No hay nativos digitales
Para explicar la relevancia de los padres en la mediación entre los niños y adolescentes e internet, Dodel utiliza “la metáfora de la calle”. Cuando los padres quieren enseñarle a un niño o adolescente a manejarse solo por la vía pública, no lo sacan a la calle y le dicen “arreglate”. Al principio, salen con él y le van enseñando; a medida que crece, van teniendo más confianza en su capacidad de manejarse solo y lo van soltando. Las primeras veces le piden que los llame cuando llega al lugar indicado. Luego, ya no resulta tan necesario. “Internet es parecido, da un montón de miedo, a veces son miedos sobre cosas legítimas, pero no se les puede prohibir todo”, afirmó. A su entender, esto sería “un poco irrealizable”, ya que la vida social de los chicos, entre otras cosas, pasa por internet y también porque internet tiene muchas cosas buenas que se podrían perder.
De hecho, el estudio establece que a mayor uso de internet por parte de niños y adolescentes, hay mayores beneficios y mayores riesgos para ellos. “Con más internet, los chicos saben más, hacen más cosas y cosas buenas, pero también se exponen a más riesgos”, puntualizó Dodel. No obstante, el hecho de que haya más riesgos no necesariamente quiere decir que haya más daño. “Son conceptos que no van de la mano”, dado que los chicos pueden aprender a gestionar esos riesgos, adquiriendo herramientas y competencias que les permitan sortearlos y evitar el daño. “Es hacia ahí a donde debemos apuntar”, afirmó.
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Niños y adolescentes reclaman algún tipo de apoyo y mediación de sus padres ante internet
En este sentido, la investigación echa por tierra el concepto de nativo digital, que se utiliza para denominar a las nuevas generaciones, sobre las cuales se asume nacen sabiendo utilizar la tecnología. Por el contrario, establece que las habilidades digitales de los niños van creciendo a lo largo del tiempo y la educación juega un rol importante. “Nadie nace sabiendo esto. Los chicos nos dicen que en algunas cosas necesitan referentes adultos, sobre todo en aquellas cuestiones que no implican solamente apretar un botón, sino que son más de cómo comportarse, qué hacer cuando alguien les dice algo. Todo eso se aprende. Las habilidades digitales están muy vinculadas con el nivel educativo, la edad y el aprendizaje”, indicó el responsable académico del estudio.
Las cifras que muestra Kids Online Uruguay confirman esta afirmación. Por ejemplo, mientras que entre los niños de 9 y 12 años el 52% sabe cómo denunciar una publicación, entre los adolescentes de 16 y 17 años el número crece a 89%. En tanto, mientras que al 54% de los niños entre 9 y 12 años le resulta fácil darse cuenta de si una información en internet es verdadera o no, entre los adolescentes de 16 y 17 la cifra trepa a 67%.
Teniendo en cuenta esto, Dodel señaló que es un error cuando los padres piensan que su hijo sabe más que ellos sobre competencias digitales y, por eso, ellos no tienen nada que enseñarle. “Esa posición genera más peligros de lo que uno puede suponer”. También resulta peligrosa la postura de los padres que prohíben a sus hijos el uso de tecnología hasta, por ejemplo, ingresar al liceo, algo que, según Dodel, está ocurriendo en algunos colegios de España. "Mi pregunta es: ¿qué hacés con un chico que no tocó tecnología hasta ingresar al liceo? Primero, pierde un montón de oportunidades y, además, cuando ingresa a este mundo, no tiene las competencias necesarias para manejarse”. Por ende, va a correr muchos más riesgos y es más propenso a sufrir daños.
Dieta de pantallas. Un estudio realizado en Brasil por Kids Online Chile sobre el estilo de mediación de los padres entre sus hijos e internet señala que los estilos más restrictivos reducen los riesgos, pero también las cosas buenas. Aquellos en los que no se ponen límites y se deja hacer de todo incrementan las cosas positivas, pero también los riesgos. En tanto, el estilo de mediación que invita al diálogo y a dar explicaciones tiende a reducir los riesgos, sin reducir las cosas buenas.
Por esta razón, el investigador resaltó la importancia del concepto dieta de pantallas. “Una cosa es que tu hijo se pase todo el día scrolleando en TikTok y otra cosa es que aprenda cosas nuevas en YouTube, por ejemplo”. De hecho, el estudio indica que nueve de cada 10 niños y adolescentes (91%) dicen aprender algo nuevo en internet todas las semanas. Un 95% dice ver películas, videos y series, y otro 91% dice utilizar internet para chatear. Por eso, el concepto dieta de pantallas no hace tanta referencia al tiempo en pantallas, sino a qué se hace en ese tiempo. “Lo más sano es que el cuánto (tiempo) y el cómo (se utiliza) lo decidan los padres”.
En este sentido, tomando como referencia a Sonia Livingston, directora del Departamento de Medios de Comunicación y Comunicaciones en London School of Economics and Political Science, Dodel manifestó que muchas veces para los padres, la tecnología es lo “más saliente”, es decir, lo que parece más urgente para resolver. Sin embargo, si el chico come y duerme bien, se lleva bien con amigos y familia y le va bien en los estudios, el uso de las pantallas no debería ser una preocupación primordial. El panorama cambia si el niño o adolescente deja de dormir o de comer, tiene problemas con los amigos y la familia, o le va mal en las notas por un uso excesivo de las nuevas tecnologías.
Mi pregunta es: ¿qué hacés con un chico que no tocó tecnología hasta ingresar al liceo? Primero, pierde un montón de oportunidades y, además, cuando ingresa a este mundo, no tiene las competencias necesarias para manejarse Mi pregunta es: ¿qué hacés con un chico que no tocó tecnología hasta ingresar al liceo? Primero, pierde un montón de oportunidades y, además, cuando ingresa a este mundo, no tiene las competencias necesarias para manejarse
En Uruguay, según los datos recogidos por Kids Online, casi uno de cada tres adolescentes (en este tema no fueron evaluados los niños de 9 a 12 años) sostuvo que le sucedió al menos una de estas tres situaciones: bajó las notas (29%), tuvo problemas con sus amigos o familiares (29%), dejó de dormir o comer (26%). El experto señaló que se trata de cifras altas, pero volvió a advertir sobre el peligro de las posturas extremas. “Si uno como padre solo prohíbe, prohíbe y prohíbe, cuando los hijos finalmente tienen acceso a internet y les pasa algo, no te lo van a contar. Entonces, aunque sea por reducción de daños, es importante dejar un canal abierto para ganar”. Al respecto, señaló que las aplicaciones de control parental son buenas siempre y cuando se converse previamente con el chico, se le expliquen los límites y se llegue a un acuerdo. Si un adolescente de 17 años quiere conocer gente nueva a través de las redes sociales, puede que esté buscando tener pareja, y por eso busca encontrarse con extraños. Pero antes de prohibírselo, lo mejor es tener alguna charla previa al respecto y darle algunos criterios para enfrentar los desafíos que se le puedan presentar.
“Las ansiedades y los miedos son razonables, pero las respuestas (de los padres) no deberían ser guiadas solamente por el riesgo. La solución es estar con los chicos, que te sientan cercano”, remató el experto.
Algunos datos relevantes de Kids Online Uruguay
Tres de cada 10 niños y adolescentes se han encontrado con personas que conocieron primero a través de internet, conducta que se incrementa con la edad. Sin embargo, la amplia mayoría lo ha hecho con personas de la misma edad. Un 2% lo hizo con un adulto.
Uno de cada cinco adolescentes ha estado expuesto a contenidos sensibles en internet (por ejemplo, discriminación, aliento a la bulimia o anorexia, sucidio). Las mujeres y quienes no se identifican con ninguna de las categorías binarias de género reportan mayor exposición a esos contenidos.
Un 45% del maltrato en línea proviene de amigos, un 29% de compañeros de clase, un 26% de desconocidos de su edad y un 15% de desconocidos más grandes. No obstante, el maltrato cara a cara tiene más prevalencia que el realizado por internet.
Uno de cada cuatro niños y adolescentes ha recibido mensajes con contenido sexual, y uno de cada 10 los ha enviado, porcentaje que se incrementa con la edad.
Las adolescentes y niñas reportaron mayor mediación de los padres o tutores con foco en el cuidado. El 51% de las mujeres encuestadas señaló que sus padres o tutores la animan a que explore y aprenda cosas en internet, mientras que en los varones la cifra crece a 58%. En tanto, el 70% de las mujeres manifestó que sus padres o tutores las aconsejan sobre formas seguras de usar internet. En el caso de los varones, la cifra se ubica en 63%.