Un director diferente

El Triple concierto en Do mayor op.54 (Sony Classical) compuesto por Ludwig Van Beethoven (1770-1827) para violín, violoncello, piano y orquesta entre 1804 y 1805 pertenece al prolífico período medio del compositor, durante el cual brotan varias sinfonías, conciertos para piano, el concierto de violín, algunas sonatas para piano y su ópera Fidelio. En 1801-1802 el autor comenzaba a sentir los primeros claros síntomas de su sordera y esa minusvalía fue un acicate y un desafío al que él respondió aumentando exponencialmente la producción de obras. Se ha observado también que este impulso creador fue acompañado de un enfoque de marcada heroicidad y grandeza en la mayoría de las obras del período. Será recién en el tramo final de su obra, a partir de 1815, que encontraremos al Beethoven más ensimismado y reflexivo y también más atrevido e innovador en su escritura. El Triple concierto no es la excepción a la grandeza mencionada. Ya desde los primeros acordes se percibe ese toque de humanidad inmenso, emocionante, que solo los grandes artistas son capaces de traducir con su arte.