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El Stand Up Paddle es el deporte del verano

En la década de los 60, los instructores de surf empezaron a pararse en sus tablas para poder ver a sus alumnos o sacarles fotos. En ese entonces, para impulsarse usaban rudimentarios remos. A partir de los años 2000 esta modalidad empezó a usarse como entrenamiento y ahora el Stand Up Paddle (SUP), como se conoce a este deporte, se ha masificado.

Esta temporada, en las tardes del Este uruguayo, se puede ver gente de pie sobre sus tablas con remos más modernos disfrutando de una modalidad que, según los expertos, es apta para todos. Una de las diferencias con el surf es que el SUP se puede practicar en aguas calmas, ya sea en el mar, río, puertos, lagos o cualquier masa de agua.

Marcelo Roade, instructor de SUP de Alma Aventura, dijo a Galería­ que se trata de una modalidad que está de moda y especificó que se puede practicar sentado, arrodillado o parado. “Nosotros organizamos actividades en aguas tranquilas”, ya que se trata de la categoría SUP remo. Hace cinco años que Roade organiza jornadas deportivas al aire libre, como escalada, trekking, rappel, cabalgata o talleres de astrofotografía.

La mañana en la que Galería presenció uno de los entrenamientos el viento soplaba fuerte y no estaban dadas las mejores condiciones para practicar el SUP. La clase empezaba a eso de las 10.30 en el arroyo Maldonado de Punta del Este y Roade pronosticó que más sobre el mediodía el viento iba a amainar, cosa que sucedió y permitió a los participantes disfrutar del deporte con más tranquilidad.

“El SUP viene creciendo exponencialmente año a año. Cuando empezamos, hace cinco años, la gente no lo conocía y se empezaron a acercar de a poco. Por lo general vienen y prueban, tienen en la cabeza comprarse una tabla para empezar a salir solos”, dijo. El instructor afirmó que no son necesarias grandes habilidades, basta con no ser una persona sedentaria. Incluso no es un requisito saber nadar, porque la tabla sirve de protección y, para más seguridad, se pueden usar chalecos salvavidas. “Muchas personas llegan y nos dicen que no tienen un buen equilibrio y temen no poder pararse. Lo que hacemos es incentivarlos para que prueben y vean que sí lo pueden hacer. Empiezan sentados y cuando agarran confianza se paran, hay técnicas para hacerlo. Tampoco hay problemas de peso porque se usan tablas que aguantan mucho, son inflables y tienen mucha flotabilidad”, sostuvo. Una de las actividades destacadas de Alma Aventura es el SUP de luna llena, que consiste en salir a remar en las noches bajo la luz de la Luna, remar en el arroyo y terminar con un brindis bajo las estrellas.

Silvina Rocha, además de ser una empresaria dedicada a la comunicación corporativa, hace algunos años fue seducida por el deporte y nunca más lo dejó. Hoy, junto con Ticky, instructora de yoga, enseña otra modalidad: SUP Yoga. “Este es una hobby para mí desde hace tres años, y este año ayudo a Ticky a enseñar la parte teórica”, contó Rocha, que implica enseñar­ a remar. El remo tiene la forma de una cuchara, por lo que hay que usarlo del lado correcto y según para qué lado se reme es la forma en la que va avanzando la tabla.

“Les doy las herramientas básicas para salir al agua y poder disfrutar de la jornada”. Rocha aclaró que al SUP lo empezó a disfrutar más cuando empezó a comprender la parte técnica. “Tomarse el tiempo para tener alguna clase con un profesor es fundamental. Uno aprende a agarrar de forma correcta el remo, aprende cuáles son las normas de seguridad y pararse es mucho más seguro y disfrutable. Tener una clase previa es necesario para poder avanzar en este deporte, que es excelente para mujeres y hombres tanto para formar el cuerpo como para fortalecerlo”.

En tanto Mariana Vega, más conocida como Ticky, es una profesora de yoga que practica SUP yoga­. La instructora aclaró a Galería­ que se trata de una actividad que hace en enero, y destacó que se produce una “conexión con la naturaleza”. “Una cosa es hacer yoga en tierra, que terminás sintiéndote bien, y otra es hacerlo en el agua, con todo el poder de la medicina que trae el ambiente, estos paisajes increíbles”.

A pesar de que es una actividad para todos, la profesora dijo que no da clases a menores y especificó que su público principal son las mujeres. “Esto es algo muy intuitivo y las tablas son muy estables”, concluyó.

En Paikea SUP dan clases grupales e individuales de Stand Up Paddle, SUP yoga a adultos y jóvenes. También hacen remadas a la luz de la Luna en Punta del Este­. Como en el resto de las prácticas, dieron una clase teórica antes de meterse en el agua y lograron que las personas disfrutaran de las actividades.

A principios de febrero, frente al Hotel La Serena, en la playa Mansa, Medispa organizó su primer encuentro de SUP yoga. Fue abierto al público y convocó tanto a huéspedes del hotel como a turistas que disfrutaban de la playa. La instructora Gimena­ Márquez­ lideró la actividad en conjunto con el instructor de tabla de Shakaswind Fabián Barrios, quien ofreció instrucciones de seguridad necesarias debido al viento que sopló esa tarde. 

Los participantes, de los cuales pocos tenían experiencia previa, fueron ganando confianza en las tablas, al punto que lograron hacer diferentes posiciones de yoga.

El SUP, en sus distintas modalidades, vino para quedarse y ser una práctica que puede ser disfrutada por toda la familia.

Fotos: Mauricio Rodríguez y Valentina Weikert