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Con un juego consistente a lo largo de todo el certamen, el estadounidense Matt Kuchar se impuso el domingo 24 en el Accenture Match Play Championship, torneo disputado en la espectacular cancha del Golf Club Mountain Dove, Arizona, Estados Unidos. El campo de juego, enclavado en una zona desértica, fue diseñado por el legendario Jack Nicklaus y se inauguró en el 2009. Con sus 7.833 yardas de longitud, fue la cancha más larga en albergar un torneo oficial del PGA Tour en la temporada anterior.
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El certamen, que debía comenzar el miércoles 20, tuvo un desarrollo fuera de lo común ante la cancelación de la primera ronda debido a una fuerte nevada, un hecho absolutamente imprevisible en esa región de Estados Unidos. El inicio de la competencia debió suspenderse cuando incluso varios jugadores estaban en la cancha.
En la ronda final, disputada en la tarde del domingo 24, Kuchar derrotó a su compatriota Hunter Mahan, defensor del título, por un score de 2 y 1, logrando así el primer campeonato de la Serie Mundial en su carrera. En el partido por el tercer puesto, el australiano Jason Day derrotó al inglés Ian Poulter, en lo que fue la mejor actuación de Day en mucho tiempo.
El certamen, jugado totalmente en la modalidad matchplay —juego por hoyos—, reúne a los 64 primeros jugadores del ranking mundial. Una vez más el draw no contó con la presencia de ningún jugador latinoamericano. Los participantes se dividen en cuatro llaves, bautizadas con el nombre de grandes campeones del pasado: Bobby Jones, Gary Player, Sam Snead y Ben Hogan.
Por las grandes figuras que convoca, además de la gran bolsa en premios que reparte —este año fueron 8,5 millones de dólares—, después de quince disputas consecutivas el Match Play se ha convertido en uno de los grandes torneos del comienzo de la temporada.
Resulta interesante además observar el desempeño de los mejores golfistas del mundo en la modalidad matchplay, ya que salvo en la Ryder Cup o en la Presidents Cup, nunca lo hacen en esta forma. Cabe recordar que el juego por hoyos fue la primera clase del deporte del golf en sus orígenes, hasta que más tarde llegó la del medalplay. El formato del juego por hoyos encierra en sí mismo mucha emoción, mucho drama, donde cada hoyo representa un nuevo reto. Esta característica lleva además a que el público lo disfrute sobremanera. No se juega contra la cancha, sino que se hace contra un rival, en una estrategia totalmente distinta al juego por golpes.
El desarrollo de
la competencia
La cancelación de la primera ronda llevó a la reprogramación por parte del Comité Organizador del resto del certamen con todas las complicaciones que esto conlleva. Así fue que en principio se resolvió —siempre dependiendo del clima— que tras los dos primeros días de juego, los cuartos de final se jugarían en la mañana del sábado 23, mientras que por la tarde de ese mismo día se disputarían las semifinales. La final, en principio prevista, como es tradicional, a 36 hoyos, fue reducida a 18 a disputarse al día siguiente. Quienes continuaran en competencia debían enfrentarse entonces a una verdadera “maratón” golfística, que implicaba un gran esfuerzo físico para dichos jugadores.
Para decepción de los organizadores, de la televisión y del público, en la jornada inaugural disputada finalmente el jueves 21, además de otros resultados totalmente inesperados se dieron las derrotas de Rory McIlroy ante Shane Lowry y de Tiger Woods contra Charles Howell III. Los número uno y dos del ranking mundial se despedían así tempranamente del certamen.
En el mundo del golf es sabido que en partidos matchplay a 18 hoyos, no hay favoritos y esa primera ronda lo ratificó una vez más.
Definición recién
sobre el final
A partir de ese momento el torneo tuvo un desarrollo normal, aunque continuaron dándose resultados inesperados, quedando así por el camino otros favoritos.
Para llegar a la final, Kuchar derrotó en la semifinal a Jason Day, mientras que en la otra llave Mahan hizo lo propio con Poulter, uno de los mejores jugadores de matchplay del mundo y puntal en la angustiante victoria del equipo europeo en la última Copa Ryder, disputada en octubre del año pasado.
En la final, hubo paridad en el comienzo, pero a partir del hoyo cuatro Mahan en forma increíble hizo tres bogeys consecutivos, por lo cual Kuchar sacó una ventaja considerable y finalizó cuatro arriba en los primeros nueve hoyos.
Todo hacía presumir una rápida dilucidación del partido, sin embargo, reaccionó Mahan haciendo cuatro birdies seguidos a partir del hoyo 12, agregándole dramatismo a la definición. También ganó el hoyo 16, por lo cual la diferencia de Kuchar a esa altura era solamente de uno arriba. Pero en el capítulo siguiente este mostró toda su categoría para ganar el hoyo 17 y cerró el partido para quedarse finalmente con el título.
“Ganar seis partidos contra los 64 mejores jugadores del ranking mundial es algo increíble”, manifestó tras la entrega de premios el ganador. “La modalidad matchplay tiene una gran presión, es un formato fascinante donde cada hoyo es un nuevo desafío y la presión va en aumento”, declaró Kuchar.
Por su triunfo, el golfista estadounidense ascendió quince lugares en el ranking mundial y se ubicó ahora en el octavo puesto del escalafón. Además recibió un cheque por 1,4 millones de dólares y aseguró su tarjeta en el PGA Tour hasta el año 2016, demostrando la gran importancia que significa para un jugador profesional ganar uno de los torneos de la Serie Mundial.
El próximo evento de esta serie que comenzó a jugarse en 1999 y que consta de cuatro torneos, tendrá lugar en dos semanas, en ocasión del Cadillac Championship. Como es tradicional, la sede será la famosa cancha Blue Monster, del Doral Country Club de Miami, considerado uno de los mejores veinte campos de Estados Unidos. Una vez finalizado el torneo esta cancha será cerrada por un período de dos años para ser totalmente remodelada. Los trabajos estarán a cargo del diseñador Gil Hanse, el mismo que está desarrollando el trazado donde se concretará el regreso del golf a los Juegos Olímpicos en Río de Janeiro en el 2016.
En el Blue Monster, la bolsa en premios será de 8,5 millones de dólares y estarán presentes de acuerdo a las condiciones de la competencia, solamente los primeros 50 jugadores del ranking mundial.