Oscar Estévez estrenó la comedia Amores pendientes, concebida en su escuela La Escena
Una cuna de actores entre la cámara y el telón
escribe Pablo Staricco
La escuela La Escena da la bienvenida a sus estudiantes con el rostro de Al Pacino, plasmado en un mural que adorna la entrada junto con una frase: “La interpretación es una palabra terrible. Hace que uno se sienta mal con solo decirla. Es más bien un intento de alcanzar una cierta verdad, un punto en común, un intercambio, una conexión que nos permite descubrir una verdad interna. Lo que realmente se busca aprender al actuar es cómo no actuar”.
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