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Old money: la sobriedad y tradición entre las tendencias

De Grace Kelly hasta Ralph Lauren siguieron esta moda emergente de redes sociales, símbolo de estatus y buen gusto, sin grandes logos y con colores neutros

En moda surgió como una manifestación para desprenderse de la ostentación asociada al nuevo rico. Pero el término old money hace referencia a las familias que mantuvieron su riqueza por generaciones y tiene sus raíces en la aristocracia europea y la alta sociedad estadounidense del siglo XIX, donde las fortunas se heredaban y se conservaban a lo largo del tiempo.

Estas familias adineradas prefieren la sofisticación y sobriedad, y optan por prendas de alta calidad y diseños atemporales, evitando las extravagancias y las tendencias pasajeras. La elegancia contenida de las prendas básicas fáciles de combinar no solo refleja su estatus económico, sino también sus valores de discreción y refinamiento. Sin embargo, este estilo comenzó a ser adoptado por quienes lo veían a través de las redes sociales hasta conseguir­ hacerse un hueco entre las tendencias actuales, que también persiguen estos valores con fines ligados a la sostentabilidad.

Grace Kelly, la actriz convertida en princesa de Mónaco, es un ícono referente del old money­. Sus elecciones de moda, tanto en su carrera cinematográfica como en su vida real, reflejan una elegancia atemporal y una sofisticación sin esfuerzo. Jacqueline Kennedy Onassis­, como primera dama de los Estados Unidos, estableció un estándar de elegancia discreta que continúa siendo una referencia en la moda. Sus trajes de corte limpio y sus perlas se convirtieron en símbolos y hasta el día de hoy siguen siendo replicados constantemente.

El old money es entonces un símbolo de elegancia en un mundo en el que las tendencias a veces son cada vez más ridículas, además de que cambian rápidamente. Su enfoque en la calidad, la tradición y la discreción lo vuelve interesante tanto para las generaciones pasadas como para las actuales.

De Grace Kelly a Ralph Lauren

A lo largo de los años varias personalidades se han convertido en emblemas del estilo old money, que no solo han influenciado la moda, sino que también han personificado los valores asociados a este estilo.

Sin ser un aristócrata por nacimiento, el diseñador Ralph Lauren ha encarnado y promovido el estilo old money a través de su marca desde siempre. Su visión de la moda incluye elementos de la vida ecuestre y la aristocracia inglesa, reinterpretados para un público moderno.

El resurgimiento del interés por el estilo old money en la moda contemporánea es notable: en un mundo dominado por la cultura del consumismo rápido y las tendencias virales, el old money ofrece una alternativa de estabilidad. Lo de siempre se ve bien.

Estilo Old Money
Lo último en tendencias: el estilo Old Money

Lo último en tendencias: el estilo Old Money

Marcas de lujo como Hermès, Burberry y Chanel continúan encarnando los principios de este estilo a través de sus colecciones. Estas casas de moda han mantenido su prestigio y relevancia al centrarse en la calidad, la artesanía y los diseños atemporales, aunque destinen una pequeña parte de sus colecciones a incorporar tendencias.

Además, que el mundo de la moda haya dado un vuelco hacia lo sostenible ha reforzado el atractivo del old money. La preferencia por prendas duraderas y bien confeccionadas coincide con los principios de la sostenibilidad, que aboga por reducir el consumo excesivo y valorar la longevidad de las piezas de vestuario.

Hoy, en la era digital, las redes sociales han dado lugar a una nueva generación de influencers­ y celebridades que adoptan y reinterpretan este estilo. Figuras como Meghan Markle y Kate Middleton, o la duquesa de Cambridge, han revitalizado este estilo con sus elecciones de moda que combinan la tradición con un toque moderno.

Meghan Markle, por ejemplo, ha sido vista usando piezas de diseñadores clásicos, como Givenchy y Stella McCartney, mientras que Kate­ Middleton es conocida por su preferencia por marcas británicas de larga trayectoria, como Alexander McQueen y Barbour.

Ambas mujeres han logrado equilibrar la modernidad con la herencia, reflejando la evolución del estilo old money en el siglo XXI.

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Un armario old money: cinco cosas a tener en cuenta para quienes siguen las tendencias

Calidad sobre cantidad: La preferencia por prendas bien confeccionadas y duraderas es fundamental. Las piezas de vestuario son inversiones a largo plazo, y la artesanía es altamente valorada.

Colores neutros y tonos clásicos: La paleta de colores del estilo incluye tonos neutros como el beige, el blanco, el azul marino y el gris. Estos colores atemporales evitan las modas fugaces y garantizan la longevidad de las prendas.

Diseños sencillos y elegantes: Las prendas suelen tener cortes clásicos y líneas limpias. La simplicidad es clave, evita detalles innecesarios o adornos excesivos y usa patrones que, por lo general, favorecen a cualquier tipo de silueta.

Accesorios discretos y de alta calidad: Los accesorios como relojes, joyas y bolsos son elegidos por su calidad y diseño atemporal, no por su capacidad de llamar la atención, y, en muchas ocasiones, priorizan modelos que no tienen logo distintivo pero sí un diseño fácil de reconocer.

Prendas de herencia: Muchas piezas de vestuario son heredadas de generaciones anteriores, lo que añade un valor sentimental y una historia personal a la estética, además de un valor que en reventa podría triplicar el precio original.