Aldo Alfaro cumplió 50 años y lo festejó a lo grande

“Siempre quise hacer una fiesta así, me gustaba la idea de ser el mejor anfitrión que alguien pudiera imaginar, invitar a toda la gente que quiero y darle las mayores comodidades”, explicó a Galería. Y si se trata de comodidades, los más de 300 invitados las tuvieron todas. En la mañana del sábado 3 hicieron el check in en el hotel Radisson Victoria Plaza, donde permanecieron hasta las 18 horas del domingo.  

En las habitaciones, ejemplares de Búsqueda y Galería modificados para presentar noticias sobre la fiesta y la vida del protagonista esperaban a los huéspedes. También había cajas de la zapatería Aldo y pasajes de ómnibus, anunciando que el grupo saldría a almorzar fuera del hotel. 

Antes de eso, sobre el mediodía, fue el momento de la aparición de Aldo. Se trató de un cóctel combinado con un babyshower, para el que el piso 25 del hotel se decoró con globos y fotos de la infancia del cumpleañero. 

Más tarde, en una serie de ómnibus que anunciaban como destino el Séptimo Cielo y la Mansión Playboy, los invitados se trasladaron a la chacra La Redención, disfrutando a bordo de un espectáculo de drag queens y más personajes. Ya en la chacra, compartieron un asado, bailaron al ritmo de la DJ Paola Dalto y disfrutaron del show que Aldo brindó junto a una murga, pese a que dice odiar ese estilo musical. 

El cronograma siguió con la merienda, que se sirvió en el hotel, y luego los invitados subieron a sus habitaciones para descansar y prepararse para la tan esperada fiesta de la noche. La cita era a las 20 horas en el segundo piso del hotel, donde un corredor decorado para recrear un aeropuerto —incluso con sonido de ambiente de llamados de vuelos— conducía a la fiesta, para la que había que pasar previamente por “migraciones”, guiados por azafatas y pilotos. Los invitados tenían un boarding pass a Las Vegas y, luego del check in, llegaban por fin a lo que parecía ser una réplica de la ciudad, con slots y la capilla Rose Chapel, donde se podía contraer matrimonio en una ceremonia oficiada por Elvis Presley. Comenzó la fiesta cuando se abrieron las puertas del salón principal, donde esperaban mesas con decoraciones alusivas a Las Vegas, juegos de naipes, dados y fichas. 

Durante la noche hubo varios shows, entre ellos el del instagrammer argentino Jero Freixas, la banda El gran Domingazo, Aldo Martínez, DJ Chismosa, DJ Koolt y Cristian Moranata. Se proyectó además un video de la vida de Aldo siguiendo el formato de uno de los espacios del viejo VideoMatch, presentado por Pablo Granados. Una gran pista de baile en el centro dio lugar al disfrute y al baile mientras pasaban los shows. En la fiesta apareció también un tortafritero callejero, que preparaba tortas fritas con diferentes toppings. 

El look de Aldo causó sensación. Con su traje color salmón subió al escenario, y desde allí escuchó cómo todos los invitados le cantaban el Feliz cumpleaños. Después llegó el momento de servir las tortas y luego un after party. 

“Trabajé mucho para tener esta vida. Me dediqué a que las cosas sucedieran. Laburo en lo que me gusta, me va bien, tengo salud, tengo muchos amigos. No me puedo quejar, si no, sería un malagradecido”, aseguró; “Los 50 me agarran muy feliz por todo lo que me ha sucedido y me está sucediendo”.

Al día siguiente, Aldo hizo el check out temprano y se fue, como de costumbre, al Gran Parque Central a ver a su querido Nacional. Esta vez, vistió una camiseta firmada por Luis Suárez, que hacía mención a sus 50 años. Le trajo suerte.n

fotos: valentina weikert