Por la economía enlentecida, los apostadores recortan “gastos superfluos” y se resiente recaudación estatal por slots y casinos

En 2016 la recaudación bruta de casinos estatales fue de $ 6.145 millones, es decir poco más de U$S 200 millones, informó “El País” el 5 de febrero. Para 2016 se proyectaba un aumento del orden de 8% en valores corrientes, pero la suba fue de 6,2%, dijo Cha a Búsqueda. Eso es menos que la inflación del año (8,1% según la medición del instituto oficial).

Éxitos y casos fallidos.

Algunos locales de juego son explotados bajo un esquema mixto. Un privado realiza la inversión, en general asociada a emprendimientos turísticos o comerciales, pero es el Estado el que explota la sala arrendándole el inmueble, el equipamiento y ciertos servicios. Le paga además un monto asociado al resultado que obtenga el establecimiento.

“En el sistema mixto tenemos experiencias exitosísimas, como las cinco salas de Hípica Rioplatense, que han funcionado a cabalidad. Otras dieron resultados mediocres, de acuerdo con cómo se planificó el negocio”, evaluó Cha.

Al establecimiento mixto de Durazno “le va bien”, pero en casos como el de Rivera “el plan de negocios que inspiró la inversión por parte del privado resultó demasiado optimista hasta el momento. Está muy lejos de satisfacer las expectativas”, comentó. Allí “se están buscando mejoras” en torno al negocio, añadió.

Acotó que “hay emprendimientos fallidos por otras circunstancias”. Comparó que mientras la sala explotada directamente por la DGC en Colonia muestra “números muy buenos”, el casino del Hotel Radisson en esa ciudad no dio los resultados esperados; allí “faltó mucha energía inversora en instalaciones, máquinas y marketing para generar una atracción mayor”, opinó Cha. Informó que ya está en trámite en el Poder Ejecutivo la rescisión de ese contrato y está previsto que el Estado “se haga cargo” de la sala, alquilando el local.

En el establecimiento mixto de Florida el privado “ha ido ajustando costos y está casi en equilibrio”, dijo el jerarca. Informó que a la DGC “le interesa generar otra escala de actividad” en esa sala.

Se vienen dando “distintas realidades”, con descensos en la actividad en algunas ciudades del interior “pero no son las más significativas. Y creció en otras”, resumió.

“Mi discrepancia sobre cómo ven al sistema mixto desde la oposición es que se trata de una herramienta, no es malo o bueno en sí mismo; depende de cómo se aplica. Si la planificación es correcta y la inversión está dimensionada”, debería arrojar resultados positivos, señaló.

Cambios internos.

La DGC “se halla en pleno proceso de transformación, modernización y renovación, en materia de funcionamiento, de las condiciones para la explotación comercial y de su propia imagen pública”, indicó el Poder Ejecutivo en su Memoria de 2016 enviada al Parlamento el miércoles 1º.

Detalló que se encuentra en proceso una tercera etapa del plan de desarrollo dirigido a completar la modernización integral del organismo. “Se ha implementado una estrategia dirigida a superar radicalmente el conjunto de precariedades que afectaban buena parte de los establecimientos y a la propia administración del organismo”, indicó.

Consultado por Búsqueda, Cha abundó en torno a esos cambios internos.

Dijo que se trabaja en la instalación de un centro de monitoreo y vigilancia centralizada de todas las salas, que funcionará en un espacio adicional arrendado en el edificio céntrico al que recientemente fue mudada la sede de la DGC. Esa acción, aconsejada tras una auditoría, evita que haya “recursos desperdigados”, explicó. Otra parte de la planta se usará para ampliar las posibilidades de archivo, ya que quedó “constreñida el área documental” del organismo, añadió.

El jerarca agregó que la repartición encara también un “proyecto superador” para poder hacer un manejo de la información “más potente y seguro”. Eso busca corregir algunos problemas advertidos por el Tribunal de Cuentas; en su dictamen, emitido en mayo de 2016, advirtió que en la DGC no se habían implementado controles de los sistemas de información “efectivos sobre las aplicación de recaudación, liquidación de haberes y contable. (…) Las debilidades observadas en los controles generales de tecnología de la información influyen significativamente en la confianza sobre los controles de las aplicaciones mencionadas, impactando a su vez negativamente sobre el nivel de confidencialidad e integridad de la información involucrada”.

“La inversión en máquinas de juego ha ido descendiendo, que era en los primeros años un objetivo urgente, el plan de emergencia, para tener un organismo que funcione en forma moderna y ambiciosa. Ahora toca el turno de la inversión en mejoras internas que van a tener impacto en la gestión del organismo”, sostuvo Cha. Según su visión, contar con un centro de liquidación y monitoreo de cierre y apertura centralizado “pone a la DGC entre las organizaciones de punta”.