“En una buena, es inexcusable que procedamos con un nivel tan grande de imprevisión comunicacional… Para este anuncio debió convocarse a un comité de crisis en comunicación y tener atado y bien atado todo lo que íbamos a comunicar, saber dónde y cómo nos iban a pegar… No podemos ser tan amateurs…”, escribió el dirigente frenteamplista Daniel Daners en un foro de discusión privado creado durante la pasada campaña electoral, al que tuvo acceso Búsqueda. Habían pasado unas horas del anuncio gubernamental sobre el aumento del IRPF. Andrés Copelmayer, ex asesor en el Ministerio de Transporte respondió con un punteo extenso. “No tuvimos cintura. Frente a las reacciones del fin de semana debió cancelarse la conferencia de prensa del lunes, más aún cuando están pendientes reuniones del equipo económico con líderes de sectores. (…) No tenemos ninguna certeza que este ajuste sea el último y suficiente para disminuir el déficit fiscal. (…) Hoy la mayoría de la gente putea por el aumento del IRPF a partir de la franja de $30.000 lo que ya sabemos que seguramente va a cambiar en el Parlamento, pisándonos la cola internamente”. El diputado José Carlos Mahía se sumó a las críticas a la comunicación: “Las burdas placas de los blancos lo único bien que tienen es que dan un mensaje claro”, escribió. Matías Ponce, asesor en la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), también se despachó. “Hasta que el FA no le dé la importancia que merece la comunicación (…) no va a haber cambio. Seguiremos haciendo plaquitas a puro voluntarismo y compartiéndolas en las redes, los mismos de siempre, creyendo que con eso se influye o se forma opinión. Seguiremos durmiendo”.