Sr. Director:
Sr. Director:
Accedé a una selección de artículos gratuitos, alertas de noticias y boletines exclusivos de Búsqueda y Galería.
El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáTodos los días nos enteramos de algo nuevo sobre el tema educación pública. En realidad los que nos enteramos somos los ciudadanos comunes, porque todos los que intervienen en el sistema saben y son responsables o padecen esa realidad.
Según se ha informado, previo al relevo presidencial el hoy senador Mujica se apersonó al presidente Vázquez y le solicitó (o le impuso) que el único cargo que pretendía que fuera confirmado era el de Wilson Netto al frente del Codicen.
El presidente, en campaña electoral, prometió un cambio profundo en el sistema. Esto resultaba evidente dadas las pésimas condiciones y resultados, eligiendo como principal asesor en estos temas al doctor en Sociología, Fernando Filgueira, especializado en educación. Se pensó que éste ocupara la titularidad del Ministerio de Educación y Cultura, pero luego se entendió que para “cambiar el ADN de la educación” era mejor poner al frente a la Dra. Muñoz y a Filgueira como subsecretario, para que desde este puesto impulsara la necesaria reforma. Netto captó el plan y con el apoyo de Mujica y el MPP comenzó un enfrentamiento, que fue creciendo en intensidad, entre los reformistas y el Codicen. Filgueira se rodeó de especialistas que apoyaran su gestión. Luego, lo que todos sabemos: uno de sus principales colaboradores, el director nacional de Educación, maestro Juan Pedro Mir, a raíz de un análisis hecho público sobre la situación y futuro de la educación fue destituido. Ante esto, Filgueira ve que no tiene apoyo y anuncia su renuncia. Luego vinieron un sinfín de declaraciones, fuera de lugar algunas y otras queriendo augurar cómo seguirá esta historia.
Ahora bien, como lo dice la famosa obra de Shakespeare, “algo huele mal en Dinamarca”. Si como en el armado de un puzzle vamos haciendo encajar las piezas de esta triste y nefasta historia, podemos suponer que luego de pedir por mantener en su cargo al emepepista Netto, Mujica volvió y le pidió (exigió) a Vázquez que apartara a Filgueira y su gente de los ámbitos que tienen influencia (aunque escasa) en la enseñanza pública.
Recordemos que está en juego la aprobación del proyecto de ley del presupuesto, cuya sanción sin grandes cambios es fundamental para el gobierno (y para el país), y que Mujica ha hecho alarde de su poder con la cantidad de parlamentarios que tiene el Espacio 609, sumado a su influencia en los gremios, con los que tiene un cheque en blanco generado durante su mandato. Mir con sus comentarios dio la excusa que el presidente necesitaba para iniciar la purga prometida (exigida). De ser esta hipótesis cierta, la responsabilidad de la enseñanza desde el primer gobierno del Frente Amplio hasta la fecha ha estado en manos del MPP, principal responsable de su actual estado.
Aquí tenemos dos vías de análisis. La primera es que el deterioro del sistema educativo le sea funcional a los planes del MPP y la segunda que luchan y trabajan para mejorar las condiciones y resultados de nuestro sistema público de enseñanza, pero no han sabido ni podido hacerlo, aún peor, lo que han hecho ha contribuido a agudizar la crisis y empeorar sus resultados. La división que ha hecho la coalición de distintas áreas de gobierno —economía al astorismo, el MIDES a los comunistas y enseñanza al MPP— es la responsable de arruinar el presente y futuro de miles de jóvenes, lo que luego repercutirá en la sociedad toda, con condicionamientos de todo tipo, algunas que hoy no podemos imaginar.
En estos días, la directora general del Consejo de Educación Secundaria, inspectora Celsa Puente, determinó que a modo de prueba en el próximo período de elección de horas docentes, estos eligieran por dos años. Netto salió a la prensa a respaldarla y decir que esto ya estaba resuelto, que los sindicatos estaban al tanto desde hace tiempo.
Todos sabemos lo que pasó. El gremio, que tiene una representación minoritaria a nivel nacional, les dijo no, despejando toda duda (si aún alguien la tenía) sobre quién manda a nivel de secundaria.
¿Cómo sigue esta historia? A mi juicio veremos declinar el poder del presidente Vázquez, los reformistas serán poco a poco excluidos o relegados, la crisis en la educación seguirá empeorando y nuestros jóvenes primero y la sociedad toda después padecerán por muchos años las consecuencias de que decenas de miles carezcan de un proceso formal y continuo de aprendizaje, tendrán carencias de formación que los marcará para toda la vida.
El único camino que vislumbro es de llegar a un pacto social, donde las partes que intervienen en la enseñanza, gobierno y técnicos lleguen a delinear el camino para comenzar a salir de esta penosa situación. Todos debemos acordar la creación de una comisión especial, con pocos integrantes de indiscutida solvencia intelectual y técnica, sumando especialistas en conciliación de conflictos, que recaben el pensamiento de todos y que determinen un plan a seguir, con el compromiso de todos de aceptar lo que estos resuelvan y aconsejen.
Daniel H. Báez
CI 1.465.895-4