La ANP busca en Vigo un privado interesado en el Puerto Capurro

Desde el 2009 la ANP buscaba construir una terminal especializada para ubicar las flotas pesqueras extranjeras y nacionales, pero luego de una licitación frustrada en 2011 resolvió financiarla con fondos propios. La obra, contratada al consorcio Teyma-Chediak, supera los US$ 90 millones (tras una renegociación que redujo en unos US$ 20 millones el costo original) y se prevé que esté pronta en el segundo semestre del año próximo. Para ese entonces, la idea de la ANP es poder conceder a un privado la gestión de las operaciones de pesca en el Puerto de Montevideo de forma integral por un plazo de 30 años con opción de renovarlo por hasta 20 más, según el prospecto del negocio aprobado por el organismo y que está a la espera del visto bueno del Poder Ejecutivo. Luego de eso y algunos ajustes, se espera que el pliego de la licitación se lance antes de fin de año, informó Curbelo.

Misión a Vigo

“Hay un mercado que no se agota en los 200 barcos que hoy tenemos en promedio de flota extranjera (…). Hay muchas empresas interesadas, más de seis grupos que están estudiando el prospecto y van a evaluar la factibilidad desde el punto de vista del inversor”, dijo a Búsqueda la gerente del Área de Comercialización de la ANP, Ana Rey, que acompañará a Curbelo junto con representantes de algunas empresas españolas a Vigo del 4 al 9 de octubre.

Rey explicó que la misión participará de la feria internacional de productos congelados del mar (Conxemar), además de visitar el puerto y entrevistarse con la autoridad portuaria de Vigo —una de las principales terminales pesqueras del mundo—, entre otras reuniones. Comentó que es la primera vez que la ANP hace una misión de estas características con los empresarios que están trabajando en la pesca para conocer de primera mano las necesidades de los clientes de las flotas extranjeras.

Evaluó a su vez que el modelo de concesión a un privado busca “tratar de darle rentabilidad al proyecto” del Puerto Capurro y “fortalecer el negocio de la pesca de altura, porque hubo barcos que fueron y no han podido tener servicios. No es solo descargar la pesca o hacer reparaciones; pensamos que la mercadería desde que se pesca hasta que llega a su destino esté cuidada, cumpliendo los requerimientos de los mercados. Por eso se piensa en un depósito frigorífico, enchufes reefer y otros servicios integrales al barco. Es muy atractivo unir todos esos servicios. Después el mercado dirá y estaremos a los resultados”.

“Mercado hay, el tema es que la calidad del servicio sea acorde y los precios también. Tenemos una buena localización”, afirmó Rey. Y añadió que las bases para concesionar el puerto ya fueron enviadas a las embajadas de Corea del Sur y de China para que las empresas las estudien a fondo.

Según el prospecto aprobado por la ANP, el concesionario de Puerto Capurro deberá cumplir con servicios al buque (muellaje, agua, electricidad, reparaciones, etcétera), a la mercadería bajo régimen de puerto libre (reenvasado, consolidación y desagrupación de contenedores, manipuleo y fraccionamiento, entre otros), a los contenedores (servicio de frío o almacenaje, reparación y mantenimiento), a la tripulación (ingreso y egreso a la terminal) y de abastecimiento de combustible.

Según el prospecto, la terminal será “pública” y deberá prestar servicios “en condiciones de libre, leal y sana competencia con otros operadores instalados en el Puerto de Montevideo o que actúen en otros muelles, depósitos o instalaciones”.

El inversor privado podrá facturar y cobrar por sí todos los servicios que preste en los espacios concesionados, sin perjuicio de que cuando el nivel de competitividad de los puertos lo requiera el Poder Ejecutivo podrá establecer tarifas máximas.

El concesionario deberá realizar inversiones mínimas obligatorias, en obra física, equipamientos y sistemas, en determinados plazos (que se valoran en torno a US$ 14 millones), entre las que estará parte del acceso a la terminal y explanada con enchufes reefer y un depósito o cámara frigorífica.

Deberá pagar a la ANP un canon inicial de US$ 14 millones (valor llave) y otro de tipo fijo mensual “no inferior a US$ 58.500” durante todo el plazo de la concesión.

Reparos de privados

En 2018 había unas 250 escalas de buques de bandera extranjera y más de 780 de pesqueros nacionales, mientras que entre enero y agosto pasado fueron 200 y 500, respectivamente, según estadísticas de la ANP.

El Puerto Capurro es una terminal que se necesita “con urgencia”, dijo a Búsqueda el presidente de la Cámara de Agentes de Pesqueros Extranjeros (CAPE), Aldo Braida. Afirmó que el año pasado se perdieron unas 40 escalas técnicas de estadía prolongada (cuando realizan puesta a punto con talleres de carpintería, pintura, maquinaria, electricidad, etcétera) y este año se perderán algunas más, a pesar del esfuerzo de la ANP para encontrarles lugar, luego de que la terminal especializada de celulosa de UPM tomara el espacio que se destinaba a la flota extranjera.

En cuanto al plan del gobierno de conceder la gestión del Puerto Capurro, Braida manifestó algunos reparos. Por un lado, dijo que sería “más interesante” que no se concentre toda la operativa en un “único operador”. Por otro, cuestionó la exigencia de algunas inversiones mínimas, como la de una cámara frigorífica de gran dimensión, sin que exista la certeza de que habrá demanda suficiente para ese tipo de servicio de almacenamiento.