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En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáMi hijo solo camina un poco más lento. El gran fenómeno under, u Off Corrientes, llega a la sala El Picadero después de hacer historia en la diminuta sala Apacheta, de la zona de Almagro, en la que se presentaba los domingos a las dos de la tarde. Toda una rareza nacida de la autogestión y el trabajo colectivo de un grupo de extraordinarios actores dirigidos por Guillermo Cacace sobre un texto del croata Ivor Martinic. Hay una madre y un hijo con una enfermedad que no se entiende bien qué es. Y demás parientes: distintas generaciones de una familia que se prepara para festejarle el cumpleaños. Dicho así, parece nada: Mi hijo... es pura experiencia teatral, que arranca cuando uno llega a la sala y termina cuando se decide aplaudir el hecho artístico que acaba de suceder. Conmovedora, divertida y contundente. Un tipo de teatro vivo y en ebullición, que te atrapa y no te suelta.
Todos los domingos hasta el 24 de junio, a las 11.30 horas, en el Teatro Picadero (Pasaje Discépolo 1857). Entradas a la venta en plateanet.com desde 300 hasta 380 pesos argentinos.
Ejercicios fantásticos del yo. Porque el mexicano Gael García Bernal es una estrella global con fuerte conexión con Argentina -—donde viven sus dos hijos—, es que su debut como el poeta portugués Fernando Pessoa, sobre el escenario del Teatro Coliseo, promete ser uno de los hitos teatrales del año porteño. Después de desafinar el Recuérdame de Coco, en la ceremonia del Oscar, el actor subirá a escena, como el rey de los heterónimos, acompañado por Rita Cortese, Fernán Mirás y Martín Slipak. A Gael no le gusta hablar de su vida privada, y tampoco le hace gracia que le pregunten sobre sus dotes como cantante: parece dispuesto a divertirse, entre desconocidos, solo desde el escenario. Desde el 9 de marzo, y por pocas semanas.
Todos los jueves, viernes y sábados hasta el 14 de abril, en el Teatro Coliseo (Marcelo T. de Alvear 1125). Horario sujeto al día. Entradas desde 335 a 1.000 pesos argentinos disponibles en Ticketek.
Sugar. Ahora, si lo que querés es no perderte de ninguna manera la gran cosa de la avenida Corrientes del último año, lo tuyo es encontrar lugar en las últimas funciones de Sugar, el musical que tuvo a Susana, Darín y Puig como intérpretes allá lejos y hace tiempo, reemplazados por Griselda Siciliani, Nicolás Cabré y Federico D’Elía, con Su como productora estrella. Hay veinte escenografías maravillosas del gran Alberto Negrín, el vestuario genial de Renata Schussheim, la música de Gerardo Gardelín, el talento de sus bailarines y protagonistas. El resultado es una producción deslumbrante al servicio de una historia tan entrañable como su original, Con faldas y a lo loco, Una eva y dos adanes o como se haya traducido, en tu país, la inolvidable historia de Sugar Kane (Marilyn Monroe), Some like it hot. En el último tramo de presentaciones, la bailarina Laurita Fernández (figura repetida de los programas de chimentos por su relación tormentosa con Fede Bal) tomará el lugar de Siciliani, como anunció el productor Gustavo Yankelevich.
De jueves a domingos hasta el 29 de abril, a las 21 horas, en el Teatro Lola Membrives (Av. Corrientes 1280). Entradas desde 500 a 1.100 pesos argentinos disponibles en TuEntrada.com.
Las amargas lágrimas de Petra von Kant. En el refaccionado Teatro San Martín, tesoro de la avenida Corrientes, estalla el texto político que el incendiario director alemán Rainer Werner Fassbinder escribió hace más de treinta años. La combustión es fruto del trabajo de un grupo de mujeres que sobre el escenario o detrás de él se confabulan para invocar el melodrama, el expresionismo, la poética del movimiento en coreografías que se enhebran con las palabras. Es la relación entre una diseñadora de modas y una mujer de clase social más baja, la Karin que interpreta Belén Blanco, la que sirve para sacudir, como en su origen, de dura crítica, a la sociedad alemana de entonces. Muriel Santa Ana brilla como protagonista, el papel que inmortalizó Hanna Schygulla en cine, arropada por la puesta de Leonor Manso, el vestuario de Renata Schussheim, la coreografía de Roxana Grinstein.
De miércoles a domingos hasta el 29 de abril, a las 20.30 horas, en el Teatro San Martín (Av. Corrientes 1530). Entradas en venta a través de Complejo Teatral de 80 a 160 pesos argentinos.
Ai Weiwei en Fundación Proa. Qué gran oportunidad, la escapada a Buenos Aires, para no perderse la muestra del artista disidente chino Ai Weiwei antes de que se despida de Buenos Aires. El artista, que primero vino a conocer y sentir el aroma de la ciudad y sus gentes, para luego montar su instalación, logró que, como pocas, esta muestra se incorpore al paisaje porteño. La selfie con sus más de mil bicicletas, dispuestas sobre la vereda de Proa, fue una de las más repetidas en redes sociales: nadie quería quedarse sin la suya. Como un “grandes éxitos” de uno de los más notables y corrosivos artistas contemporáneos a escala global, están en la Boca sus instalaciones icónicas, esculturas, objetos inventados, fotografías y videos en los que reflexiona sobre los temas que le preocupan: el hambre y la explotación, las migraciones, el autoritarismo, que le valió meses en prisión acusado por las autoridades de su país. Andá con tiempo, porque lo que vas a ver impacta, conmueve y merece disfrutarse sin apuro.
Hasta el 2 de abril, de martes a domingos de 11 a 19 horas, en Fundación Proa (Av. Pedro de Mendoza 1929).
Perón, por Sara Facio. Algunos estábamos naciendo, otros no habían nacido y algunos más eran niños. Otros, adultos, se reconocieron en las imágenes, porque habían salido a la calle y se encontraron frente al lente inquieto de la Leica de Sara Facio. Con el miedo como recuerdo, o la emoción de la filiación política latente, nadie es indiferente a este sacudón que supone enfrentarse a las imágenes de la muestra que el Malba tituló, con elocuente simpleza: Perón. Facio, la Annie Leibovitz argentina, autora de célebres retratos y gran gestora de la fotografía argentina, muestra por primera vez (después de años escondidos y otros tantos difíciles), a sus 85 años, el que para muchos es el mayor ensayo, el mayor testimonio de los años violentos, intensos y apasionados que abarcan desde el regreso de Perón, en 1972, hasta su muerte, en 1974. La paradoja se explicita desde el catálogo/diario, un largo reportaje de María Moreno en el que se da cuenta que semejante documento viene de una antiperonista, la “niña gorila” que tomó esas fotos increíbles. “Yo no busco, encuentro”, dice hoy Sara. Y seguramente los uruguayos, de paso por Buenos Aires, encontrarán en las tres salas que dedica el museo de Palermo a esta estupenda muestra, ecos de su propia historia, individual y política.
En el Museo de Arte Latinoamerica de Buenos Aires (Av. Figueroa Alcorta 3415), hasta el 30 de julio. Jueves a lunes de 12 a 20 horas, miércoles de 12 a 21 y martes cerrado. Entradas generales: 120 pesos argentinos.