Títulos, millones y un secuestro

“No lo supe en ese momento, pero aquel sábado 24 de agosto de 1991, a la 1:15 de la madrugada, en la profunda oscuridad de ese cajón de muertos, algo en mi interior cambió para siempre”, escribe ahí.

En 2003 entró decididamente al ruedo político con la fundación del partido Compromiso para el Cambio. Primero se postuló a jefe de gobierno de Buenos Aires y perdió en el balotaje con Anibal Ibarra. En 2005 fue electo diputado nacional.

Como legislador fue cuestionado por compartir el cargo con la presidencia de Boca Juniors y por sus ausencias en las sesiones de la Cámara, pero aun así su carrera siguió en ascenso. En 2007 se volvió a postular como jefe de gobierno de Buenos Aires y ganó en segunda vuelta con más del 60% de los votos. En 2011 fue reelecto en el cargo.

Para el desafío de la Presidencia Macri tuvo que volver a cambiar. Además de no pertenecer a ninguna de las dos corrientes populares históricas de la política argentina (radicales y justicialistas), cargaba con la debilidad de una imagen de millonario distante de los problemas de la gente, para parte del electorado. El ecuatoriano Jaime Durán Barba fue el asesor de la campaña presidencial en la que Macri llamó, visitó, se abrazó y tomó mate con la gente.