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    El puerto de aguas profundas y Aratirí son “los dos proyectos esenciales para los próximos años del país”, según Puntigliano

    El gerente general de la empresa minera anunció que hay interesados en asociarse para generar una industria siderúrgica pero que aún no están dadas las condiciones energéticas para hacerlo en Uruguay

    Por un mineroducto de 212 kilómetros de largo el hierro de las minas de Aratirí llegará hasta el puerto de aguas profundas, donde se embarcará hacia el extranjero. Esas 18 millones de toneladas que se exportarán cada año serán un alto porcentaje de la carga que saldrá por el puerto que el gobierno de José Mujica se propone instalar en los próximos años.

    Por eso el presidente se reunió el martes 3 con representantes de la empresa Zamin Ferrous, matriz de Aratirí, acordó coordinar ambos emprendimientos y se comprometió, según informó la Presidencia, a “realizar los mayores esfuerzos para lograr la culminación del proyecto Valentines”.

    Para Fernando Puntigliano, gerente general de Aratirí, el encuentro representó un “respaldo” oficial al proyecto minero, que a su juicio es la “piedra fundamental” para la construcción del puerto de aguas profundas porque aportará el volumen de producción necesario para que sea viable. En una entrevista con Búsqueda, Puntigliano opinó que esos emprendimientos son “los dos proyectos esenciales para los próximos años del país”.

    Puntigliano informó que está “muy avanzado” el financiamiento necesario para invertir los U$S 3.000 millones que costará el proyecto Valentines de Aratirí. Además adelantó que hay empresas interesadas en asociarse con la compañía minera para llevar adelante una industria siderúrgica aunque todavía no están dadas las condiciones energéticas para que esos procesos de valor agregado ocurran en el país.

    “Necesitan instalarse donde hay energía barata. Si queremos que se desarrollen pasos siguientes tenemos que pensar cómo solucionamos el tema de la energía”, advirtió.

    —¿Qué conversaron con el presidente?

    —La conversación se orientó a alinear dos desarrollos estratégicos del país: el puerto de aguas profundas, un viejo sueño, que potencia la proyección de Uruguay como centro logístico regional y que se cruza con otro eje de desarrollo, el proyecto de Zamin Ferrous, que además potencia la parte este del Uruguay desarrollando una cantidad de infraestructuras que constan en, por ejemplo, la mejora de la red eléctrica, el desarrollo de una industria que le agrega valor al mineral de hierro que se extrae, un proyecto logístico de transporte y un proyecto de infraestructura portuaria.

    Decir que Aratirí es un proyecto minero es un error. Este es un proyecto minero, industrial y logístico. La inversión en minería dentro de la global es la parte más pequeña; la inversión industrial y logística son las dos grandes patas de este proyecto. Y dentro de la inversión logística está prevista una terminal. Así confluyen los dos proyectos esenciales para los próximos años del país.

    —¿Sin puerto de aguas profundas no hay proyecto minero?

    —El proyecto minero necesita una terminal de aguas profundas pero puede existir sin un puerto global. Pero ya que se hace un puerto se pueden alinear las dos estrategias. Antes de que se lanzara el puerto el proyecto ya era viable. El proyecto Valentines aporta al puerto una masa crítica alrededor de la cual se puede desarrollar una estructura portuaria que el país va a necesitar por los próximos 100 años. Es un catalizador del avance logístico del país, algo en que el país ha tenido dificultades.

    —¿Si no existiera el proyecto Aratirí sería posible un puerto de aguas profundas?

    —Iba a ser posible en algún momento. La cuestión es cómo se consiguen las masas críticas. Esa ha sido la dificultad que ha tenido Uruguay desde que surge la idea del puerto, conseguir una masa crítica firme que permita que alrededor de eso se construya. Si no existiera la industria del hierro, algún día se iba a conseguir. Esto es un catalizador, permite que tal vez ocurra antes.

    —¿Aratirí participará en la inversión?

    —Cualquiera sea la configuración, Aratirí tiene que hacer su propia terminal, así que es parte de la inversión.

    —¿Considera que la reunión con el presidente fue un respaldo explícito del gobierno al proyecto?

    —Yo lo considero un respaldo; que el gobierno considere que la piedra fundamental del puerto de aguas profundas es Aratirí es una valoración positiva del proyecto. El gobierno y todos los partidos entienden que la minería a gran escala es posible en Uruguay, como surge del documento multipartidario, entonces yo entiendo que el país respalda el proyecto.

    —¿Ya tienen pronta la financiación necesaria para hacer la inversión?

    —Está muy pero muy avanzado ese tema.

    ¿Qué negociaciones se están llevando adelante respecto al canon?

    —El canon está establecido por la ley y después el gobierno ha mantenido una disciplina absoluta en lo que le ha indicado la Comisión de Minería de Gran Porte. Todas las discusiones que se dan con nosotros son sobre las reglas de juego que pusieron los partidos políticos. Vamos a adaptarnos a lo que dijo el país. El dinero que se va a pagar lo va a determinar una ley que todavía no fue enviada al Parlamento. El gobierno se tiene que ceñir a lo que determinó la comisión y nosotros nos tenemos que ceñir a las políticas de Estado.

    —¿Prevén que haya problemas con ese tema?

    —Nosotros creemos que podemos vivir con eso y estamos negociando para cumplir lo que los partidos políticos decidieron.

    —¿En algún momento el proyecto estuvo en duda?

    —Yo diría que no, en realidad la inversión nunca dejó de avanzar. Lo que pasó es que los procesos se produjeron a una velocidad menor a la esperada, entonces los plazos se extendieron un poco más.

    —¿Por qué ocurrió eso?

    —Hay un proceso de maduración de un país que no tenía minería de gran porte, pero sí hace mucho tiempo que tiene minería. Hay 327 minas a cielo abierto en todo el país.

    —¿Cuáles son las necesidades logísticas del emprendimiento más allá del puerto? ¿Hace falta un ferrocarril?

    —Desde el punto de vista ambiental es mucho mejor el mineroducto. ¿Qué es el mineroducto? Sacamos el concentrado de hierro, que es un polvo de unas 50 micras, se mezcla con agua, se manda por un caño de 212 kilómetros de largo y 62,5 centímetros de diámetro. Al final del tubo hay un separador que separa el concentrado de hierro del agua, y el agua es bombeada por un acueducto hacia atrás para volver a ser utilizada. Por eso el consumo de agua es mucho menor que algunos cientos de hectáreas de arroz, cuando en Uruguay tenemos miles. Entonces, con ese sistema la actividad productiva sobre la tierra no se ve afectada y el dueño de la tierra tiene un pago adicional porque por su campo pasa un ducto.

    —¿Van a vender lo que extraigan o habrá un proceso previo de industrialización?

    —Hay dos maneras de analizar el tema. Una es si hay una transformación del material y otra es económica. ¿Cuánto vale el material que se extrae de la mina? Si vas allí y extraés de la mina, ese material en el mercado vale U$S 5 la tonelada, es casi como vender pedregullo. Pero si a ese producto lo tratás como lo vamos a tratar nosotros, lo triturás, lo separás magnéticamente sin químicos, al final obtenés un producto que es un óxido de hierro que tiene 70% hierro, que casi no tiene impurezas y es un producto premium y que vale unos U$S 130 en el mercado. Algo que valía U$S 5 pasa a valer 130. Algunos podrán decir teóricamente que lo único que hice fue extraer un pedacito del material de otra parte pero en definitiva estoy aumentando notoriamente el valor económico. Por eso también justifica una inversión industrial tan importante, de U$S 1.000 millones, solamente para pasar de un producto de U$S 5 a uno de U$S 130. Eso es notoriamente un agregado de valor. Ese es el gran aporte, no estamos sacando de la tierra y vendiendo algo, lo estamos mejorando y estamos generando las bases para potenciales desarrollos mayores. Porque estas cosas no vienen todas juntas sino en etapas; antes hay que crear las condiciones. Después hay efectos indirectos, como el fortalecimiento de la red de alta tensión del Uruguay, muy pobre en el este del país e inhibidora de las inversiones, que se fortalece gracias a que hay una inversión para construir cinco líneas nuevas.

    —¿El desarrollo posterior incluye la industrialización del hierro en Uruguay?

    —Aratirí ha recibido ofertas de varios grupos que proponen seguir agregando valor al concentrado de hierro que Aratirí va a producir.

    —¿En Uruguay?

    —Eso dependerá de otras cosas, porque hay quienes quieren comprar el producto para pelletizar (producir pellets, aglomerado de hierro) y después poner la industria de acero. El socio ya está presente, ya está interesado y ya analiza a Uruguay como posibilidad pero nosotros como uruguayos tenemos que hacer esto atractivo porque las plantas pelletizadoras y siderúrgicas, que son grandes consumidores de energía, necesitan instalarse donde hay energía barata. Si queremos que se desarrollen pasos siguientes tenemos que pensar cómo solucionamos el tema de la energía.

    —¿La empresa tiene previsto vender el proyecto una vez que se instale o piensa operarlo durante todo el período de habilitación?

    Operarlo durante todo el período de habilitación.

    —En un momento se había manejado la posibilidad de venderlo.

    —No, nunca se habló de vender el proyecto. Lo único que se abre es la posibilidad de que se integre un socio vertical. Yo he visto que en medios de prensa han manejado esa información incorrectamente. Es una derivación de una mala interpretación. Acá se trata de pensar en la estrategia país. Esta empresa quiere operar el proyecto hasta el fin del proyecto. Si después pasa como Botnia y UPM y todo eso... pero esta es una empresa operadora. Si además se quiere integrar un socio, eso se alinea a la estrategia de la empresa y ese know how es bienvenido. Porque ellos son conocedores de la parte compradora del mercado pero además es algo que le puede interesar al país porque puede terminar desarrollando más pasos de agregado de valor en Uruguay, siempre y cuando el Uruguay ofrezca las condiciones necesarias.

    Las minas después de la extracción: hoteles, reservas, parques o lagos

    —¿Qué opciones tiene un productor una vez que ustedes deciden que les interesa su terreno?

    —Lo que no puede una persona es detener un proyecto que es de interés nacional. El productor puede venderle a la empresa si se ponen de acuerdo en el precio. También puede quedarse con el terreno para minería y ganar el canon, que es muy alto. Y puede obligar compulsivamente a la empresa a comprar el terreno y determina el Estado cuál es el valor.

    —Muchos productores se quejan de que la producción minera los va a perjudicar. ¿Usted qué responde?

    Es una legítima preocupación la de los productores. El proyecto está por encima de los estándares internacionales para que el productor vecino no sea afectado. Tenemos las cinco minas restringidas a esas 500 hectáreas y podemos asegurar que fuera de esa zona las condiciones de aire y sonido son las que establece la ley. Antes de empezar a operar se hacen pruebas que permiten al Estado comprobar que se cumplen las condiciones.

    —¿Qué va a pasar con la tierra una vez que termine el proyecto?

    —Hay ejemplos en Europa, en Brasil, en Perú y en Argentina que son buenos ejemplos de cómo se gestiona. La minería en el mundo ha cambiado. Ya no es como antes que se hacía un pozo y ya está. Ahora hay obligaciones que cumplir, y en casi todo el mundo cuando termina la actividad minera hay que hacer una readecuación que permita la continuidad de actividades posminería.

    —¿Qué tipo de actividades se pueden desarrollar?

    —En algunos lados se rellena, en otros se hacen reservas de agua, hay un ejemplo en China con hoteles, se hacen resorts. Está el ejemplo de Alemania, que en la zona más minera está repleta de lagos y parques. No se van a explotar las cinco minas a la vez. Cuando se termine una de ellas, para pasar a implementar la otra, esa va a tener que cumplir con las normativas.

    Desarrollo
    2012-07-05T00:00:00