Auspiciosas negociaciones

Lo que sí sabe es que están negociando y discutiendo, abrazándose y sacándose fotos, de a dos, de a cuatro, de a ocho y de a 80, hincándole suavemente el diente a los más trascendentes temas mundiales y regionales, sin desgastarlos demasiado, y reservando el filo de sus colmillos para los pavos, los jamones, los faisanes, los foie gras, las ostras y las langostas, que estos muchachos no se conforman con una milanga con fritas.

En este variopinto escenario, se sabe que se están concretando los primeros acuerdos comerciales, duramente discutidos por los aguerridos protagonistas. Chile promueve el desarrollo y la exportación del hidrógeno verde, pero hasta ahora lo que ha logrado es que la Unión Europea esté analizando la importación desde Chile de pintura verde, con la finalidad de pintar de ese color las torres de generación de energía nuclear que pueblan las tierras europeas con esos perfiles cilíndricos que se ven desde lejos, lanzando unas columnas de humo negro que meten miedo. Y después se preguntan de dónde viene el cambio climático, el verano a 50 grados, las lluvias torrenciales y los terremotos, y encima le echan la culpa al metano de nuestras pobres vacas. Uruguay presiona fuerte por el acuerdo del Mercosur con la Unión Europea, que se viene negociando desde hace 25 años, con lo cual uno puede pensar que habría que hacer firmar de nuevo los primeros protocolos del inicio de las negociaciones, porque casi todos sus negociadores primigenios han fallecido. Y lo hace amenazando con irse del Mercosur y negociar tratados bilaterales con China, con Turquía y vaya a saber con qué otro país, lo cual ha provocado un aumento en las recetas de Nervocalm (que era el tranquilizante que Quino ponía en sus historietas cuando a alguien le temblaba el pulso de miedo). Se agotó el Nervocalm en varias farmacias de Bruselas.

Argentina quiere firmar acuerdos de exportación del gas natural de Vaca Muerta, pero los técnicos negociadores europeos argumentan que las vacas muertas contaminan la atmósfera y que además los datos que ellos poseen indican que el gasoducto Néstor Kirchner estará terminado en principio alrededor del 2085. Que entonces vuelven a hablar del tema. Y Brasil dice que los europeos los amenazan por persistir con la deforestación de la Amazonia y que eso es solo una excusa para no acordar negociaciones comerciales que harían aumentar las exportaciones brasileñas de productos industriales a Europa por puro proteccionismo. Debido a ello, para atenuar la tensión, Francia y Alemania se comprometerían a comprar engrampadoras brasileñas de acero inoxidable, cafeteras automáticas y encendedores también de origen brasileño, pero sujeto a que esas compras sean autorizadas por los gobiernos de los 27 miembros de la Unión Europea.

Cuba aspira a que la Unión Europea presione a los EE.UU. para que levanten el bloqueo, que no es bloqueo sino que es embargo, y los europeos dicen que sí, que cómo no, pero que esperarán hasta conocer el resultado de las elecciones americanas del año que viene, para ver a qué residencial de ancianos irán a visitar al nuevo presidente, a efectos de iniciar conversaciones al respecto. Paraguay por su parte ha conseguido que la UE se comprometa a importar tereré embotellado en envases de vidrio porque el actual, en envases de plástico, contamina el planeta y forma islas de envases en los mares que determinan la muerte de peces y la destrucción de la flora atlántica.

No obstante, en medio de tantas pequeñeces, mezquindades, promesas y especulaciones, la cumbre de Bruselas sí ha llegado a un acuerdo entre todos sus asistentes, por unanimidad: han decidido que volverán a reunirse dentro de otros ocho años para continuar discutiendo, analizando y negociando cómo pueden hacer que el mundo sea un mejor lugar para vivir.

Ya es algo.