Saceem prepara un “procedimiento constructivo nuevo” para continuar las obras de la regasificadora si GNLS acuerda con el gobierno

“Al caer el sistema viejo, lo que nos estamos replanteando es una forma totalmente distinta de hacer la obra”, anunció. “Voy a traer máquinas más grandes, barcos más grandes, voy a trabajar triple turno. Hace un mes que los ingenieros están trabajando a full y en breve van a terminar un proyecto con un procedimiento constructivo nuevo”.

—¿Tienen ya un contrato firmado?

—No tengo ningún contrato firmado, pero para acordar en estos proyectos hay muchos pasos previos y estamos recorriendo ese camino. GDF Suez y Marubeni son dos empresas muy serias y lo comprometido verbalmente en reuniones conmigo, para mí es oficial. En el mundo de los negocios también existe la palabra.

—¿Por qué es importante que haya una empresa local?

—Tenés que tener alguien que conozca, que sepa manejar, que entienda los códigos con el sindicato, que conozca quién es quién. Uruguay es un país muy chiquito y la industria de la construcción es bastante compleja. Además este proyecto en particular tiene gran complejidad.

—¿Por qué?

—Estamos hablando de una tecnología que no es muy común en el mundo ni en América, el manejo del gas licuado y las técnicas estas criogénicas, porque se maneja a –160ºC. La obra marítima es totalmente en el agua y el Río de la Plata es muy traicionero. Hay tormentas y olas de dos metros, entonces los equipamientos que tenés pensados para trabajar en una bahía ya no te andan. Entonces empezás a trabajar menos días por mes, que es lo que le pasó a la empresa anterior, entre otras cosas: le erró en el procedimiento constructivo y en los equipos. Esta gente cometió tal vez un error con la empresa que trajo para hacer la obra. La empresa anterior les vendió que estaba instalada en Uruguay porque de verdad tenía algo en Uruguay, pero no tenía musculatura y esqueleto acá. Y después fracasó rotundamente en la obra y financieramente se partió en pedazos.

—¿Qué falta definir para que se decida seguir la obra?

—Falta que GNLS y el gobierno se pongan de acuerdo en cómo va a seguir el proyecto. Por la información que yo tengo, GNLS sigue muy interesada en seguir. La prueba está en la decisión de indemnizar a los trabajadores. Y creo que es una muy buena señal, no mandaron a los abogados a discutir dos años. Esta gente quiere seguir trabajando y nosotros estamos trabajando con ellos hace un mes. Hay un equipo de ingenieros uruguayos y de ingenieros belgas viendo qué es lo que hay hecho, cómo se puede hacer para seguir la obra, con qué técnicas. Si querés, eso es una oportunidad que está dando este golpe. Al caer el sistema viejo, lo que nos estamos replanteando es una forma totalmente distinta de hacer la obra. Voy a traer máquinas más grandes, barcos más grandes, voy a trabajar triple turno. Hace un mes que los ingenieros están trabajando a full y en breve van a terminar un proyecto con un procedimiento constructivo nuevo, con equipos que no hay en la región, otra escala, otras dimensiones, y con un ritmo de trabajo de siete días las 24 horas.

—¿Eso es para llegar en plazo?

—Es para optimizar los plazos. El plazo no está definido, con este trabajo se va a terminar de definir.

—¿Qué encontraron al evaluar la obra que hizo OAS?

—De lo que dejó encontramos que de esta manera la obra iba a estar tres años más para hacerla. Con ese procedimiento constructivo, con herramientas no apropiadas, si vos proyectabas, con suerte te iba a llevar eso. Por una cuestión de recursos aplicados, diseño del procedimiento constructivo y dimensionamiento de los equipos. La empresa belga que está con nosotros ahí es una empresa que está en el Mar del Norte, que trae equipos para cosas pesadas.

—¿Hay parte de la obra que es recuperable?

—El dragado sin duda que es recuperable; parte del acopio de los materiales, piedra y eso, también es utilizable; probablemente los acrópodos, que son piezas de hormigón que se traban unas con otras y están diseñadas para absorber energía del impacto de las olas. Todo eso es lo que se está definiendo, las condiciones de lo que hay. No hay gran cosa, hay que decir la verdad. Algo se podrá reutilizar. A medida que pasan los meses también se van deteriorando las cosas, los pilotes en el agua, el dragado se te tapa con el barro. Una obra de este tipo no puede quedar detenida indefinidamente porque empieza a depreciarse muy rápido.

—¿Va a aumentar el costo de la obra?

—Todavía no cerré eso. Hay que ver cómo van a manejar los costos ellos. Hay que ver los plazos también. No sé cómo va a terminar el balance de costos. Yo voy a defender mis costos y mi precio, pero no te puedo decir lo que van a hacer ellos. Pero si se aseguran que el proyecto se termina con calidad y se tiene que ir un poco el plazo… Uruguay no tiene demanda de gas. La central de ciclo combinado está atrasada como un año, fácil. No hay ni siquiera una compra de gas firme de Argentina.

—Los problemas económicos fueron determinantes en el fracaso de OAS. ¿Cuál es la situación financiera de Saceem? Tuvieron un problema con la obra de Montes del Plata por unos U$S 9 millones.

—Fue un proyecto muy complejo pero ya se terminaron todas las discusiones. Eso para nosotros está resuelto. Con Montes del Plata suspendimos el arbitraje y ya cancelamos todo. Eso está liquidado. No me gustaría mezclar Montes del Plata con este proyecto.

—Nos interesa la situación económica de la empresa.

—La situación económica de nuestra empresa está muy sólida. En este proyecto, sobre todo, me da tranquilidad que esté Marubeni. Lo que te importa cuando entrás en un proyecto de estos es que el cliente tenga la plata. ¿Por qué me interesa mucho este proyecto a mí? Porque está GDF Suez, que es una empresa buena, sabe del tema, y no lo va a dejar así nomás. Pero está Marubeni además. Me aseguran que está el financiamiento del proyecto, que no tengo que andar investigando quién es quién. Eso me da tranquilidad.

El gobierno yo creo que estuvo muy bien en trancar fuerte, pero también tiene que mirar muy bien cómo termina el proyecto. A Uruguay lo que le sirve es tener el proyecto andando a un precio razonable, en un plazo razonable. También dar ejemplo, no sentar un precedente. Porque si no, mañana cuando haya un problema con un proyecto del Estado trancás y renegociás. Pero creo que desde la represa de Salto Grande que no había un proyecto público tan grande en este país, no podés tampoco sentar el precedente de dejarlo colgado.

—¿Está de acuerdo con que, como dijo la gerenta de Gas Sayago, OAS contrató a 300 trabajadores más de lo necesario?

—Por las estimaciones que hicimos nosotros, sin duda parece mucha gente 700 personas para el proyecto. Pero como vamos a trabajar en triple turno no sé al final cuánto va a dar.

—¿Prevén contratar a los trabajadores que ya estaban en la obra?

—Una vez definida la cantidad de gente que vamos a utilizar en los distintos turnos, nosotros obviamente tenemos gente de nuestra empresa y vamos a tomar también gente de la obra. Hay que definir cuántos.

—¿Cuándo podrán retomar el trabajo?

—Nosotros estaríamos prontos para comenzar en junio, siempre y cuando, y no depende de mí, se defina la situación entre GNLS y Gas Sayago. La señales son aparentemente de tratar de construir una solución. Del lado de GNLS por lo menos. Creo que en estas semanas se va a definir.

Lo importante es que no estamos parados. Estamos trabajando.