Omar López Mato es argentino, médico oftalmólogo y escritor, y desde 2019 se dedica a la producción agropecuaria en Uruguay. Dirige El Ceibo, establecimiento ubicado en la zona de San José de Guaycurú, departamento de San José. Comentó a Agro de Búsqueda que en los años 2001 y 2002 comenzaron a invertir en el país con sus hermanos, cuando “eran muy bajos los precios inmobiliarios, fuimos invirtiendo en campos para arrendar, no los explotábamos”.
Cuidado del suelo
En agricultura señaló que apunta a mejorar las rotaciones, evitando las erosiones o trabajar sobre los campos que se erosionan.
También se refirió a un campo que tiene “una parte natural y una parte de bajos, que estaba muy abandonada, porque los arrendatarios se olvidan de las tierras más marginales, pero las zonas de los bajos de algunos campos son notables. Una de mis tareas es recuperar un área de bajos, que es bastante grande, donde han crecido las malezas. Así estamos recuperando bastante campo, que en un verano seco se convierte en un lugar ideal para criar”.
Indicó que las tierras de Uruguay para agricultura “son más frágiles que en Argentina”, por las ondulaciones del suelo, que “favorecen la erosión cuando la agricultura no se hace bien”.
Puntualizó que a la agricultura “no la hacemos nosotros, se renta. Hay fracciones a las que uno tiene que estar más atento, se van cambiando las rotaciones, y así empezamos con ganadería de vacunos y ovinos”.
Mejoramiento genético
López Mato señaló que está mejorando la raza Angus, en la variedad colorada, haciendo transplante embrionario, con (Juan Pablo) Pérez Frontini, con quien ha invertido en mejora genética. “El año pasado tuvimos la enorme gratificación de tener un Reservado Gran Campeón Junior, y esperamos que este año en el Prado pueda hacer un buen papel”, destacó.
Señaló que “ya empezamos a sacar terneras nacidas en el establecimiento. Así que por un lado estamos mejorando todo lo que podemos la genética Angus colorado, que es algo apasionante. Cuando uno va a las exposiciones confirma que el nivel del Angus uruguayo es de los mejores del mundo”.
En la especie ovina indicó que “preferimos Merino”, porque la empresa apunta a la producción de lana fina, pero también señaló que hay grandes oportunidades para la carne ovina. “El consumo de carne ovina es 1% de todas las carnes en el mundo, y sinceramente es rica la carne ovina uruguaya, no tiene nada que envidiarle al cordero patagónico, incluso me parece mejor”, afirmó.
Consideró que se debe “lograr el desafío de estimular el consumo de carne de cordero. Creo que es un producto que tiene futuro. Si el consumo mundial pasa del 1% al 2% es importante”.
En genética lechera indicó que trabaja con Jersey. Agregó que “probablemente nos volquemos a tener un porcentaje más alto de esta raza dentro del tambo”.
Lechería
El tambo era “una materia pendiente que tenía desde la juventud”, expresó López Mato. Comentó que en 1975 su padre fue presidente de La Vascongada (empresa láctea) y en esos años aprendió sobre lechería. “En ese momento tenía 17 años, y siempre tuve esa inquietud, esa curiosidad. Siempre que tenía la oportunidad de visitar un tambo lo hacía, en Argentina y en el exterior”, dijo.
En el establecimiento cuenta con el asesoramiento del ingeniero agrónomo Alejandro Fernández, un entusiasta de la lechería. “Estamos empezando con el tambo. A pesar de que nos tocó una sequía espantosa, estoy muy contento con los resultados, y esta producción me ayudó a sobrellevar la sequía”, valoró el empresario.
Destacó que el tambo le brinda a la empresa “una estabilidad financiera, porque uno sabe que tiene cierto tipo de ingresos para cumplir con los gastos fijos, y con los demás rubros vamos complementando”.
Recordó que “cuando hacíamos solamente ganadería (de carne y ovinos) uno tenía que vender los animales en los momentos menos adecuados para poder cumplir con los compromisos. Esta diversificación nos permite esperar un poco más para vender los animales, considerando las oscilaciones propias de precios de la carne, ganar más kilos y vender en momentos más oportunos”, señaló.
También comentó que al tambo “lo asociamos con pequeños corrales, que nos permiten mejorar la terminación de algunos animales”.
Forestación
La actividad forestal la realiza una empresa que arrienda parte del campo, y “es un negocio ventajoso, que tiene un poco de prejuicios. He escuchado algunas tonterías, pero hay que entender que hay competencia a nivel mundial, y el balance de carbono cuenta mucho para compensar las emisiones de la ganadería y de la lechería”, enfatizó. A propósito, sostuvo que “Uruguay está en mucho mejor posición que Argentina y que Brasil, donde hay deforestación”.
“Para Uruguay es muy importante la combinación de la producción maderera, que terminó siendo un rubro importantísimo dentro de las exportaciones, con la producción ganadera. Es una simbiosis muy beneficiosa. En invierno los bosques sirven de protección y en verano de sombra. Estamos muy entusiasmados, incluso destinamos un área mayor a la forestación, porque estamos convencidos de que es un arma interesante, y hay que luchar contra los prejuicios”, sostuvo.
Pros y contras de Uruguay
Consultado sobre las ventajas y desventajas que encontró en Uruguay, el empresario argentino comentó que “cuando uno toma esta decisión de iniciar una actividad en otro país llega con prejuicios, buenos o malos, con una concepción distinta, que va cambiando de acuerdo a la experiencia de cada uno”.
Entre las fortalezas del país destacó “la estabilidad económica, sobre todo comparado con Argentina. Lo vemos en el valor del dólar. Además no hay retenciones, hay precios internacionales, el mercado es más transparente y permite hacer previsiones. El sistema está bastante saneado y hay crédito”.
Pero reconoció que también hay problemas. “Para la mayor parte de los productores agropecuarios el dólar en Uruguay está atrasado o el peso uruguayo está demasiado caro. Este abaratamiento del dólar le quita valor a los productos agropecuarios”, planteó.
También señaló que “al ser herederos del imperio español”, un aspecto que caracteriza al país es la burocracia, que debe “llevarse con paciencia”. Por otra parte se refirió a la justicia, que “también es muy lenta”.
Sobre si recomendaría a alguien de Argentina venir a invertir a Uruguay, respondió que “sí, por supuesto, entendiendo bien las reglas del juego”.