La renuncia de Sendic (VI)

Debería saber el señor presidente Tabaré Vázquez que valiente es el agente de policía que deja su hogar para ir a cumplir con su arriesgada función pública; que la seriedad se ve contrastada en actitudes y comportamientos dignos de la buena fe, de ser leales a quienes nos han confiado su representación o, en general, de siempre transitar por la vida con el rostro de la franqueza en alto. Por tanto, no es serio mentir hoy y tal vez mañana. Debería además saber el doctor Vázquez, por aquello de los años vividos, que ser responsable implica un comportamiento normalmente esperable, por la sociedad o el entorno. En consecuencia, debió medir sus palabras, señor presidente; su “actitud pontifical” (como una vez supo criticarle usted, en 2009, al inefable expresidente Mujica) no le queda bien y menos cuando baja del pedestal de primer mandatario de TODOS LOS ORIENTALES, para enlodarse en cuestiones partidarias, violando claramente la Constitución de la República.