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Horrores del BROU y del BPS en orden al pago de las pasividades. Cuando una persona se jubila, según disposiciones de la ley de inclusión financiera, debe elegir una institución bancaria o redes de pago, por ejemplo, Abitab, RedPagos, etc.
Lo hace frente al instituto que le paga su jubilación o pensión y, en lo que tiene que ver con las entidades bancarias, están obligadas a abrir sin costo y sin ningún otro requisito una cuenta en la que recibirán el depósito de la pasividad.
Pues bien, en mi caso, recibí por más de 20 años mi jubilación del BPS en una cuenta del BROU hasta que por dos meses consecutivos el importe de la Jubilación no se depositó (febrero y marzo).
Por tres días seguidos llamé al teléfono del (BPS 1997 int. 9) varias veces cada día y al final del tercer día logré comunicarme para ver cómo se solucionaba el problema. Se me atendió correctamente, pero no se me soluciona nada.
Entonces llamé al BROU (tel. 1996); se me atendió deferentemente, pero en definitiva se me dijo que el problema era del BPS porque no había depositado la pasividad.
A través de la página web del BPS envié un correo electrónico dando cuenta de la situación, el que nunca me fue contestado.
Por fin, y a pesar de que tengo ciertas dificultades de desplazamiento, concurrí al BPS en donde también fui atendido con mucha corrección y al final de visitar tres secciones surgió dónde estaba el problema. El BROU había rechazado el depósito porque desde hace tiempo había resuelto que solo se podía depositar en una cuenta en que yo fuera el único titular.
En lo 20 años a los que aludí se depositó o en una cuenta de más de un titular (yo, mi señora esposa y alguno de mis cinco hijos). Pregunté cuándo se había resuelto eso y en qué forma se me notificaba para que yo procediera a abrir otra cuenta solo de mi titularidad. Con asombro, los mismos funcionarios que intervinieron expresaron que no se había notificado nunca...
No podía dar crédito a tal barbaridad
Las pasividades tienen la función de cubrir necesidades alimentarias, de lo cual se sigue que de ellas se vive, y además con ellas se pagan los débitos que cada cual indica, como ser UTE, OSE, Antel, etc.
Vi planteando los casos a gente de mucha edad y que por su vestimenta evidenciaban pobreza. Antes de atenderme a mí, paso un señor que no llevaba ni zapatos y caminaba con las medias que también estaban en un estado lamentable. Estas personas, los más pobres, no entendían nada, lo funcionarios del BPS trataban a todos con la mayor corrección y ¡por qué no!, compasión. Lo que no sabían explicarle es por qué no se les había dado cuenta de esta modificación y se dejó de depositar su pasividad.
Así que ni el BPS ni el BROU hicieron saber de este cambio y dejaron a cientos, si no miles, de jubilados y pensionistas sin pagarles su pasividad.
¿Cómo se puede calificar esto? Que lo haga cada lector, pero es claro que está comprometida la responsabilidad de ambas instituciones, que con total insensibilidad proceden de esa manera en orden al cobro de pasividades, es decir, de pagos que tienen, como dijimos, naturaleza alimentaria.
El gobierno a través del Poder Ejecutivo o el Legislativo debería llamar a responsabilidad por esta tremenda y disparatada actuación.
