Exmilitar condenado por la muerte de Chaves Sosa insiste en su inocencia y acusa a comandantes de la Fuerza Aérea

escribe Sergio Israel 

Enrique Ribero, un exaviador y paracaidista, ahora septuagenario, bajo, calvo, delgado, vestido con ropa deportiva y bien afeitado, sentado en el living de su apartamento en el Parque Batlle durante una salida transitoria de la cárcel de Domingo Arena, recibe a Búsqueda para explicar que es inocente. Que todos los juzgados y tribunales por los que pasó y que lo encontraron culpable cayeron en la trampa tendida por sus excamaradas de la Fuerza Aérea que lo traicionaron para cargarle con un crimen político que, insiste, él no cometió.

Esta nota es exclusiva para suscriptores de BÚSQUEDA y GALERÍA
Elegí tu plan y suscribite

Suscribite

¿Ya sos suscriptor? Iniciá sesión

Probá nuestro servicio, registrate y accedé a una nota gratuita por semana.