Crisis en el Palacio

—Esto es una tremenda injusticia, he logrado llevar adelante una gestión espléndida, ganando a veces hasta dos partidos seguidos, trayendo a una gloria aurinegra como Saralegui para dirigir el equipo, creando un clima interno de armonía y concordia como hace tiempo no se veía, y los socios deberían haber puesto una lista de Barrera de las elecciones anteriores para sorprender a todos y confirmar mi gloriosa actuación dirigencial —declaró Barrera desde una de las ventanas del Palacio a los numerosos periodistas que se han dado cita en el Palacio que lleva asimismo el nombre del otrora presidente Gastón Güelfi, ante la inesperada reacción del presidente aurinegro—. No me voy nada, y aquí me quedaré para que la historia me juzgue —declaró con énfasis.

—Que ni se arrimen, porque los vamoasacar del jopo los vamoasacar, manga de usurpadores —dijo el notorio hincha y barrabrava aurinegro, blandiendo un garrote de madera con un clavo en la punta, mientras compartía una botella de grapa con sus acólitos, también armados de trozos de baldosa arrancados del pavimento que rodea la sede del club.

La actitud de Barrera ha sido abierta y (sorprendentemente) apoyada por los presidentes de Venezuela y de los Estados Unidos.

Nicolás Maduro, en su audición de ocho horas Venezuela libre del día de ayer, declaró que “las elecciones del Club Peñarol han sido falseadas sin duda por agentes del capitalismo salvaje que trituran la libertad de expresión en nuestro continente, y el Dr. Barrera debe permanecer en su cargo para la gloria del Peñarol, equipo del pueblo, consolidando así la lucha contra la aristocracia uruguaya que desprecia los valores populares. No me extrañaría que la mano del monigote Guaidó estuviera detrás de este atropello”. Por su parte, el presidente Trump tuiteó en su hilo que “los que desconocen a Barrera y pretenden sustituirlo son como los esbirros del Partido Demócrata americano, que me quieren sacar a mí cuando las elecciones fueron tan fraudulentas aquí como allá. Biden y sus títeres han actuado también en este caso”.

Por su parte, el secretario general de la OEA, Luis Almagro, ha emitido un comunicado asegurando que las elecciones de Peñarol fueron limpias y transparentes, y la actitud del Dr. Jorge Barrera no se explica ni se entiende, y ha ofrecido el envío de observadores para que participen en un nuevo recuento de los votos, dándole así tranquilidad al pueblo aurinegro.

El Dr. Barrera, en otra de sus salidas a la ventana del Palacio, ha dicho que él mismo ha hablado con Trump pidiéndole consejo acerca de cómo enfrentar a quienes osen venir a sacarlo por la fuerza de la presidencia del club.

—No seré yo el primer presidente uruguayo que habla con el presidente de los Estados Unidos pidiéndole consejo de cómo actuar frente a una emergencia semejante —afirmó el dirigente aurinegro, asegurando que defenderá su actitud con uñas y dientes—. Es más —afirmó alzando la voz—: les he pedido a Evo Morales, a Rodríguez Zapatero, a Lugo, a Rafael Correa y a Diosdado Cabello que vengan a verme al Palacio y a revisar estas elecciones truchas con las que pretenden sacarme de aquí.

Los periodistas han consultado al respecto hace unos días al ministro del Interior, Dr. Jorge Larrañaga, para ver qué decisión tomarán las autoridades en este complicado e inesperado caso de persistir esta situación.

—Aquí la seguridad es determinante —expresó el jerarca— y por ahora no parece que la cosa se complique. Estoy seguro de que el presidente aurinegro reflexionará y depondrá su inusual actitud, aunque si se pone cabeza dura y se niega a salir de ahí lo iremos a buscar con un grupo de asalto. Igual vamos a mandar a los negociadores del ministerio para que procuren convencerlo, como hicimos con el de la joyería hace unas semanas —concluyó.

Efectivamente, dos negociadores del ministerio estuvieron hace un par de días durante toda una noche dialogando con Barrera, quien habló con ellos desde su despacho, pero sin asomarse a la ventana por temor —según dijo— a que le dispararan un dardo adormecedor y lo sacaran después anestesiado de la sede.

—No se hagan los locos, yo no tengo ninguna reflexión que hacer, yo estoy bien y tranquilo —les dijo Barrera a los psicólogos policiales—, vayan y díganle al Guapo que debería tener cosas más importantes que hacer que ocuparse de mí, yo de acá no salgo, y listo.

Tras un extenso debate mantenido en la residencia de Juan Pedro Damiani, en el que participaron todos los integrantes electos de la nueva comisión directiva, se llegó finalmente a la solución que sin duda logrará destrabar esta delicada situación que vive el club aurinegro.

Lo van a invitar a Barrera a comer un asado.

—Ahí en fija que afloja y sale mansito —declaró el presidente electo Ignacio Ruglio—. Esta propuesta es irresistible para Jorgito —concluyó.