El gobierno y UPM

“¡El pueblo quiere saber de qué se trata!” (mayo 1810). En una república que se jacte de tal el soberano es el pueblo, y no en ficción sino en la práctica. El presidente Vázquez se dice artiguista pero parece que nunca leyó y/o comprendió “Mi autoridad emana de vosotros y cesa ante vuestra presencia soberana”. El ocultamiento de las condiciones excepcionales exigidas y las otorgadas a UPM acrecienta la sospecha de que se están sentando (para no ser grosero) sobre las leyes tributarias, laborales y ambientales que a todos los ciudadanos ¿iguales ante la ley? obliga el Estado uruguayo. El gobierno tiene la obligación republicana de ser transparente y respetuoso con la ciudadanía y publicar claramente las condiciones que otorgará a UPM, si no lo hace es mal indicio, porque solo se esconde lo que se sabe que está mal. No alcanzó con Pluna, Ancap, la gasificadora, etcétera. La ciudadanía sabrá juzgarlos en las urnas.