Murales decorativos: tres artistas hablan de una tendencia que crece en interiorismo

Natalia Silva, Antonio Carrau y Paula Piquet son tres artistas que, habiéndose iniciado en el mundo del arte por distintos motivos, encuentran en el diseño de murales un hobbie que complementan con otras aristas profesionales. Con distintos estilos y técnicas, cada uno de ellos logra una propuesta creativa y personal a la vez, capaz de sumar valor agregado a paredes despojadas y convertirlas en verdaderas obras de arte.

Fotos: Lucía Durán

A los ocho años, Natalia le pidió a su madre que la anotara en un taller de pintura que había a la vuelta de su casa. Y ese fue el punto de partida de una vida dedicada al arte. Comenzó a pintar murales para viviendas y locales comerciales como un pasatiempo, sin imaginar que esta tarea acabaría siendo un trabajo complementario al que realiza como diseñadora de modas.

Foto: Lucía Durán

Si bien el estilo de murales que pinta es muy diverso, lo que más le gusta es generar diseños realistas y figurativos, trabajar con profundidades y escalas de color. Antes de definir el diseño, presenta algunos bocetos en los que toma en cuenta cómo es la estética del lugar y cuál es su paleta de colores. "Hay veces que el mural se suma a un diseño previo, pero en ocasiones es el puntapié que marca el estilo a seguir. En ambos casos siempre busco que el cliente se identifique con la obra, porque será un punto de atención por el que muchas veces se identifique a ese lugar", cuenta Natalia.

Foto: Mauricio Rodríguez

En cuanto a sus técnicas y materiales no hay muchas reglas; le basta un poco de pintura acrílica al agua y un buen pincel en la mano para abrir un abanico de infinitas posibilidades para trabajar sobre paredes de interior.

Paula Piquet
@decopiq

Foto: Lucía Durán

De su madre heredó la pasión por el arte y de su padre la facilidad por las manualidades. A Paula siempre le llamaron la atención la naturaleza, las formas y los colores, elementos que hoy son parte indisociable de su estilo artístico.

Fotos: Lucía Durán

La primera vez que pintó un mural fue en la Sala de Maternidad del Hospital Italiano y desde entonces este hobbie se ha convertido en un complemento a su profesión como arquitecta. Fundadora de su propio emprendimiento Decopiq, dedicado al arte decorativo, le gusta pintar diseños relacionados con la naturaleza, pero también, cada tanto, alguno más abstracto.

Este diseño fue un regalo de Paula para su ahijada recién nacida, en el que optó por grandes formas en colores pasteles que acompañan la armonía y la simpleza de un dormitorio infantil. Foto: Lucía Durán

"Como trabajo por encargue, muchas veces el diseño viene propuesto por el cliente, aunque siempre priorizo que los murales sean acordes a mi estilo", explica la artista, que al momento de la acción, prefiere pintar directo sobre la pared, guiándose por un bosquejo en papel, pero sin dibujarlo sobre el muro para no encasillarse tanto en las figuras.

Antonio Carrau
@a_carrau

Foto: Adrián Echeverriaga

A Antonio siempre le llamaron la atención los grafitis y los murales que descubre cuando camina por la ciudad. La curiosidad por esos soportes lo llevó a probar algunos diseños sobre pared. Pintó su primer mural en el restaurante de un amigo y pronto comenzó a trabajar por encargue en algunas casas y, sobre todo, en comercios.

Aunque estudió diseño gráfico, Antonio se considera autodidacta. La computadora es su gran herramienta de trabajo para la creación de bocetos que luego se trasladan al muro. "No hay muchas reglas a la hora de pintar murales", dice este artista que se caracteriza por un estilo muy personal, no figurativo y colorido.

El boceto de este mural se diseñó íntegramente en computadora partiendo de la inspiración de una pintura que había realizado Carrau. Se utilizó la técnica de forma-contraforma y un contraste de colores sólidos.  Foto: Lucía Durán

Para sus diseños utiliza pinturas de pared o piso, que tienen buen poder cubritivo, e incluso aerosoles que son utilizados de un modo diferente al del grafiti. Varios de sus murales están realizados con una técnica que parte del collage, inspirada en el concepto de que cada forma tiene su contraforma; siendo estas dos partes un complemento que le da un carácter muy interesante a la obra.