el reggaetón o el corrido mexicano. Lo maravilloso de Latinoamérica es la diversidad de géneros y estilos musicales presentes. Mientras que en otras partes del mundo se destaca la música brasileña, acá también hay ritmos latinos, tropicales y nuevas propuestas urbanas como el trap, que fusiona diferentes influencias. La música está en constante evolución, y también hay propuestas alternativas que son realmente hermosas.
¿Te interesaría incursionar en el reguetón o en otro género? ¿O colaborar con algún artista reguetonero ?
No soy prejuicioso, pero no haría nada en lo que no crea. Sé en qué contextos moverme y tengo un horizonte muy amplio para entretenerme. Y humildemente me he encargado de que ese horizonte sea amplio. He derribado muchos prejuicios y estructuras desde que comencé, cuando me decían: ‘¿Pero este chico es actor o es un galán?’ ‘¿Canta o no canta?’ ‘¿Canta baladas o reggae, o acaso canta poco?’
¿Lo sufrías a eso?
Para nada. Con humildad y respeto, debo decir que la educación que recibí en casa y de mi madre, Lolita Torres, fue mucho más influyente. Ella cantó tango melódico con Charly García, folclore con Ariel Ramírez, y colaboró con Mercedes Sosa y Antonio Agrié, el violinista de Piazzolla. Esa esencia me ha acompañado siempre. Y la vida me brindó la oportunidad de cantar con una variedad de artistas, desde Rubén Blades y Juan Luis Guerra hasta Carlos Santana. Siempre estoy abierto a todo. Esto es lo mío, y seguiré ampliando mis horizontes. Por ejemplo, en el nuevo disco, incluso canto funk y soul. ‘¡La vida viene y va, dejemos todo atrás!’ (canta la canción Dejarlo todo afuera). Eso no es común en el ámbito hispanohablante, y me permite colaborar con talentos jóvenes como Luz Gaggi, que se canta todo. Y de repente, tengo en el disco cosas como... ‘¡Vivir la vida a tu manera, que el tiempo pasa y no te espera!’ (canta Kapun, mientras chasquea los dedos). Eso soy yo.
¿Cuando vas a volver a actuar?
Siempre estoy con proyectos que van y vienen, pero el oficio de actor está siempre presente en mí. Me siento actor. A pesar de dedicar más tiempo a la música, escribo mis canciones pensando en cómo se verían en un video. Por ejemplo, el protagonista de Mejor que ayer es un oficinista.
El año pasado participaste en un episodio de El Encargado, la serie de Star+ que protagoniza Guillermo Francella
Sí. A veces me involucro en pequeños proyectos, pero en algún momento debería parar, de repente cuatro meses, y meterme a hacer una serie completa, por ejemplo. Hoy es complicado debido a mi estilo de vida y mis viajes. Necesito encontrar tiempo para incorporar más actuación en mi calendario.
¿Qué pasó con la serie sobre Los Espartanos, el equipo formado por presos de una cárcel de Argentina?
Me agarró en un momento difícil. Justo me había separado y me costaba estar en un lugar durante varios meses. Mi hija iba a estar lejos, y no me sentía preparado para afrontar ese proyecto. Me dio mucha tristeza tener que renunciar. Siempre me ha gustado el rugby, y la historia era fantástica, pero no se pudo concretar.
También te gusta el tango y sos un gran admirador del uruguayo Carlos Gardel.
(Ríe) ¡Y no era Julio Sosa uruguayo! Julio Sosa, el varón del tango
También.
Yo creo que Gardel no era ni uruguayo ni argentino (ríe). Se decía que era francés, pero en realidad no era de aquí. Lamentablemente, para ustedes y para nosotros, nació en Marsella. Hay un relato que cuenta que llegó en un barco y desembarcó en Uruguay, desde donde luego cruzó a Argentina. ¡El gaucho de Tacuarembó! Y hay un libro muy interesante sobre Gardel en ese departamento. Yo casualmente hice una canción para un amigo francés, Florent Pagny, un cantante muy reconocido en Francia, con una larga trayectoria y muchos discos. Además, tiene una esposa argentina y tierras en la Patagonia. Nos hicimos muy amigos, y a él le encanta cantar en español. Así que un día le pregunté si podía proponerle una canción. Aceptó, y en una parte de la letra menciono que nos tomamos un vino, charlamos sobre las mujeres, el vino, y si Gardel nació allá o aquí.
O en el Río de la Plata, como Natalio Oreiro.
¡Claro! (ríe)
Mucha música
Con su disco Mejor que ayer como excusa, Diego Torres (Buenos Aires, 1971) acaba de iniciar hace semanas una gira que lo llevará a recorrer gran parte del continente hasta fin de año, con una escala en España en abril de 2025. A esta travesía se suma Amuleto, una nueva canción dedicada a “esas personas que con su compañía ayudan a transitar la vida”, resalta el cantante en la nota de prensa, y que da inicio a un próximo proyecto. “Es la primera canción de un nuevo disco”, anticipa. Será el 13° álbum en una exitosa carrera que ha vendido más de 20 millones de copias y ha recibido numerosos galardones, incluidos dos Latin Grammy y varios premios Billboard de la música latina.
Reconocido por éxitos como Color Esperanza, Penélope, Tratar de estar mejor y Un poquito, Torres es una de las voces más reconocidas de la región. Las entradas para su concierto en el Antel Arena tienen un precio que varía entre 1.800 y 4.800 pesos. Los menores de 3 años pueden ingresar gratis, mientras que aquellos de hasta 15 años deberán asistir acompañados de un adulto responsable. Se venden en Tickantel.