N° 1998 - 06 al 12 de Diciembre de 2018
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En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáEl British Film Institute dejará de financiar películas con malos de cara deformada. Esta institución del bien pensar ha decidido hacerles el aguante a los que tienen deformidades en el rostro o en otra parte del cuerpo. No quieren villanos desfigurados. Basta de Darth Vader cuando se saca la máscara, de Blofeld (el ultraenemigo de James Bond, que además de una enorme cicatriz que le cruza el rostro tiene un gato blanco), de fantasmas de la ópera, de caras cortadas con metralleta. No queda claro si el instituto británico da su visto bueno en caso de que el detective sea el maltrecho.
De todas formas estamos ante un nivel de idiotez que acorrala cada vez más a nuestros maravillosos villanos cinematográficos, que ya no pueden tener ningún rasgo pintoresco, porque todo sello distintivo al fin y al cabo termina atentando contra alguna asociación que cultiva esos sellos distintivos y se ofende. Elijan cualquier rasgo o hábito y verán levantarse las ofensas. ¿Un malo que bebe demasiado? Atenta contra las samaritanas asociaciones de alcohólicos anónimos, que cumplen una importante función social. ¿Y si tiene lentes? Joder, otra vez se la agarran contra los cortos de vista sin pensar en los millones de niños que ya en la escuela deben usar lentes. ¿Y si usa coleta? No puede ser que eduquemos a nuestros hijos en una sociedad que sataniza a los que tienen coleta siempre como narcotraficantes o yonquis o violadores. ¿Y si el tipo toma merca? Basta de estigmatizar a la merca… No, eso creo que está bien, no lo hagan, niños, no lo hagan.
Como siempre, el villano es mucho más interesante, carismático y atractivo que el bueno. El villano es recordado; el bueno se difumina en el cagarruto seco del olvido. El villano, aunque muera a manos del bueno, tiene más polenta. El villano propone, el bueno frena. Creo que es momento de devolver el golpe con todo: el malo de mi película será homosexual, negro, latino, con lentes, coleta, labio leporino y se apellida Goldstein. Y lo interpretará Kevin Spacey.