Vecinos de la Plaza Guernica

1. Innecesaria: La Plaza Guernica se encuentra a 250 metros del Parque Batlle, donde existe una amplia área para recreación de perros sueltos con cartelería que establece ese fin y de un canil en la zona donde estaban los juegos mecánicos. Aquí es innecesaria.
2. Inconsulta: No han sido consultados los vecinos sobre la utilidad o no de la realización de esta obra (debió hacerlo el área social del Municipio). No ha habido estudios de impacto ambiental, social, ni de seguridad.
3. No informada: Nunca se puso cartelería que anunciara la obra, como siempre se debe hacer y como está establecido en el llamado de la licitación (pusieron un cartel hace cinco días después de nuestras quejas; la obra empezó el 27/01/25). Un día nos despertamos con los obreros trabajando sin saber de qué se trataba y fueron ellos que nos informaron.
4. Desproporcionada: Esta obra toma casi el 50% del área de la plaza. Paisajísticamente deteriora visualmente la plaza, quitando área verde por el piso que se pondrá sustituyendo el césped. Limita el uso recreativo de los vecinos que tienen distintas actividades en ella: padres con hijos, gente haciendo gimnasia, personas mateando y conversando, jóvenes de los institutos de enseñanza que muchas veces se juntan a departir, personas con perros que los pasean, levantan los desechos y los ponen en las papeleras instaladas para ese fin; todo armónicamente.
5. Inconveniente: Propicia la inseguridad con la presencia de malvivientes (adictos, exconvictos, gente de costumbres antisociales) que se apoderarán de las instalaciones haciendo tolderías en las rejas y utilizando las instalaciones como propias; la obra está en construcción y ya hay gente ocupándola por las noches, ya que las rejas y el muro les es propicio para sus fines. Ya lo sufrimos durante cuatro años. No queremos volver a eso y el Comunal no tiene cómo evitarlo.
6. Potencialmente insalubre: Para que se cumplan las reglamentaciones, debe de haber gente fiscalizando y no la habrá (no existen los guardaparques). Las casas frente al canil están ¡¡entre 18 y 20 metros de distancia!! Las reglamentaciones internacionales consultadas establecen la distancia mínima en 50 metros. Las heces y orines producen contaminación olfativa, además de contaminación ambiental y posibles infecciones; este canil tendrá piso de balastro imposible de limpiar de los orines y difícil que los usuarios levanten los excrementos. Tal vez un porcentaje de personas podrán levantar las heces y ubicarlas en papeleras que seguramente se dispondrán; si se visita el canil de la Rambla Wilson, apreciarán que a varios metros de este, el olor que emana de esas papeleras no es nada agradable. No nos oponemos a los caniles bien ubicados, por ejemplo, a más de 50 metros de las viviendas, ¡¡aquí la cercanía es asombrosa!! La Ley 18.471 de bienestar animal establece que: a) “se deben impedir ruidos molestos”; todos sabemos que con varios perros juntos habrá peleas, ladridos y, por qué no, peleas entre propietarios de mascotas; la contaminación sonora será inevitable, y b) “evitar los malos olores por medio de lavado y desinfección diaria de los lugares donde se encuentran los animales”, que, como dije, en piso de balasto es imposible hacerlo, aun si hubiere quien lo hiciera (que no lo habrá).

En representación de la sociedad civil Vecinos Alerta Parque Batlle, los saluda atentamente.

Carlos Tipoldi

CI 1.346.667-5