Para el BPS

Hace unos años, un banco de Montevideo se apropió indebidamente de ahorros de sus clientes y dispuso de ellos con perjuicio de los ahorristas, por lo que los responsables del banco fueron a prisión.

Me fui del país en 1974 y regresé en 1984, momento en que trabajé por ocho años en dos empresas. Antes de 1974 ya había trabajado en otras dos por un total de catorce años y medio. En todos los casos en planilla haciendo todos los aportes correspondientes.

Hace tres años decidí empezar el trámite jubilatorio que el BPS determinó por mi edad (actualmente 70 años) que debía ser por edad avanzada, que requiere menos años de aportes que el trámite normal.

Mi primer empleo fue hace unos 55 años en el Hipódromo de Las Piedras y ante la dificultad de comprobar ese dato me pidieron presentara testigos, lo que hice, dos de ellos profesionales universitarios y una señora de mi barrio, todos jubilados y de excelente reputación, que conocían perfectamente mi trabajo allí.

A pesar de todo y luego de tres años de trámite, jerarcas del BPS, invocando pretextos injustificables, rechazaron arbitrariamente mi solicitud con lo que luego de 22 años y medio de aportes, no recibiré un peso de jubilación en mis últimos años de vida.

Quede constancia de estas injusticias y situaciones escandalosas en un banco estatal administrado por el presente gobierno, que se autoproclama defensor de los derechos de los ciudadanos.

CI 999.790-5