El sector mayoritario de los blancos va por voto de moderados del Frente Amplio como estrategia para el referéndum

Delgado descartó al núcleo duro del Frente Amplio y del PIT-CNT, ese que se encargó de juntar las firmas para impugnar 135 artículos de la ley. Dijo que hay que buscar “sobre todo” a “muchos de los que votaron” la fórmula de Daniel Martínez-Graciela Villar en el último balotaje y que pueda abrirse del “encierro ideológico” en esta instancia electoral. Pidió que se vaya tras un “voto de confianza” de los frenteamplistas y que haya un “poco más de crédito” para el gobierno. “Tenemos derecho a pedir crédito. Lo podemos hacer si tenemos antecedentes”, enfatizó. “Nosotros tenemos el objetivo más importante de ir a tocarle la puerta, con respeto y con la verdad, que va a ser nuestra diferencia”.

Agregó que la LUC que la oposición está cuestionando crea “un respaldo jurídico para la Policía, que le permitió actuar y bajar un 20% los hurtos, las rapiñas y los homicidios y un 50% el abigeato”.

“La LUC les da respuesta”, insistió. “Conseguimos una Policía que recuperó la autoridad y la sociedad recuperó una Policía que la proteja. Mucha gente que votó al Frente Amplio seguramente siga votando, pero puede decir que en esta oportunidad ‘va mi seguridad, mi vida’”, añadió.

En la reunión de Atlántida hablaron desde legisladores hasta intendentes, subsecretarios y ministros. Y el prosecretario de la Presidencia, Rodrigo Ferrés, redactor de la ley ómnibus que se aprobó en el primer año del gobierno, fue el encargado de explicar detalles técnicos y jurídicos de la normativa.

Ya se ha dicho en más de una reunión entre blancos, pero Delgado insistió en que “no hay nada más importante ni para el gobierno, ni para la coalición, ni para el Partido Nacional ni para Aire Fresco, que salir a dar la batalla de aquí hasta el 27 de marzo”. Y volvió a centrarse en la gestión de esta administración, que es como el paraguas que le da cobijo en la intemperie para salir a pedir el voto positivo a la LUC. “Todavía no tenemos dimensión de la crisis mundial que estamos viviendo. Quizás porque somos contemporáneos. Pero los demás nos ven como una referencia mundial”, dijo y enseguida aclaró que esto había que decirlo “con mucha humildad, sin pizarrear”. “¿Esto es mérito del gobierno?”, se preguntó. “El gobierno hizo lo posible, pero el mérito es de la sociedad. Tenemos un gobierno y un presidente que marcó el rumbo y que fue transparente en la información para lo bueno y para lo malo. Y los uruguayos, independientemente de lo que votaron, respondieron”.

Y esa respuesta, dijo, se tradujo en que hoy Uruguay es un “ejemplo en el mundo”. “Los demás nos ponen entre los 10 mejores países del mundo que mejor manejaron la pandemia. Así nos ven. Así nos lo ganamos como país”.

Dijo que hay indicadores económicos que permiten ver que “empezó” la recuperación. “Tenemos mejores niveles económicos, de empleo, sociales, de pobreza, de indigencia, mejores que la prepandemia. Y eso no es solo la inercia de las vacunas. Eso tiene que ver con una decisión del gobierno de no apagar la economía y generar las ayudas sociales necesarias para un rebote económico”. Delgado puso algunos datos sobre la mesa. “Cerramos el 2021 con récord histórico de exportaciones con US$ 11.550 millones, proyectos promovidos por más de US$ 3.500 millones, y con un 7,4% de desempleo que sigue bajando mes a mes”.

El secretario de Presidencia resaltó que se va “a exhibir esta actitud” durante la campaña por la LUC. “También vamos a exhibir estas cifras para pedirle a la gente un poco más de crédito. Porque aunque no lo digan, los promotores del Sí están cuestionando la capacidad de gobernar. Y esto anda en el borde de la calidad democrática. Porque estamos haciendo lo que dijimos que íbamos a hacer y nos eligieron para gobernar”.

Las cuatro canchas de Martín Lema

El ministro de Desarrollo Social, Martín Lema, fue otro de los dirigentes de Aire Fresco que centró la atención en la reunión de Atlántida. Lema les avisó a sus correligionarios que el escenario que se viene tendrá “cuatro canchas” y que “en todas hay que jugar”.

La primera, señaló, es la defensa de esos 135 artículos en cuestión. “Hay una fracción que tiene un interés en informarse en qué fue lo que cambió y cuáles son las consecuencias de un resultado en contra”, puntualizó. La segunda es la del gobierno. Habló del “orgullo” que se debe sentir por la gestión de esta administración y no escatimó elogios a la conducción del presidente Lacalle Pou.

Dijo que la tercera cancha es la “credibilidad” que está en juego. Citó a Aristóteles: “Somos lo que hacemos día a día”. Recordó que los “mismos que hoy gritan por el Sí pedían la cuarentena obligatoria y las muertes evitables”, resaltó la “trazabilidad” de las acciones de gobierno y citó a Lacalle Pou: “Es tan importante llegar como el camino elegido para llegar”. “Con mucho orgullo se pone la cara para defender el No”, exclamó.

La cuarta cancha a la que aludió Lema es la de los militantes y guarda relación con ese pedido de ir tras el voto de los que están lejos de su trinchera. “Hay que hacer el esfuerzo para captarlos como disparador de otras adhesiones. En los núcleos familiares y sociales. No es justo que gane el Sí”, remató. “La defensa del No es nada más y nada menos que un contraste entre intereses electorales e intereses nacionales”.