Los actuales gobiernos departamentales se instalaron a mediados de 2015 y, en 2016, las nuevas administraciones tuvieron su primer año calendario completo. Fue también cuando entraron en vigencia sus propios presupuestos para el quinquenio.
Los actuales gobiernos departamentales se instalaron a mediados de 2015 y, en 2016, las nuevas administraciones tuvieron su primer año calendario completo. Fue también cuando entraron en vigencia sus propios presupuestos para el quinquenio.
Accedé a una selección de artículos gratuitos, alertas de noticias y boletines exclusivos de Búsqueda y Galería.
El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáLos balances de las intendencias de 2016 mostraron, en general, mejores resultados financieros. De hecho, fue el primero desde 2008 en que, en conjunto, dieron superávit. Eso surge de cálculos realizados por Búsqueda a partir de las últimas estadísticas disponibles, recolectadas por la Oficina de Planeamiento y Presupuesto.
Si se analiza en conjunto a las 19 comunas —seis con déficit y el resto con superávit—, el resultado fue positivo en US$ 71 millones. En 2015 las intendencias habían tenido un saldo negativo global de US$ 26 millones.
La mitad del superávit conjunto del año pasado fue generado por Montevideo (US$ 36,7 millones).
Otras intendencias con balances positivos fueron Colonia, Lavalleja, Florida y Tacuarembó; en 2015 habían arrojado déficit. En Salto y Cerro Largo se dio la situación inversa (pasaron de registrar superávit en 2015 a dar déficit en 2016). Paysandú viene acumulando resultados negativos año tras año desde hace más de una década, y también San José, Rivera y Maldonado, aunque desde tiempos más recientes. La comuna de ese último departamento fue la que cerró con mayor déficit en 2016 (US$ 8,9 millones).
Pero un análisis más completo de esas cifras hace necesario comparar las magnitudes, por ejemplo, con el tamaño de cada economía departamental (como se hace con el resultado de las finanzas del conjunto del sector público en porcentaje del Producto Bruto Interno). En 2016 la comuna de Maldonado volvió a ser la que tuvo el peor desempeño, con un déficit equivalente a 0,3% del PBI departamental (considerando datos de 2011, los últimos disponibles).
La información disponible de la OPP permite analizar las finanzas de cada intendencia hasta 1989.
Considerando el último año calendario (hasta el 31 de diciembre) de los gobiernos departamentales, surge que en 1989 todos dieron pérdidas, salvo Montevideo. Diez años después, en 1999, no hubo excepciones (lo mismo ocurrió en 2002, año en que Uruguay atravesó por una grave crisis económica que afectó los ingresos tributarios de las intendencias).
Tanto en 1994 como en 2004 fueron tres comunas las que dieron superávit, mientras que fueron seis en 2009 y siete en 2014.
En todo el período, desde 1989, la intendencia salteña fue la que tuvo peores resultados y solo dio superávit en dos años (2006 y 2015). Por otro lado, Lavalleja tuvo la mayor cantidad de años con saldos positivos en sus finanzas (16 de los 28).