• Cotizaciones
    jueves 28 de noviembre de 2024

    ¡Hola !

    En Búsqueda y Galería nos estamos renovando. Para mejorar tu experiencia te pedimos que actualices tus datos. Una vez que completes los datos, tu plan tendrá un precio promocional:
    $ Al año*
    En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] o contactarte por WhatsApp acá
    * Podés cancelar el plan en el momento que lo desees

    ¡Hola !

    En Búsqueda y Galería nos estamos renovando. Para mejorar tu experiencia te pedimos que actualices tus datos. Una vez que completes los datos, por los próximos tres meses tu plan tendrá un precio promocional:
    $ por 3 meses*
    En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] o contactarte por WhatsApp acá
    * A partir del cuarto mes por al mes. Podés cancelar el plan en el momento que lo desees
    stopper description + stopper description

    Tu aporte contribuye a la Búsqueda de la verdad

    Suscribite ahora y obtené acceso ilimitado a los contenidos de Búsqueda y Galería.

    Suscribite a Búsqueda
    DESDE

    UYU

    299

    /mes*

    * Podés cancelar el plan en el momento que lo desees

    ¡Hola !

    El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
    En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] o contactarte por WhatsApp acá

    El jazz nuestro de cada verano

    Llega a su 18ª edición el festival de Punta del Este

    Hay proyectos que se diluyen, hay compañías que desmontan sus andamios, hay películas que se terminan, pero la banda sigue tocando. Por suerte. Y siempre con grandes músicos. No es manija ni amor a la causa, es la pura realidad. Entre el jueves 9 y el domingo 12 de enero de 2014 ocurrirá la 18ª edición del Festival Internacional de Jazz de Punta del Este, como es habitual desde hace un tiempo en la finca El Sosiego de Punta Ballena y siempre a partir de las 20. El verano promete ser muy caliente y la música también, pero en un sentido mucho más... fresco.

    Hay nuevos visitantes y viejos conocidos. Entre los primeros debemos destacar la presencia del pianista Eric Reed, un hombre de tremendo swing que entre otras escuelas ha pasado por la de Wynton Marsalis. Reed (viernes 10 y domingo 12) estará en compañía del contrabajista Ben Williams y del baterista Rodney Green y entre otras cosas promete un tributo al gran Oscar Peterson. Alternará la formación de trío y la de cuarteto, con la presencia del saxofonista tenor Grant Stewart, a estas alturas un habitual y lujoso animador del festival.

    También nos visitará por primera vez la vocalista Carolyn Leonhart (viernes 10 y domingo 12), quien se presentará con el pianista Xavier Davis y el bajista Hans Glawischnig. Leonhart es hija del bajista Jay, hermana del trompetista Michael y está casada con el saxofonista Wayne Escoffery. Como se ve, una familia sin un minuto de silencio. Estuvo junto a Steely Dan y ha sido definida como una vocalista de voz íntima y amplia paleta tonal.

    Los saxofonistas barítonos no son comunes en la escena jazzística. No sé si es por el tono del instrumento o debido a su mayor peso. El asunto es que tendremos en las noches estrelladas la presencia de Scott Robinson, quien no debe ser confundido con el cantante pop británico de igual nombre, pero estilo, porte y costumbres muy diferentes. Nuestro Robinson es un señor de New Jersey de 54 años que toca todos los saxos además del clarinete y la flauta. Ejecutará dúos con el bajo de Zachary Brown, el piano de Alon Yavnai y la percusión de Joca Perpignan el sábado 11 y cerrará el festival en un aquelarre de barítonos el domingo 12 con la banda de Paquito D’Rivera, donde también soplará Gary Smulyan, que estuvo en la edición pasada, y si Ud. no lo escuchó debe hacerlo. Un fenómeno el tipo, realmente.

    Y acá entramos en un problema: hay mucho más. Por ejemplo el clarinete, otro instrumento que no es tan frecuente en nuestros tiempos, si bien lo fue en la era del swing con Benny Goodman y Pee Wee Russell a la cabeza, dos de los más grandes exponentes de esta maravillosa madera. Pues bien, otra vez tendremos a la israelí Anat Cohen (jueves 9 y sábado 11), que te vuela la cabeza con el clarinete, y por supuesto a Paquito, que anda dando vueltas los cuatro días del festival con sus instrumentos y labura como corresponde a un director musical y a un músico de su tremendo nivel, que ya lleva 60 años en estos menesteres, porque comenzó a los seis, casi con el destete.

    El pianista Bruce Barth ya estuvo en aquella legendaria Azotea de Haedo, en una de las más calientes presentaciones que haya realizado un pianista en todas las ediciones del festival (recuerdo que se me acalambró la pierna de seguirle el ritmo). Y ahora vuelve por lo suyo el jueves 9 y el sábado 11, junto a las cuatro cuerdas de Vicente Archer, el impresionante Adam Cruz en batería y la dama Anat en clarinete. Barth tiene un piano de cola en su casa de Brooklyn y está acostumbrado a las jam sessions hasta que los vecinos le pidan clemencia o, si tienen buen oído y no deben levantarse temprano al otro día, que siga y siga, porque el tipo es realmente un fenómeno.

    Otro especialista en las teclas blanca y negras que cada día toca mejor es el brasileño David Feldman, encargado de abrir el festival el jueves 9 con ese aire tan necesario de bossa nova. Compartirá el escenario con André Vasconcellos (bajo), Marcio Bahía (batería) y Smulyan (barítono) y repetirá el viernes 10, esta vez interpretando temas de Miles Davis con una superbanda: Diego Urcola (trompeta), Pipi Piazzolla (batería), Popo Romano (contrabajo), Nicolás Mora (guitarra) y Mark Gross (saxo alto). Urcola también estará el sábado 11 en quinteto, secundado por Alex Brown (piano), Zachary Brown (bajo), Eric Dobb (batería) y Mark Gross. Ojo con Gross: tocó con Tom Harrell y en la big band de Dave Holland.

    Fuera de programación estarán las ya clásicas veladas en el restaurante, incursiones sorpresivas de músicos durante las actuaciones de otros, bebidas, choripanes y demás alimentos en el quincho, grillos, ranas y algún que otro animal autóctono como la crucera —que por suerte nunca aparece— y el hablador de los conciertos, con y sin celular, a quien le tiraremos la crucera guardada en el frasco y entrenada para silenciar al molesto. Por más información dirigirse a [email protected]. Hasta aquí ha llegado lo mío. Perdón por cualquier olvido y que suene la música.