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En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáAl señor presidente, o a quien corresponda. Tema: Tolerancia cero. Sr. Presidente, como supongo, ha observado, en estos momentos en que se están llevando a cabo las campañas electorales respectivas a la Presidencia de EEUU, ha sido usted indirectamente elogiado por uno de los candidatos a dichas elecciones, Bernie Sanders, senador por el estado de Vermont, en cuanto el mismo se refiere al mérito de Uruguay en haber podido imponer la prohibición de fumar en lugares cerrados de dicho país, es decir, que no se encuentren ambientados al exterior.
En nuestro concepto es, sin duda, un gran logro que no perjudica a nadie, pues los ciudadanos que deseen fumar pueden ubicarse para ello en ambientes aireados.
Sr. Presidente, evidentemente no ocurre lo mismo con lo que llamamos tolerancia cero para conducir, hecho este, en nuestro concepto totalmente exagerado que, entiendo, no ocurre en ninguna parte del mundo.
Entendemos que dicha imposición es injusta y no tiene sentido práctico. Yo, personalmente, fui atropellado por imprudencia del conductor en la intersección de las Avdas. Bulevar Artigas y 18 de Julio, en lo que se confirmó que el alcohol nada tuvo que ver en el hecho, como es el caso de otros hechos similares que se nos han contado, en que tampoco nada tuvo que ver el alcohol, y sí la inexperiencia de un conductor (accidental) que tuvo que sustituir al propietario del vehículo en cuestión por haber bebido este... una copa.
Es nuestra intención demostrar que la medida impuesta de tolerancia cero no tiene sentido práctico ni previsor, pues por un lado se impide tomar una gota de alcohol para que aun así pudiera ocurrir un serio accidente, y por otro lado se tortura a la persona que, teniendo vehículo para llevar a su familia a una reunión, resguardándose inclusive de la incontrolable delincuencia que está hoy en día en la calle, no pueda hacerlo y deba estar necesariamente expuesto con su familia a la espera de un taxi, que cuesta muchas veces ubicar, los cuales estadísticamente, son los que más accidentes han provocado con serias consecuencias preferentemente a los propios clientes, parece mentira pero es la verdad. Precisamente, hace unos días el diario “El País” (07/05/2016), transcribe la siguiente publicación con el título “Morir en las calles de Montevideo: esperar el ómnibus o circular en bicicleta en Montevideo puede ser mortal. Ni las personas mejor entrenadas se salvan de una delincuencia cada vez más armada y dispuesta a todo” (el resaltado es nuestro).
Vamos a entendernos, no es el caso que pregonamos, de que no merezca una severa sanción quien conduzca alcoholizado, por el contrario solicitamos que, como existe en todas partes del mundo, se tenga en cuenta una medida razonable de alcohol para conducir.
Me pregunto entonces, ¿en la esperanza de que se comprenda el concepto de riesgo negativo y al mismo tiempo la felicidad de aquellas personas que puedan tomar, por lo menos, una copa, ante cualquier festejo con sus seres queridos o amigos, sería ello un riesgo para que ocurriera una tragedia? Porque si así es, considere Sr. Presidente que nada he dicho, ya que nada se puede hacer contra actitudes gubernamentales injustamente impuestas.
Oscar W. Calleriza
CI 609.179-0