En Búsqueda y Galería nos estamos renovando. Para mejorar tu experiencia te pedimos que actualices tus datos. Una vez que completes los datos, tu plan tendrá un precio promocional:
* Podés cancelar el plan en el momento que lo desees
¡Hola !
En Búsqueda y Galería nos estamos renovando. Para mejorar tu experiencia te pedimos que actualices tus datos. Una vez que completes los datos, por los próximos tres meses tu plan tendrá un precio promocional:
* Podés cancelar el plan en el momento que lo desees
¡Hola !
El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
A fines del año pasado el Banco Central (BCU) instauró el programa de operadores primarios para ser el primer eslabón de sus emisiones de Letras de Regulación Monetaria (LRM). Funcionó muy bien al principio, pero últimamente dio “uno o dos pasos atrás” luego del cambio de política monetaria efectuado en julio, dijeron a Búsqueda fuentes financieras.
¡Registrate gratis o inicia sesión!
Accedé a una selección de artículos gratuitos, alertas de noticias y boletines exclusivos de Búsqueda y Galería.
El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
En el marco de este programa se determina que un grupo de instituciones financieras —actualmente cinco— acceda de primera mano a las LRM para luego revenderlas a otras entidades o a inversores particulares (el mercado secundario). Esa mecánica genera más negocios y da oportunidades de obtener ganancias a estos operadores primarios, que a su vez compiten en un ranking por el volumen de transacciones para mantener esa posición de privilegio.
Si bien la puesta en marcha del programa generó costos a los participantes (principalmente por más horas de trabajo a cambio de una baja rentabilidad), éstos se mostraron optimistas con que en el futuro sería un buen negocio. También cumplió con su objetivo de hacer más dinámico y competitivo el mercado secundario, lo que a su vez mejoraría la eficiencia en la transmisión de la política del BCU al mercado.
Sin embargo, luego del cambio de política monetaria que comenzó a aplicarse desde julio —que sustituyó el manejo de tasas de interés por objetivos de crecimiento de la cantidad de dinero o agregados monetarios— las instituciones participantes del programa comenzaron a tener problemas.
La volatilidad de las tasas en pesos y la escasez de esa moneda en el mercado hacen que el interés de los agentes en el programa haya disminuido. También la baja rentabilidad que obtienen los operadores primarios hace que solo realicen los negocios “para cumplir” y mantenerse en el programa con vistas a futuro, según consultas realizadas por Búsqueda.
De hecho, algunas instituciones proponen adquirir los títulos a tasas exageradamente elevadas (más de 70% anual) en las licitaciones para no faltar a sus obligaciones como operadores primarios, con conocimiento de que esa oferta no será tenida en cuenta.
El ranking desde mayo a noviembre realizado por el BCU y divulgado el viernes 29 de ese mes ubicaba a los bancos en el siguiente orden: BBVA, HSBC, República, Santander y Nuevo Comercial. Ese mismo día, la autoridad monetaria informó que Lloyds y Citibank renunciaron al programa, en el cual figuraban como “aspirantes”.
Este mes la nómina de operadores primarios se actualizará; las instituciones califican con criterios relacionados a su participación diaria en los mercados que es obligatoria y debe cumplir con requisitos dispuestos en un reglamento.
Los negocios con LRM y Letras de Tesorería a través de las dos Bolsas locales fueron por unos U$S 206 millones en noviembre, en un total de U$S 310 millones de títulos públicos y privados transados en el mercado secundario, según datos que difundió recientemente el BCU. En julio la operativa con Letras había sido cerca del triple.
Poco dinamismo.
Algunos de los agentes bancarios consultados señalaron que esperan que al mismo tiempo que se evalúan esos ingresos y salidas del programa, el BCU determine cambios que lo hagan más conveniente para los participantes.
Se trata de “cambios técnicos” y de que el BCU “esté dispuesto a dar más liquidez”, dijo uno de los ejecutivos.
Varios coincidieron en que desde la modificación de la política monetaria “se resintió mucho la operativa” y “hay muy poca demanda de inversores grandes”, principalmente en los papeles de corto plazo. Las LRM que emite el Central son de entre 30 a unos 720 días.
“A veces se opera un solo papel, el benchmark (la referencia a determinado plazo) y papeles similares del mismo vencimiento no se operan”, relataron.
Otra de las fuentes dijo que el mercado “se fue abajo” desde la aplicación de los agregados como instrumento de política. El programa “dio uno o dos pasos atrás” ya que “tanta volatilidad en la tasa hace más difícil que antes hacerlo rentable”, explicó.
Un ejecutivo afirmó que el programa tiene actualmente “poco dinamismo”; los operadores primarios buscan “mantener su lugar en el ranking y limitan las inversiones de los portafolios de negociación a lo mínimo indispensable de forma de no incurrir en pérdidas, más que buscar oportunidades de nuevos negocios”. Y agregó: “En la medida que el mercado de dinero se normalice” el programa “servirá a su propósito”. Por ello en su banco no evalúan abandonarlo, por el momento.