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Una receta de Lucía Soria deliciosa, colorida y supernutritiva
Foto: Álvaro Gargiulocor
FOTO
Este dip es como un hummus de remolachas, delicioso, colorido y supernutritivo. Lo podés hacer para sumar a una picada, un sándwich, una brusquetta o una ensalada. Este mismo procedimiento se puede hacer con muchos otros vegetales como boniato, zanahoria o zapallo. En la heladera te dura unos cinco días y también se puede guardar en el freezer. En la foto, lo acompañamos con unas crackers de sésamo, un poco de yogur, garbanzos crocantes y menta, pero lo podés servir con cualquier galleta, grisín o tostada que tengas. Siempre está bueno en la presentación sumarle algún crocante y un plus de sabor que contraste.
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200 g de garbanzos remojados durante 24 h 2 remolachas medianas 1 cebolla blanca grande 2 dientes de ajo 1 hoja de laurel 1 limón, ralladura y jugo Aceite de oliva Sal Pimienta Ají molido
Procedimiento Lavar los garbanzos previamente remojados, pasar varias veces por agua limpia. Colocar en una olla amplia (está bueno usar una olla a presión para hacerlo más rápido). Pelar las remolachas, cortar en cuartos y sumarlas a la olla. Pelar y cortar la cebolla en cuartos, pelar el ajo y agregar ambas cosas, tapar con agua, agregar sal, pimienta, laurel y llevar a cocinar hasta que todo esté bien tierno. Cuando todo esté cocido, colar dejando ? del líquido de cocción. Guardar un poco más de líquido en caso de que se necesite. Procesar la mezcla con mixer o procesadora hasta que se forme una pasta homogénea, y con el mixer andando, ir emulsionando con aceite de oliva. Agregar la ralladura y el jugo de limón y el ají molido, chequear el sabor y llevar a enfriar. Servir con crackers de semillas.
Del libro Relatos y recetas. Editorial Grijalbo, Penguin Random House.