En Búsqueda y Galería nos estamos renovando. Para mejorar tu experiencia te pedimos que actualices tus datos. Una vez que completes los datos, tu plan tendrá un precio promocional:
* Podés cancelar el plan en el momento que lo desees
¡Hola !
En Búsqueda y Galería nos estamos renovando. Para mejorar tu experiencia te pedimos que actualices tus datos. Una vez que completes los datos, por los próximos tres meses tu plan tendrá un precio promocional:
* A partir del cuarto mes por al mes. Podés cancelar el plan en el momento que lo desees
+
Tu aporte contribuye a la Búsqueda de la verdad
Suscribite ahora y obtené acceso ilimitado a los contenidos de Búsqueda y Galería.
Suscribite a Búsqueda
DESDE
UYU
299
/mes*
* Podés cancelar el plan en el momento que lo desees
¡Hola !
El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
Los tres dramas rurales de Federico García Lorca, uno de los autores extranjeros favoritos del teatro uruguayo, vuelven a subir a un escenario montevideano. Pero esta vez en el marco de un proyecto que une a una compañía española con El Tinglado, uno de los baluartes del teatro independiente. Si bien desde hace un buen tiempo esa institución vive una etapa algo errática y despareja en su programación, ha logrado esta vez un producto de muy buena calidad, fruto de un año de vínculo artístico con Encina Teatro, elenco originario de Andalucía y establecido en Madrid desde 2002, que realizó en 2012 una gira por Uruguay con una trilogía del dramaturgo montevideano Dino Armas, compuesta por “¿Y si te canto canciones de amor?”, “Rifar el corazón” y “Dos encontra2”.
¡Registrate gratis o inicia sesión!
Accedé a una selección de artículos gratuitos, alertas de noticias y boletines exclusivos de Búsqueda y Galería.
El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
“La casa de Bernarda Alba”, “Bodas de sangre” y “Yerma” alternan dos fines de semana cada una (seis funciones), desde el pasado viernes 6 hasta el domingo 20 de octubre, dirigidas por el español Paco Sáenz, quien comenzó a ensayar en marzo con el elenco español y a la distancia también con el reparto uruguayo. Ya en junio se instaló en Montevideo para trabajar con los casi 50 intérpretes que encarnan estas archiconocidas historias del autor que para él “une emocionalmente ambas orillas del océano”.
Los objetivos del grupo son expresados con claridad en el programa de mano: “Reafirmar nuestra creencia en la fuerza textual del poeta y no en la identificación de géneros o en las diferencias del decir que tenemos de la misma lengua”. A juzgar por lo que se ve en el primero de los tres estrenos, la meta está cumplida.
La huella más llamativa —y arriesgada— de la versión de Sáenz es la masculinización de los dos personajes claves de esta historia. Bernarda, la madre castradora y represora de sus hijas, a quienes confina bajo siete llaves dentro de esos muros durante los ocho años del más severo luto, y Poncia, su fiel ama de llaves que suaviza el tortuoso vínculo entre las jóvenes mujeres y su progenitora, mientras esta cuida la castidad de sus hijas como el último bastión de moralidad.
Ángel Ferrero, de largas faldas negras, compone con solvencia a esta mujer militar, que se relaciona con los demás a través del poder y las órdenes, pero con serenidad lapidaria. Por momentos puede parecer algo monocorde su tono pero con el paso de las escenas ese aplomo resulta coherente con la impasibilidad de la señora Alba. Así, convence del lugar que ocupa esta dictatorial jefa de familia, en las antípodas del diálogo y la conciliación, para convertir su casa en una cárcel, sublimación de la visión lorquiana en pleno ascenso del fascismo en España. (Se presume que esta obra fue escrita durante el inicio de la Guerra Civil, en 1936.) También alude al pueblo doblemente oprimido por el poder represor del Estado y la Iglesia.
Por su parte, Oscar Olmeda, con su delantal que define su condición de sirviente, se maneja con soltura en su posición de constante mediador y consignatario de los secretos mejor guardados de estas mujeres que pugnan por el amor de Pepe el Romano, una notable construcción en ausencia de la pluma de Lorca. Nadie le ha visto la cara a Pepe, pero es la fuerza natural que hace accionar el relato y descerraja su tremendo desenlace. “¿Tú ves este silencio? Pues hay una tormenta en cada cuarto. El día que estallen nos barrerán a todas”, dice Poncia en una de las imágenes más elocuentes de la obra del granadino. La transmutación de género de Poncia habilita, gracias al histrión natural de Olmeda, un inesperado y bienvenido componente de humor, basado en esa natural contradicción.
Sin grandes despliegues de actualidad y con sutilezas, la dirección logra transmitir la vigencia de un relato que puede sonar superado en este Uruguay legalizador de libertades, pero que se mantiene incambiado en buena parte del planeta.
El reparto femenino español responde mucho mejor que el uruguayo, y se nota que no es solo una cuestión de mayor naturalidad ni de conocer mejor el texto, sino simplemente a razones de puro oficio teatral. De todos modos, esas diferencias son resueltas por una dirección despierta, que plantea un dinamismo espacial muy favorable. El decorado se vincula con el elenco en forma orgánica. Cuando no están en acción, los actores no se van tras bambalinas sino que permanecen de pie, entre las columnas que enmarcan la escena, de espaldas al público. Resulta interesante esa contradicción explícita entre el personaje y el cuerpo del actor, vacío de representación pero allí presente, en forma casi inerte.
Esa transición queda impresa en la retina en el momento del saludo al público, ese instante en el que el personaje abandona como un fantasma el cuerpo que lo aloja, los rostros liberan la tensión contenida y reciben el aplauso mientras se instala la sonrisa agradecida.
Luego de la buena experiencia, habrá que esperar si “Bodas de sangre” y “Yerma” confirman el rumbo.
“Trilorquía: la pasión según García Lorca”, por Institución Teatral El Tinglado y La Encina Teatro de España. Dirección: Paco Sáenz. “La casa de Bernarda Alba” (viernes 13 y sábado 14, 21.30 h; domingo 15, 20 h). “Bodas de sangre” (20, 21, 22, 27, 28 y 29 de setiembre). “Yerma” (11, 12, 13, 18, 19 y 20 de octubre). Teatro El Tinglado (Colonia 2035, tel. 2408 5362). Entradas: $ 350.
