Allegiant Stadium. Paradise es una “pequeña”
localidad de Nevada, al sur de Las Vegas, de apenas 200.000 habitantes. Como
ahí está el aeropuerto internacional Harry Reid y corre The Strip (el Bulevar
Las Vegas, bah), muchos creen que es un barrio de esta capital internacional
del juego y de la noche y no una entidad en sí. Como sea, es una ciudad que
vive de noche y que si algún interés le puede encontrar al fútbol, este se lo
dará un cuarto de su población, compuesta de hispanoamericanos.
El Allegiant
es de muy reciente data: fue inaugurado en 2020 luego de una inversión de
1.800 millones de dólares. Es la casa de Las Vegas Raiders, de la NFL
(anteriormente Oakland Raiders y más brevemente Las Vegas Raiders) y los
Rebels de la Universidad de Nevada, también de fútbol americano pero a nivel
universitario. Símbolo de estos tiempos, el nombre se debe a la línea aérea low
cost que puso buena parte de la plata para su construcción. En su breve
historia, este templo para 65.000 fanáticos ya albergó un Super Bowl, el
último, el del 11 de febrero de 2024.
En esta Copa
América será la sede de tres partidos: Ecuador-Jamaica, el 26 de junio por el
Grupo B; Paraguay-Brasil, el 29 de junio por el Grupo D, y el de cuartos de
final que el 6 de julio enfrente al primero del Grupo C (que puede ser
Uruguay) con el segundo del D.
AT&T Stadium. Foto: Ron Jenkins, AFP
AT&T Stadium. Arlington, en Texas, es una ciudad
satélite de Dallas. Como en Estados Unidos todo suele ser gigante, es una urbe
de más de 300.000 pobladores. Hace cien años apenas sobrepasaba los tres mil
habitantes, pero su tierra apta para el cultivo hizo el resto. Curiosamente, no
es un lugar hoy reconocido por su agricultura sino por el turismo de
entretenimiento y eventos, con la lucha libre como uno de sus principales
atractivos. Y sí, hay muchos hispanos: casi un 30% de su gente lo es.
Los desvelos
de la ciudad pasan por —faltaba más— los Texas Rangers, un equipo de béisbol.
Pero los Dallas Cowboys, cinco veces campeones de la NFL, son los verdaderos
dueños de casa en el AT&T. Cuando se inauguró en 2009 se llamó Dallas
Cowboys Stadium, pero poderoso caballero es Don Dinero y desde 2013 lleva el
nombre de la compañía telefónica. Es un estadio imponente con el techo
retráctil, que pese a que su aforo actual es de 80.000 espectadores, ha llegado
a juntar más de cien mil. Más allá del deporte, acá tocaron Paul McCartney, los
Jonas Brothers, Taylor Swift y fue donde en 2016 Slash y Duff McKagan
volvieron a ser parte de Guns N’ Roses.
El “clásico del Pacífico”, Perú-Chile, está programado para el 21 de
junio por el Grupo A. También en la fase inicial, pero por el Grupo C, se
disputará Estados Unidos-Bolivia, el 23 de junio. Otro cuarto de final, el que
enfrente al ganador del B con el segundo del A, se jugará el 5 de julio.
Bank of America Stadium. Foto: Streeter Lecka, AFP
Bank of America Stadium. Con casi 750.000 habitantes,
Charlotte es la ciudad más grande de Carolina del Norte. Es un enclave
financiero importante en Estados Unidos, lo que ya es mucho decir. Ahí están
las sedes de Bank of America y Wachovia, dos de los mayores bancos del país. Si
se incluye su zona metropolitana, ahí ya hay que hablar de un millón y medio de
personas. La población latina ronda el 16%.
También es un
punto arqueológico y un polo tecnológico. Y como si fuera poco, el deporte late
como en pocos lados. Las 600 Millas de Charlotte es una de las principales
competencias del Nascar, los Charlotte Hornets animan la NBA y los Carolina
Panthers la NFL. Justamente para ser la casa de estos últimos se inauguró en
1996 este estadio (patrocinado por uno de los gigantes bancarios de la ciudad,
faltaba más), que desde 2022 deben compartirlo con el Charlotte FC de la Mayor
League Soccer (donde jugó Guzmán Corujo y se pretendió a Luciano Rodríguez).
Tiene capacidad para 75.000 personas.
Para esta Copa América, el estadio fue bendecido para recibir uno de los
partidos más decisivos y otro que nadie quiere jugar. El 10 de julio albergará
una de las semifinales (si Uruguay llega a esta instancia, la disputará acá) y
el 13 de julio el match de consuelo, el del tercer y cuarto puesto. Su
protagonismo en el torneo será tardío.
Children's Mercy Park. Foto: Jamie Squire, AFP
Children’s Mercy Park. Puede que esto sea difícil de
entender: cuando uno piensa en Kansas City seguramente lo haga por la ciudad
del estado de Missouri. Pero esta Kansas City de la Copa América está situada
en el estado de Kansas, separada de su tocaya famosa por el río Misuri a apenas
cinco kilómetros de distancia. Sí, con menos de 150.000 habitantes es un
satélite de su homónima.
Dicho esto, el Children’s Mercy Park es un estadio de fútbol. Y si bien
este deporte crece, difícilmente tenga la popularidad de otros en Estados
Unidos. Es un estadio chico, con menos de 20.000 asientos, que pueden
aumentarse a 25.000 en caso de recitales. Desde su inauguración en 2011 es la
casa del Sporting Kansas City y también ha sido escogida en ocasiones por la
selección nacional de Estados Unidos.
Más pequeño y
menos vistoso que el resto, este estadio fue “premiado” con un partido de
relativo atractivo por el Grupo A el 25 de junio: Perú-Canadá.
Exploria Stadium. Foto: Alex Menendez, AFP
Exploria Stadium. Orlando, en el
estado sureño de Florida, es sinónimo de parques temáticos: Walt Disney World
Resort, Magic Kingdom, Disney’s Hollywood Studios, Epcot Center, Disney’s
Animal Kingdom, Disney’s Blizzard Beach, Typoon Lagoon, Sea World y las
instalaciones de Universal Studios. El turismo es una actividad prioritaria para una
población de menos de 200.000 personas; también es una ciudad universitaria con
un área metropolitana 10 veces mayor. Y en todo este combo, se suma el deporte.
Orlando
Magic, en la NBA, es el nombre rutilante. De 2015 a esta parte, el Orlando City
(el clásico rival del Inter de Miami, el de Leo Messi y Luis Suárez) también
está haciendo ruido. Ahí juegan los uruguayos Facundo Torres y Nicolás
Lodeiro, que muestran sus habilidades en este estadio de 25.000 localidades
inaugurado en 2017. Como todo estadio de Estados Unidos dedicado sobre todo al soccer,
es más pequeño que el promedio.
Justamente
por ese tamaño se le asignaron dos partidos en fase de grupos entre equipos que
no están entre los candidatos: Canadá-Chile por el A, el 29 de junio, y
Bolivia-Panamá por el C, el 1 de julio.
GEHA Field at Arrowhead Stadium. Foto: David Eulitt, AFP
GEHA Field at Arrowhead Stadium. Kansas City, esta sí la grande,
la propia, la famosa, la histórica, la de más de medio millón de habitantes,
tiene otra particularidad que la hace llamativa. Es la segunda ciudad con más
fuentes en el mundo, 160, solo superada por la capital italiana, Roma. Y es una
ciudad con una fuerte presencia del gobierno de Estados Unidos, con 146
agencias federales ahí instaladas, siendo un principal empleador local, algo
que a los libertarios les debe provocar escozor.
El Arrowhead,
luego rebautizado por motivos (y sí) de patrocinio, es uno de los vejetes de
esta Copa. Fue inaugurado en 1972 y desde entonces ha mantenido su aforo en el
entorno de los 80.000 espectadores. Claro, ahí juegan los Kansas City Chiefs,
varias veces campeones de la NFL.
Semejante
mastodonte solo recibirá un partido en esta Copa América, pero este merecerá
toda la atención allá y acá: Estados Unidos-Uruguay se medirán por el Grupo C
el 1 de julio. Ya se anunció que será sede del Mundial de Fútbol 2026.
Hard Rock Stadium. Foto: Arturo Jiménez, AFP
Hard Rock Stadium. Miami Gardens está ubicado en el
condado de Miami-Dade, cuya capital es Miami. Todo esto remite a sol, playa,
palmeras, delfines, noches agitadas y mucho, mucho idioma español. Y si se
habla español, el deporte favorito es el fútbol, lo que explica mucho de esta
sede. Fuera de ello es una pequeña ciudad de poco más de cien mil personas.
Es obvio que
para llenar el Hard Rock Stadium tiene que venir gente de toda Miami y el
estado de Florida. Inaugurado en 1987, con capacidad para más de 75.000
espectadores, tanto ha sido la casa de los Miami Dolphins de la NFL, como en su
momento lo fue de los Florida Marlins, de béisbol, o alojó partidos de
lacrosse y competencias de lucha libre. Como todos estos recintos multiuso,
todavía suenan los acordes de las presentaciones de The Who, U2, Madonna o
Taylor Swift.
Si en todo
Estados Unidos la población latina está estimada en un 18,6 %, en Miami ese
porcentaje sube a 70,2 %. No es casual que la final de la Copa América,
prevista para el 14 de julio, se juegue acá. Antes de eso, Uruguay-Panamá se
verán las caras por el Grupo C, el 23 de junio, y Argentina-Perú lo harán el 29
de junio por el A. Y en todos los casos se asegura que el estadio estará lleno.
Levi's Stadium. Foto: Thearon W. Henderson, AFP
Levi’s Stadium. Santa Clara, en California, es
otra ciudad satélite, en este caso, de San Francisco. Nuevamente, es una ciudad
de unos pocos centenares de miles de personas la elegida como sede para este
torneo. Es un polo tecnológico que alberga las matrices de Intel o McAfee,
entre otras.
El Levi’s Stadium (acá el patrocinante es el gigante de la vestimenta) es
el mayor estadio de la ciudad, con capacidad para 73.000 personas. Ahí juegan
los San Francisco 49ers, un nombre pesado del fútbol americano, desde que fue
inaugurado en 2014. También hay una cancha para el soccer, el Buck Shaw,
donde supieron jugar los San José Earthquakes. Que tenga tribunas para apenas
10.000 espectadores deja claro dónde está el interés local en uno y otro
deporte. Sí vale la pena decir que aquí se jugaron cuatro partidos de la Copa
América Centenario de 2016, entre ellos la victoria de Uruguay ante Jamaica por
3 a 0 y la histórica goleada de Chile sobre México por 7 a 0.
En esta Copa,
Ecuador-Venezuela, el 22 de junio por el Grupo B, y Brasil-Colombia, el 2 de
julio por el Grupo D, son los partidos programados en este estadio.
Mercedes-Benz Stadium. Foto: Alex Slitz, AFP
Mercedes-Benz Stadium. Otra referencia para tomar en
cuenta el tamaño del país sede. La ciudad de Atlanta es la sede de nombres tan
grandes como CNN, Coca Cola y AT&T, es la capital de un estado, Georgia,
además de su mayor urbanización. Su aeropuerto, el Hartsfield Jackson, es el
que tiene más conexiones del mundo. Pero si de población se trata, con 540.000
habitantes no está ni entre las 30 más grandes de Estados Unidos. Eso sí: si se
considera su zona metropolitana, ya se habla de un monstruo de seis millones de
cabezas, tal la importancia que tienen en ese país los suburbios y las ciudades
satélite. Históricamente, es donde comenzaron las luchas por los derechos
civiles de la población negra.
El Mercedes-Benz Stadium, con capacidad para 71.000 personas, se inauguró
en 2017. En la NFL, los Atlanta Falcons los llenan con cierta regularidad. Los
Atlanta United, de la MLS, tienen un poco más de problemas en acarrear gente.
Su brillo
para la Copa América 2024 se limitará a dos partidos de grupo:
Argentina-Canadá, el 20 de junio por el Grupo A, y Estados Unidos-Panamá, el 27
de junio por el C.
MetLife Stadium. Foto: Bruce Bennett, AFP
MetLife Stadium. East Rutheford es un pueblo de
8.700 personas cuyo principal centro neurálgico es un enorme complejo deportivo
llamado Meadowlands. Es que esta ciudad del estado de Nueva Jersey, sin más
atractivo que ese complejo, está como mucho a 22 minutos en auto de Nueva York.
El MetLife
Stadium es el que desde 2010 sustituyó al viejo estadio de los New York Giants,
un histórico de la NFL. También ahí juegan los New York Jets, en esa misma
liga. Fue sede de un Super Bowl, el de 2014, y también de la final de la Copa
América Centenario 2016, en la que Chile derrotó a Argentina en las finales.
Con 83.000 localidades —casi 10 veces la ciudad en la que se encuentra—, es uno
de los más grandes del país. Y con 3,6 millones de latinos en Nueva York y
otros 1,8 millones en Nueva Jersey, el sold out es prácticamente seguro,
sin necesidad de apelar a los fans locales del soccer.
Y hay buenos partidos programados. Argentina y Chile volverán a verse las
caras ahí el 25 de junio por el Grupo A. Por el Grupo C, Uruguay y Bolivia
cruzarán sus caminos el 27 de junio. Tomando en cuenta el tamaño de la
colectividad uruguaya en la cercana Elizabeth, casi podría pensarse que la
Celeste será local. Finalmente, el 9 de julio se jugará la otra semifinal.
NRG Stadium. Foto: Logan Riely, AFP
NRG Stadium. Ahora sí se habla de una ciudad
grande. Houston, en Texas, es la mayor urbanización al sur de Estados Unidos,
con 2,2 millones de habitantes. Ahí funciona la Central Espacial Lyndon B.
Johnson de la NASA (el “Houston, tenemos un problema” de la película Apollo
XIII no fue una licencia artística), el Texas Medical Center y las oficinas
de varios de los pozos petrolíficos más importantes del país. Y dada su
cercanía con México, tiene un 43% de población latina.
Semejante ciudad merecía un estadio como el NRG, inaugurado en 2002. Sus
72.000 butacas se llenan tanto para ver a los Houston Texans, un joven equipo
de la NFL que por ahora no hace mucho ruido, o para asistir a la Houston
Livestock Show and Rodeo (HLSR), una exposición ganadera y competencia de
rodeo (las “jineteadas” del norte) de tamaño monumental y que dura unos veinte
días.
México
(localísimo) jugará acá contra Jamaica por el Grupo B el 22 de junio.
Colombia-Paraguay, por el Grupo D, será el 24 de junio. El 4 de julio se
disputará un partido de cuartos de final.
Q2 Stadium. Foto: Ron Jenkins, AFP
Q2 Stadium. La ciudad de
Austin, también en el populoso estado de Texas, del cual además es la capital,
tiene un millón de habitantes. La tercera parte de sus pobladores son hispanos.
Es un centro tecnológico de mucha importancia, donde tuvieron sedes IBM, Texas
Instruments y Motorola. También es un destacado polo universitario.
Curiosamente, su primer equipo deportivo profesional de importancia, nacido en
2018, no tuvo que ver con el básquetbol, el fútbol americano, el béisbol ni el
hockey sobre hielo.
El Q2 se
inauguró en 2021, tiene capacidad para 21.000 personas y es la casa del Austin
FC. Sí, el primer equipo profesional importante de la capital de Texas es de
fútbol. Es un estadio pensado para este deporte, que en 2022 también albergó un
torneo de rugby en modalidad seven (otra disciplina que Estados Unidos desvela
a más bien pocos).
El 30 de
junio se jugará Jamaica-Venezuela por el Grupo B y el 2 de julio se dará el
Costa Rica-Paraguay por el D.
SoFi Stadium. Foto: Katelyn Mulcahy, AFP
SoFi Stadium. Inglewood es un satélite de Los
Ángeles de 112.000 habitantes. Fue sede del Hipódromo de Hollywood Park y del
majestuoso L.A. Forum, que tanto fue el hogar de Los Angeles Lakers hasta 1999
(o sea, en su reinado durante el showtime de la NBA) como aforo para
recitales históricos como los de Led Zeppelin o memorables peleas de boxeo como
las de Muhammad Ali.
El SoFi es otra construcción reciente, inaugurado en 2020. Costó 4.900
millones de dólares y ya fue sede del Super Bowl 2023 y —ya en fútbol— de la
final de la Copa de Oro de la Concacaf, también en 2023, en la que México
derrotó a Panamá. Tiene capacidad para 73.000 personas. Ya se sabe que será
sede de la Copa del Mundo 2026 y de los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028.
Llamó la
atención que un estadio tan moderno solo sea utilizado en dos partidos de la
etapa inicial. Por el Grupo D, Brasil-Costa Rica jugarán el 24 de junio; por el
B, Venezuela-México, el 26 de junio.
State Farm Stadium. Foto: Christian Petersen, AFP
State Farm
Stadium. Con 230.000 personas, Glendale, en el estado de Arizona, es una ciudad
cálida y desértica que tomó trascendencia mundial cuando por dos días, el 17 y
18 de marzo de 2023, cambió su nombre a Swift City porque el estadio State Farm
fue el escogido por Taylor Swift para dar inicio a su The Eras Tour.
Justamente,
la construcción de ese recinto, inaugurado en 2006, es parte de un intento
municipal para fomentar el crecimiento del distrito de Yucca, muy poco poblado.
Es, casi, el único atractivo local. Es un estadio que, según la disposición,
puede albergar a entre 70.000 y 80.000 almas. Relativamente barato, el proyecto
para su construcción requirió apenas 455 millones de dólares. Ahí juegan los
Arizona Cardinals de la NFL y desde 2007 se realiza el Fiesta Bowl, un evento
de fútbol americano universitario. Si del fútbol que importa en el resto del
mundo se habla, aquí también se jugaron tres partidos de la Copa América
Centenario 2016, entre ellos la derrota de Uruguay ante México por 3 a 1.
En esta Copa
próxima, Colombia-Costa Rica jugarán por el Grupo D, el 28 de junio, y
México-Ecuador por el Grupo B, el 30 de junio. El 6 de julio de 2024 se
disputará también un partido por cuartos de final entre el ganador del Grupo D
y el segundo del C, que podría llegar a ser Uruguay.