Nº 2083 - 6 al 12 de Agosto de 2020
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En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáDe ninguna manera fue un evento más. Fue la clasificatoria que quedará grabada en la historia nacional de la raza. El primer evento desde que aparecieron los primeros casos de Covid-19 en Uruguay. Así quedará en el recuerdo de todos los criollistas que, con un gran esfuerzo y apego a las normativas sanitarias, disfrutamos el retorno a las competencias y nada menos de una clasificatoria para el Freno de Oro.
Como si hubiera sido un regalo invernal, el sol y la temperatura ideal permitieron lo que se venía preparando y esperando. Con un protocolo exigente, aprobado por autoridades, tanto departamentales como nacionales, se llevó a cabo la clasificatoria uruguaya para la final del Freno de Oro en Esteio.
La sede fue la Asociación Agropecuaria de Salto, que desde el viernes último y durante tres días consecutivos recibió a los conjuntos que habían credenciado con anterioridad en Salto, Rivera y Maldonado.
Con público restringido, uso de tapabocas, higienización y respeto por el distanciamiento físico, las condiciones climáticas permitieron un ambiente ideal para el desarrollo del evento.
Todos con gran experiencia, los jurados de la prueba fueron el uruguayo Felipe Malfatto y los brasileños Rodrigo Teixeira y Renato Morrone, los tres veterinarios.
Esta clasificatoria tuvo además la particularidad de que fue la primera sin participación de animales extranjeros y también la primera vez que se realizaba fuera del marco de la Expo Otoño en la Rural del Prado.
Tanto el ganado como las instalaciones estuvieron a la altura de una competencia tan importante como esta. Y nuevamente la tecnología posibilitó contar con transmisión en vivo por las redes sociales de la Sociedad de Criadores de Caballos Criollos del Uruguay, la cual tomó una relevancia más importante de la habitual dado que el evento fue prácticamente a puertas cerradas, pudiendo acceder al predio solo los propietarios de los animales y quienes trabajaban para su desarrollo.
La ausencia de animales brasileños no empañó el nivel de la clasificatoria. Fue sorprendente observar cómo la mayoría de los caballos progresaron desde las credenciadoras hasta la fecha. Ocho yeguas y un macho superaron los ansiados 18 puntos, puntuación mínima para obtener pasaje a la final de Esteio, siempre y cuando se ubiquen en los cuatro primeros lugares.
Las etapas más destacables fueron las paleteadas, tanto del sábado 1º como del domingo 2, donde los conjuntos brillaron en la pista.
Un hecho para remarcar es la actuación de la cabaña Don Poro, de José María Campiotti, que logró los tres primeros puestos en la categoría de hembras, con el mismo jinete y con hijas del mismo padre.
Un hecho sin antecedentes en nuestro país, donde la preparación de las yeguas y la excelente destreza de Juan Pablo González permitieron que las tres hijas del padrillo brasileño Ilustre Marupá clasificaran y convirtieran a este padrillo en el animal con más hijos clasificados hasta el momento para el Freno de Oro 2020.
Soy concluyente en reconocer que 10 años después de su primera actuación en la final de Esteio, esta cabaña de Lavalleja demuestra que sigue vigente y demuestra la evolución de sus caballos.
Estas yeguas son Poral Santa Rita, que obtuvo 20.302 puntos, Poral Calandria II, con 19.650, y Poral Santa Cruz, que finalizó con 18.397 puntos. Las tres yeguas obtuvieron buenas notas morfológicas y se destacaron en las etapas de vuelta sobre patas y rayadas y paleteadas.
El cuarto lugar en hembras fue para Llovizna de la Nativa de Cabaña La Luz de Francisco Calvelo, montada por Tomás Berrutti, quien debutará en la pista más importante de la raza. Esta colorada inició en el primer puesto con 7.500 puntos de morfología y con actuaciones algo irregulares logró finalizar con 18.232.
El nivel de los machos fue sensiblemente inferior, como es de costumbre, si bien tuvieron buen desempeño, pero solo el picazo de cabaña San Pedro de Guillermo Sanguinetti Gallinal obtuvo los 18 puntos necesarios para clasificar.
GS Butiá de San Pedro con la monta de Mauro Villamor inició con el puntaje más alto de morfología de los machos y siempre mantuvo la punta para finalmente lograr 18.011, que lo habilita a participar de la final del Freno de Oro.
Valió la pena el esfuerzo de la directiva de la Sociedad de Criadores de Caballos Criollos del Uruguay para concretar y llevar adelante esta clasificatoria que quedará en el recuerdo de los criollistas y ansiando que sea el reinicio de la nueva normalidad para la raza, cuyas autoridades demostraron a cabalidad con las normativas sanitarias.
Finalmente, otro punto para resaltar del fin de semana, pero en el parque de Esteio, fue la clasificación del crack uruguayo Colibrí Matrero, este famoso picazo de cabaña La Pacífica ya premiado en el Freno de Oro. Con una media morfológica de 8.217 y un total acumulado de 20.719 lo convierte nuevamente en uno de los candidatos para este ciclo.
Por el momento son siete los animales clasificados para la gran final de Esteio, lo que transforma este año en la mayor presencia uruguaya de la historia en esta prueba y todavía con serias posibilidades de aumentar este número.
¡Un reinicio más que alentador!