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En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáEn los últimos tiempos se ha mencionado a la Auditoría como el medio idóneo para verificar situaciones y comprobar si en la gestión de cualquier organización se ha actuado con probidad y la debida eficiencia.
La Auditoría de Estados Financieros no persigue esos fines.
Recorramos algunos ejemplos de diversa índole que han sido de público conocimiento en el ámbito privado y público.
En una institución bancaria, una oficial de cuentas se apropió de dinero de sus clientes mediante maniobras que no fueron detectadas por los mecanismos de control interno de esta y la Auditoría Externa de Estados Financieros, al no ser su objetivo, no los detectó .
Es necesario tener en consideración que las instituciones financieras deben preparar Estados Financieros Trimestrales , sin perjuicio de que internamente se suelen realizar periódicamente.
En una empresa automotora, una empleada administrativa se hizo de una suma importante de dinero durante aproximadamente una década sin ser detectada internamente por la empresa ni por las Auditorías Externas de sus Estados Financieros.
Son temas de índole privada, a partir de maniobras fraudulentas, que no afectan directamente a la ciudadanía .
Desde otro punto de vista, la gestión desacertada, sin perjuicio de que otros eventuales motivos en la administración pública generen consecuencias negativas, que la población finalmente, vía tributos o precios debe hacerse cargo.
Ancap. Ente autónomo que detenta el monopolio de la refinación de petróleo tuvo resultados finales negativos muy importantes en términos absolutos entre los años 2011 y 2015.
En 2014 la pérdida final representó en sus Estados Financieros Individuales el 14 % de sus ingresos, o sea, que cada $100 que vendió, perdió $14.
Infelizmente, no existió ningún organismo público que detectare a tiempo los problemas que estaba padeciendo la empresa, imaginemos que debido a una errónea gestión a partir de una toma de decisiones desacertadas de enorme magnitud.
Los informes de Auditoría de Estados Financieros entre los años 2011 y 2015 fueron emitidos sin salvedades. En tanto, al no ser el objetivo de la Auditoría Externa la evaluación de la gestión empresarial, los dictámenes no hacen mención a las pérdidas.
Por su parte, el Tribunal de Cuentas en sus dictámenes hizo referencia a aspectos de índole formal con relación a los Estados Financieros de los ejercicios 2012 y 2013.
Con relación a los Estados de Situación Financiera del ejercicio 2014 su dictamen fue adverso pero fundado en una reclasificación de un saldo y por una diferencia en el monto del mismo concepto en dos ejercicios.
Con respecto a los Estados de Resultados de 2014, el Tribunal de Cuentas expresó opinión sin salvedades, lo que implica no tener objeciones con respecto a su presentación.
Con respecto al Ejercicio 2015 manifestó también opinión sin salvedades.
Sin perjuicio de ello, hace énfasis en las pérdidas por deterioros ocurridos en determinados activos.
En todos los casos, los informes se emiten con posterioridad al cierre del Ejercicio y por tanto sólo podrán verificar situaciones ocurridas e intentar encontrar las causas que motivaron tales desaciertos.
Por su parte, otra dependencia estatal la Auditoria Interna de la Nación explicita en su página web :
“La AIN, a través de la División Sector Público, encabeza el sistema de control interno de los actos y gestión económico financiera de los órganos y reparticiones comprendidos en la persona pública Estado y de los Entes Autónomos y Servicios Descentralizados comprendidos en el Artículo 220 de la Constitución de la República.”
Por tanto, el ámbito de su actuación se encuentra limitado por el Artículo 220 de la Constitución.
Los informes disponibles de la AIN que se refieren a las actuaciones realizadas hasta el año 2018 se relacionan, en líneas generales, con la evaluación de los procesos administrativos, no ubicándose información de las efectuadas en 2019.
En suma, no existen en el ámbito público mecanismos eficientes de control de la gestión.
El control de la gestión debe ser realizado en el momento oportuno, de lo contrario deviene en mera práctica forense.
Es un desafío que rápidamente debe enfrentarse, para mejorar la eficiencia del gasto y de la inversión pública.
Daniel Mathó