Mujica cuenta con el aval de Lula, Alberto Fernández y Boric para promover un proyecto concreto de integración regional

A su vez, el 6 de diciembre Mujica había informado al respecto al presidente chileno, Gabriel Boric, cuando lo visitó en el Palacio de La Moneda en Santiago de Chile. También tuvo una conversación informal las últimas semanas sobre esos asuntos con el recién asumido mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva. Tanto Boric como Lula están de acuerdo en avanzar en el camino sugerido por Mujica.

Agregó que la reunión de febrero que se celebrará en Montevideo no es “para sacarse una foto” ni para emitir declaraciones públicas que después “quedan en la nada” sino que la intención es incluir “cuatro o cinco medidas específicas” que se puedan aplicar en breve y que sean realistas.

Sobre esa base, Mujica opinó que uno de los primeros aspectos que hay que modificar es que las resoluciones sobre la integración regional tengan que ser por unanimidad, como ocurre actualmente en la Comunidad de Estados Americanos y Caribeños (Celac) y en la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur). “Hay que eliminar la palabra consenso y utilizar la palabra vaivén”, especificó.

Como actualmente las decisiones en la Celac y la Unasur deben ser por unanimidad, “si un solo país se para en las cuchillas, no se puede hacer nada”, ejemplificó Mujica. En cambio, con un mecanismo de “vaivén” los distintos países pueden adoptar las propuestas con lo que están de acuerdo y las demás dejarlas de lado, con la posibilidad de “retomarlas más adelante”, agregó.

El expresidente también se refirió, en su diálogo con Búsqueda ayer miércoles al retornar de Buenos Aires, a la importancia de que los “pueblos” de los distintos países latinoamericanos apoyen la integración como forma de que se concrete. “Los intelectuales piensan pero los pueblos sienten. Lo que no tiene pueblo atrás no se concreta”, opinó.

Con ese objetivo, señaló que una de las primeras medidas a concretar es elegir “un himno, una bandera y una fecha” de la integración latinoamericana. A su entender, esa es la forma de que la mayoría de las personas la visualice como algo real y pueda empezar a creer en ella.

Para la bandera y el himno, Mujica sugirió convocar a “un concurso internacional” con el objetivo de “entusiasmar” y con respecto a la “fecha conmemorativa” considera que hay que elegir una simbólica, que sirva “para que se hable de la integración en las escuelas, los liceos, las universidades, las oficinas públicas, en todos lados”.

La voluntad de “juntarse” tiene que “llegar al pueblo” y “serle beneficiosa”, consideró Mujica y, sobre esa base, enumeró otras propuestas que discutirá con los representantes de distintos países en la reunión de febrero en Montevideo.

Entre ellas, destacó establecer una “libre circulación” de personas entre los distintos países de América Latina, solo mostrando la cédula de identidad y sin necesidad de tener que usar el pasaporte, como actualmente ocurre entre los países que integran el Mercosur.

También que algunos profesionales universitarios, como médicos, ingenieros, arquitectos, veterinarios, agrónomos y otros, puedan ejercer su profesión en todo el continente sin necesidad de tener que revalidar sus títulos, cuando lo que hayan estudiado así lo permita.

Otro de los asuntos específicos a los que se refirió Mujica es a la posibilidad de realizar una coordinación más importante entre las distintas comunidades científicas y citó el caso específico de las “enfermedades raras”, que se pueden investigar y combatir de una forma conjunta en toda la región para aunar esfuerzos.

Al igual que lo había manifestado en una entrevista con Búsqueda publicada en la última edición, el expresidente izquierdista opinó que los distintos líderes latinoamericanos deben realizar una “visión autocrítica” de cómo se ha fomentado la integración regional y no seguir “insistiendo con la moneda única” o “con un banco central a nivel continental”, que son asuntos que deben quedar para una etapa posterior.

Mujica concurrió el domingo 1º de enero a la asunción de Lula en Brasilia invitado por el presidente Lacalle Pou junto con el también exmandatario Julio Sanguinetti. En esa oportunidad, Lacalle Pou declaró a Búsqueda que “todo suma” al referirse a la posibilidad de que la amistad entre Lula y Mujica ayude a un acercamiento entre Brasil y Uruguay. Lula visitará Montevideo el miércoles 25 y tiene previsto mantener una reunión con Lacalle Pou y otra informal con el líder del Movimiento de Participación Popular y otros dirigentes del Frente Amplio.

“Yo estoy trabajando para los nietos que no tengo. Además, la ventaja de ser de un país chico es que nadie se va a poner celoso. Tampoco me pueden decir que quiero hacer carrera política con esto, ¿no?”, concluyó el expresidente izquierdista.