Cotización de la bolsa de valores 2014 y tendencias para al 2015.
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En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáUn estudio de Estándar and Pobres, la única consultora/encuestadora a la que no le importa lo que diga la gente.
ISIS o Estado Islámico. Al alza.
El emprendimiento más exitoso del año pasado. Más allá del cuestionamiento moral que recibió por sus innovadoras decapitaciones a dos cámaras, el ISIS juntó territorio, plata, armas, petróleo y agrandó el padrón de socios como ninguna otra institución, estado, religión durante el 2014. Además, si hay algo que al islámico le importa un bledo es el juicio de valor occidental. Para el ISIS, decapitar en la arena a un sajón de enterito anaranjado es moralmente aceptable. Fin de la discusión.
Al Qaeda. A la baja.
Envejecidos, reblandecidos y sin iniciativa. La comparación con el ISIS los disminuye. Se le aburguesaron los talibanes, se marearon con las luces y el ruido, las minas que los provocan de adentro de los velos y la prensa esperándolos a la salida de las cuevas. Viven de recordar glorias pasadas; 2001 fue su Maracanazo. Hoy no figuran ni entre los 5 temores más populares a nivel mundial.
Hackers. Para arriba como empanada de helio, como meada de astronauta, etc.
Estos sí están entre los 5 temores mundiales del 2014. Hoy se le tiene más miedo a los hackers que a los nazis. Sus víctimas: actrices de Hollywood que posan como changos de Internet, mails internos de multinacionales, parejas que se graban teniendo sexo (¿en serio hay gente que se quiere ver a sí misma teniendo sexo? No debe haber cosa que me interese menos; creo que prefiero ver a Roberto Moar teniendo sexo antes que a mí mismo), empresas en general. La demanda por los hackers es tal que hasta Corea del Norte tendría algunos, a pesar de que hay 0,27 computadoras cada 100 mil coreanos.
Ébola. Al principio al alza y a lo último a la baja.
Arrancó fuerte el 2014 pero se fue diluyendo. Que sobreviviera la enfermera promiscua española fue una muestra de debilidad del Ébola como pandemia; después, muerto el perro (de la enfermera) se acabó la gracia.
Selfies (autofotos). Al alza.
Como actividad humana pelotuda, la selfie mantuvo el liderazgo mundial. La vida ha pasado a ser una cosa que sucede entre selfie y selfie. A la gente ya le gusta más sacarse selfies que indignarse. ¿Indignante, no?
Daniel Martínez. Lo bajaron de un hondazo, compañeros, otra vez, qué bajón.
Tal parece que acaba de ser elegido en el FA como el ex futuro intendente de Montevideo por segunda vez consecutiva. La primera vez fue en aquel plenario en el que “apareció” Ana Olivera adentro de una bandera bolche y la segunda sería con múltiples candidatos: le salió La Pepa de la tatucera (con El Pepe atrás y mimetizado en ella misma), que “noqueríair-perotuvoqueir” porque el MPP tiene que ganar algo como cualquier equipo grande. Pocos han conseguido dos semejantes desplantes de forma consecutiva, sin contar a Michelini —que no vale porque es Michelini— y a Astori, que está fuera de concurso. A propósito, ¿adivinen a qué candidato apoya Danilo?
Crufi. Al caño.
Si fuera una empresa japonesa, la crisis de los coliformes terminaba en 3 elementos: un gerente, un almohadón y un sable. Los gustos “Chocolate holandés con estafilococo dorado” y “Crema con cacas al ron” no fueron bien recibidos por bromatología. La IMM tranquilizó de una forma peculiar a la población: “el problema fue detectado en la partida de setiembre, ya se la tomaron toda y ni cuenta se dieron, no sean alarmistas”, nos dijeron. Atendiendo al uso masivo de los envases como recipiente para vianda, no es descabellado pensar que durante un par de meses el 90% de la población uruguaya estuvo comiendo heces.