Desde su reapertura, el ex Hotel Casino Carrasco —hoy Hotel Sofitel Montevideo Casino Carrasco & Spa— es objeto de críticas, acusado de no cumplir plazos y de problemas económicos de sus accionistas. La Intendencia de Montevideo (IM), que adjudicó la concesión del hotel a Carrasco Nobile, lo multó económicamente tres veces por incumplir el cronograma de obras. Sus accionistas estimaron en 10 millones de euros la pérdida en 2013. La casa matriz de Codere, propietaria del 51% de las acciones del consorcio, se encuentra en preconcurso de acreedores.
En las últimas semanas se conoció un nuevo problema. Carrasco Nobile SA, administrador del ex Hotel Casino Carrasco, fue embargado por dos juzgados civiles en el marco de un juicio ejecutivo iniciado por la empresa de construcción Caputo. La constructora reclama supuestos adeudos impagos que superan un millón de dólares, según un documento de la Asociación de Escribanos del Uruguay al que accedió Búsqueda.
De acuerdo con el informe fechado el 4 de abril, el Juzgado Letrado en lo Civil de décimo turno estableció uno de los embargos genéricos en su ficha 1/008964/2014 en el expediente caratulado Caputo SA contra Carrasco Nobile SA.
La medida fue dispuesta en el marco de un juicio ejecutivo cambiario iniciado por la constructora, cuyo Registro Único de Contribuyente (RUC) es 215993690018 y está establecida en Juncal 1305 apartamento 1604.
El segundo embargo lo dictaminó el Juzgado Letrado Civil de sexto turno, según consta en la resolución del 27 de mayo y que figura en la ficha 2/2013/2014. También se produjo en el marco de un juicio ejecutivo iniciado por la constructora, aunque lo que cambia es la dirección de la empresa, que en este caso es Rambla República de México 6451.
El monto del primer embargo es por $ 16.268.140 mientras que el segundo asciende a $ 7.472.500, lo que suma $ 23.740.640 y equivale a más de un millón de dólares.
Fuentes vinculadas a la constructora informaron a Búsqueda que en los últimos días la Justicia dispuso el embargo de la caja del hotel para asegurar el cobro.
Mientras los hechos continuaban su curso en la Justicia, las comisiones de seguimiento de la IM y la Junta Departamental no tenían conocimiento del embargo.
El edil nacionalista Álvaro Viviano, presidente de la Comisión de Seguimiento del ex Hotel Casino Carrasco en la Junta Departamental de Montevideo, se enteró de la situación en los últimos días y se molestó por no haber sido notificado oficialmente.
En la IM tampoco se sabía. Ayer miércoles 23, durante una reunión con la comisión de seguimiento de la IM, el edil se lo planteó al prosecretario Jorge Rodríguez, quien no estaba al tanto.
La información que sí manejaba, según relataron fuentes municipales, es que hay juicios cruzados entre las empresas. “Es un tema estrictamente entre privados. Carrasco Nobile, hasta ahora, no tuvo incumplimientos en los pagos con la Intendencia así que no nos metemos”, dijo un informante del gobierno de Montevideo.
A su vez, Carrasco Nobile le inició un juicio a Caputo en reclamo por el incumplimiento del cronograma de la obra.
El español Ignacio García, director ejecutivo de Carrasco Nobile, informó a Búsqueda que el litigio se inició porque la constructora es responsable del retraso que hubo en la finalización de las obras. La IM multó las demoras por más de U$S 800.000 y el consorcio pretende que Caputo se haga cargo por no cumplir en fecha. El martes 29 habrá audiencia entre ambas partes.
Sin estrategia.
El edil Viviano consideró que el embargo “profundiza la extrema fragilidad de la empresa” y “agudiza el riesgo institucional en la concesión”.
“Si sumo los embargos, los vaivenes internacionales de los accionistas, los cambios gerenciales, las líneas de crédito abiertas, a la conclusión que llego es que en el corto plazo va a haber problemas serios”, dijo.
En julio de 2013, el Banco República le otorgó un crédito aprobado en 2011 por U$S 25 millones a Carrasco Nobile para la remodelación del hotel. Además, la empresa tiene un fideicomiso de capitales privados de U$S 15 millones. En ambos casos, la garantía es la recaudación de la sala de casinos.
La caja del hotel también es mirada de cerca por la IM. El consorcio paga cada mes un canon fijo que ronda los $ 5,5 millones y un canon variable equivalente al 18,08% de las ganancias del casino.
En abril de 2013 el canon variable fue $ 5.969.445 mientras que en abril de este año fue $ 4.958.513. En mayo de 2013 fue $ 4.416.606 y mayo de este año $ 4.933.684. En junio de 2013 fue $ 5.582.617 y en junio de este año $ 5.113.672.
Para Viviano, esta es la prueba de que “la tendencia no es a crecer en recaudación cuando ya tendría que haberlo hecho”. “La Intendencia pronosticó ingresos por U$S 800.000 y hasta ahora son U$S 500.000. Esto es porque no hay una estrategia comercial”, agregó.
Recambio.
La inestabilidad en el ex Hotel Casino Carrasco se refleja en el recambio en cargos de jerarquía: tres directores en 16 meses de funcionamiento.
El 7 de marzo de 2013, el hotel reabrió. Al cortar la cinta, quien acompañó a la intendenta Ana Olivera como director ejecutivo de Carrasco Nobile fue el argentino Guillermo Arcani.
Cumplido el primer año desde la reapertura, el balance es negativo. Cuando se inauguró, la IM hizo 2.000 observaciones que debían ser solucionadas en 60 días, pero no ocurrió en tiempo. Hubo incumplimientos en el cronograma de obras penados por la IM con tres multas; la primera de ellas por U$S 193.414 y la segunda superior: U$S 600.000. En lo económico, la empresa estimó una “pérdida significativa, alrededor de 10 millones de euros” en el ejercicio 2013. (Búsqueda Nº 1.747)
Ante este escenario, Arcani renunció a su cargo en diciembre. “Terminó un ciclo largo” que “demandó un enorme esfuerzo personal y profesional”, declaró el 15 de diciembre en “El País”.
Para ocupar su lugar llegó el norteamericano Robert Heller, un gerenciador con experiencia en casinos de Estados Unidos, Italia, Grecia, Chile y Argentina. Su objetivo era cambiarle la cara y plasmar una nueva plataforma de juego, incluyendo cartelería luminosa y servicios alrededor del hotel.
Sin embargo, Heller no pudo llevar a la práctica su proyecto. Apenas superó un semestre al frente de Carrasco Nobile y también presentó su renuncia. El tercer director del hotel en menos de un año y medio es el español García, quien ya está instalado en Montevideo.
