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Ensalada de chauchas, remolacha, queso azul y huevo mole
Una variante a la típica ensalada de chaucha y huevo
imagen de Ensalada de chauchas, remolacha, queso azul y huevo mole
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Las chauchas son un vegetal delicioso, pero a veces nos cuesta pensar cómo salir de la típica ensalada de chaucha y huevo. Hoy propongo esta variante, en la que la combinamos con remolacha rallada en crudo, queso azul y un huevo jugoso. En esta ocasión usé cebolla frita para aportar un crocante, es algo superfácil de hacer, queda delicioso y les suma un sabor y una textura interesante a varias preparaciones. Se puede agregar a un arroz, una pasta o cualquier ensalada. La cebolla frita se puede hacer y guardar en un frasco hermético, y dura por lo menos dos semanas.
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500 g chauchas 3 remolachas chicas 150 g de queso azul 100 g de cebolla frita o algún otro crocante como maní, almendra o nueces tostadas 4 huevos mole ½ atado de rúcula Perejil Vinagreta de mostaza de Dijon (1 cda. de vinagre de vino, ½ cda. de mostaza de Dijon, 3 cdas. de aceite de oliva)
Procedimiento Limpiar las chauchas, cortar al sesgo y blanquear. En esa misma agua cocinar los huevos mole. Pelar las remolachas en crudo, rallar con un rallador grueso, agregar sal, pimienta negra y oliva, mezclar bien para quebrar un poco la remolacha y empezar a saborizarla. Reservar. Lavar la rúcula. Quebrar el queso azul en pedazos pequeños irregulares. En un bowl colocar las chauchas, las hojas de rúcula y el perejil, agregar sal, pimienta y vinagreta de Dijon. Mezclar bien. En un plato colocar las remolachas ralladas por debajo, luego la mezcla de chauchas y rúcula, al costado el huevo mole cortado en mitades, y por último la cebolla frita.
Para hacer la cebolla frita Pelamos las cebollas y cortamos en mitades. Cortamos en pluma y freímos de a poca cantidad, a fuego bajo, hasta que esté bien crocante y color ámbar. Pasamos por papel absorbente, dejamos enfriar y guardamos en recipiente hermético.
Del libro Relatos y recetas, Editorial Grijalbo, Penguin Random House.