Sr. Director:
, regenerado3Sr. Director:
, regenerado3Accedé a una selección de artículos gratuitos, alertas de noticias y boletines exclusivos de Búsqueda y Galería.
El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáCuando un amigo se va... En estas horas nos dejó el Dr.Héctor Clavijo. Lo conocimos en aquel congreso de 1964, en Rocha, cuando Javier Barrios Amorín instó a la fundación del Movimiento Nacional de Rocha. Para los veteranos, su vida y trayectoria es sabida y reconocida. Honró la función pública en importantes responsabilidades. Hombre de fino humor. Brillante abogado. ¡Blancazo!
Si estas líneas sirven para algo, comenten a los jóvenes. ¿Por qué? Porque la historia reciente que les han contado no es cierta. La verdad —o lo más cercano a ella— está en aquellas personas que se jugaron el pellejo en los momentos más difíciles. Los que defendieron los derechos humanos, concreta y personalmente, los que nunca dudaron ni marginaron por ideología diferente. Héctor Clavijo y Hugo Batalla son de esos “imprescindibles” (recuerden las imágenes de la liberación de Seregni, en el balcón de su casa). Hoy es muy fácil subirse al estrado de los DDHH.
Pero el momento era aquel, y hubo muchas ausencias. ¿Se fue don Héctor? ¡No! Deja enseñanza, ejemplo, lealtad.
Por el país que tanto defendió, por el glorioso Partido Nacional: ¡Hasta siempre. En el mejor sentido de la palabra: Compañero!
Luis Eduardo Caputi Pérez