Los emprendimientos son, además, “las dos caras de una misma moneda”, dijo un alto jerarca del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM). Es que ambos surgieron muy vinculados a Argentina, en la administración de Tabaré Vázquez, y su concreción llega cerca del final del gobierno de José Mujica.
Con un costo de U$S 350 millones, la planta presentada el martes en la Refinería de La Teja es la principal obra pública de este gobierno. A la inauguración asistió Mujica y buena parte del gabinete, todos los jerarcas del sector energético, decenas de legisladores y la cúpula del movimiento sindical. Por Argentina estuvo la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, con varios secretarios de Estado y el presidente de YPF, Miguel Galuccio.
Azufre y fertilizantes.
El sulfuro en el combustible es extremadamente dañino para los autos y máquinas industriales. Su contenido se mide en partículas por millón (ppm). Según los datos oficiales, las naftas uruguayas tienen 1.000 ppm y el diesel 8.000 ppm. Las cifras ubican al país como uno de los peores en toda Latinoamérica y gran parte del mundo.
En la región, según la información a la que accedió Búsqueda, los niveles de Uruguay son solo comparables a los de Cuba (con 8.000 ppm en diesel y 1.200 ppm en naftas) o Ecuador (con 7.000 ppm en diesel y 2.000 ppm en naftas). En la otra punta se ubica Chile, con 50 ppm en diesel y 30 ppm en sus naftas. Costa Rica también tiene como máximo nivel de azufre en diesel 50 ppm.
El nivel de azufre de los combustibles uruguayos genera problemas en la industria automotriz. Los importadores resolvieron no traer los autos más modernos porque el diesel uruguayo “destruye” los motores de última generación (Búsqueda Nº 1.575).
Para solucionar ese problema, Ancap comenzó a importar un diesel de mejor calidad con menos azufre: 50 ppm.
A nivel empresarial, la estatal tiene excedentes de nafta que no logra comercializar en el mercado interno. Esas gasolinas son “cada vez más difíciles de vender” a otros países, por lo que se debe abaratar mucho su precio. Aun así, apenas Paraguay y un par de países africanos están dispuestos a comprar el combustible sulfuroso, reconoció en su momento el entonces presidente de Ancap Daniel Martínez (Búsqueda Nº 1.407).
Así, la construcción de una planta desulfurizadora pasó a ser uno de los principales objetivos de la empresa, que en 2007 resolvió realizar los llamados para su construcción.
Con la desulfurizadora, los niveles de azufre bajarán a 30 ppm en gasolinas y 50 ppm en diesel, niveles estándares a nivel internacional, que viabilizan una mejor importación automotriz y la venta de naftas, y alargan la vida útil de la refinería de La Teja.
Además, Ancap dispondrá de unas 35 toneladas de azufre que planea utilizar en la producción de fertilizantes, un mercado en el que incursionó a mediados del año pasado.
“Marchar al spiedo”.
Si bien todos destacaron la importancia del proyecto durante la oratoria inaugural, fue Mujica el que lo planteó mas frontalmente: “Esto es bien sencillo; si no hacía esto, Ancap se transformaba en un montón de fierros viejos en un periquete. ¿Por qué? Porque los motores contemporáneos que se están haciendo no bancan más el azufre, sencillamente quedamos fuera del circuito y entonces, por el lado del basurero, de la chatarra, nos quedábamos sin industria”.
“Podíamos hablar de patria y de símbolo y de todo lo que quieran pero marchábamos al spiedo”, agregó.
Además de agradecerles a los trabajadores uruguayos y argentinos por la construcción, el mandatario tuvo un especial recuerdo al fallecido presidente venezolano Hugo Chávez: “Un sistema de crédito benigno durante mucho tiempo en la cuenta petrolera nos permitió acumular los recursos para hacer inversiones de este tipo”.
Mujica dijo que los “líos y conflictos” que existen entre Uruguay y Argentina son algo “natural” porque “uno se pelea con los vecinos”. Sin embargo destacó la necesidad “imprescindible” de integrarse para negociar en bloque, ya que “la globalización es un hecho” y si no se negocia entre muchos “no se es nada”.
La presidenta argentina dijo que la inauguración de la planta es “la muestra más cabal de la integración y de esta necesidad de integración”.
Agregó que a través de su participación en la exploración de un bloque de la plataforma marítima uruguaya su país “está contribuyendo a la integración y soberanía de la región”.
Demoras y bautismo.
El presidente de la petrolera estatal, Raúl Sendic, habló del proceso de toma de decisiones que llevó a la desulfurizadora. “No fue sencillo tomar la decisión de realizar una inversión de U$S 350 millones cuando eso afecta los resultados fiscales y el gasto. Había que animarse a tomar la decisión”.
En 2008, en pleno conflicto entre Uruguay y Argentina por la instalación de la entonces Botnia (hoy UPM), se abrieron las ofertas para la desulfurizadora y surgió una diferencia de U$S 100 millones más en el costo de la obra.
La diferencia disparó fuertes enfrentamientos en el interior del gobierno entre los principales jerarcas de Ancap, secundados por el MIEM, y el Ministerio de Economía (Búsqueda Nº 1.467).
Sendic recordó las “muchas peleas” y “líos” que hubo en torno a la planta, pero destacó que ahora que es una realidad “no es solamente una planta que quitará el azufre, sino que es un blindaje a la refinación en el Uruguay”.
“Si no fuéramos a la producción de combustibles de alta calidad, cada día tendríamos que importar productos más caros y exportar los productos cada vez más baratos”.
El presidente de Ancap también aprovechó el evento para darle un nombre a la refinería de La Teja y anunció que a partir de ahora se llamará refinería Eduardo Acevedo Vázquez, en honor al primer presidente de la petrolera.
Además de descubrir una placa con su nombre, Sendic hizo un emocionado homenaje a Acevedo, de quien dijo que era un visionario. “(Fue) mucho mejor ministro de Industria que yo o Roberto (Kreimerman)”, afirmó.
La inauguración llegó dentro del último plazo establecido por la Unidad Reguladora de Servicios de Energía y Agua (Ursea) en su reglamento de calidad del combustible. El ente regulador estableció que para el 1º de octubre el azufre en gasolinas no podía sobrepasar los 30 ppm y en diesel los 50 ppm.
La Ursea ya había prorrogado la entrada en vigor de estos plazos, ya que inicialmente estaba previsto que se llegara a estos niveles en octubre del 2012. Sin embargo Ancap solicitó una prórroga debido a varios atrasos en la construcción de la planta.
Otros niveles.
Los nuevos niveles de azufre pondrán a los combustibles uruguayos dentro del estándar regional, pero alejado de los nuevos límites establecidos en Estados Unidos, Canadá y Europa.
En varios países ya se está aplicando como norma el diesel “ultra liviano”, que no supera los 15 ppm. En la Unión Europea desde el 2005 se aplica un reglamento que no permite la distribución de gasoil con un nivel de azufre mayor a 50 ppm. Sin embargo, a partir del 2009 se redujo a 10 ppm.
En Alemania se realizó una política de incentivos tarifarios a partir de enero del 2003 para el gasoil consumido con 10 ppm o menos. En 2006 el porcentaje promedio de azufre era entre 3 y 5 ppm. En Suecia comenzaron un proceso similar en 1992 y para el 2000 el 98% del mercado sueco de diesel tenía entre dos y cinco ppm.
En 2007 Canadá y Estados Unidos impusieron un diesel con 15 ppm de azufre para todos los motores, incluso los de los ferrocarriles y las maquinarias pesadas.
Desarrollo
2013-08-29T00:00:00
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