Cervini y De Armas, ambos diputados canarios de Vamos Uruguay, votaron a favor del proyecto de Presupuesto en general. Cervini explicó en En perspectiva de Radio Mundo que, como revela una encuesta de Cifra, la mayoría de los uruguayos prefieren que los políticos acuerden. Por su parte, De Armas aclaró a Búsqueda que la aprobación de este centro “no es una moneda de cambio” por su votación favorable del Presupuesto, sino que “las nuevas generaciones” tienen “una nueva forma de ver la política”, que tiene en la mira los acuerdos. Cervini tiene 40 años y De Armas, 30.
El Partido Nacional también logró frutos gracias al intercambio con el oficialismo. Por ejemplo, el diputado blanco Álvaro Rodríguez Hunter, de Florida, presentó junto con el Frente Amplio un artículo aditivo para abrir una sede de la Universidad Tecnológica (Utec) en su departamento, para lo que se reasignan $ 10 millones. Si bien Rodríguez Hunter le propuso en mayo al presidente Yamandú Orsi instalar la Utec en la estancia María Dolores, adquirida este año por el Instituto Nacional de Colonización, la universidad cuenta con autonomía para definir en qué lugar de Florida y con qué propuesta desembarcar, por lo que el artículo aprobado no detalla la ubicación de la sede.
A su vez, hubo algunas propuestas oficialistas que fueron apoyadas por Cabildo Abierto y dividieron a las bancadas de blancos y colorados, como la creación de la Agencia del Sistema de Transporte Metropolitano: mientras unos la apoyaron, principalmente canarios y maragatos, otros no.
Los dos partidos que no sellaron acuerdos con el oficialismo fueron el Partido Independiente e Identidad Soberana, aunque este último negoció con el Frente Amplio hasta el martes 14 la creación de un impuesto a ciertos pesticidas de alta peligrosidad, lo que fue propuesto por el gobierno y, con cambios, por la diputada Nicolle Salle, pero no llegaron a un consenso. La legisladora sí votó, junto con otros legisladores de la oposición y el oficialismo, un refuerzo presupuestal para programas de investigación de la Universidad de la República (Udelar), entre otros artículos.
Una aprobación “histórica“
El proyecto fue aprobado en general en la Comisión de Presupuestos integrada con Hacienda con votos frenteamplistas y blancos, y en el plenario se sumaron además los dos de Cabildo Abierto y seis de los 13 diputados colorados de Vamos Uruguay. Allí hubo 84 votos afirmativos y 14 negativos, lo que representa una “votación histórica”, según valoró en conferencia de prensa el diputado frentista Mariano Tucci, quien destacó que el oficialismo no alcanzaría la mayoría en la Cámara Baja solo con sus bancas. En el Frente Amplio advierten que este proyecto logró la mayor cantidad de apoyos desde el retorno a la democracia. El politólogo e investigador Daniel Chasquetti dijo a Búsqueda que recuerda solo una votación similar: en 1985 se votó por unanimidad, 83 en 83 presentes.
Votaron en contra del proyecto en general los cuatro diputados colorados de Unir para Crecer, siete de Vamos Uruguay, los dos legisladores de Identidad Soberana y el del Partido Independiente.
Cabildo Abierto fue el único partido de la oposición que aprobó los tres principales cambios impositivos: el Impuesto Mínimo Complementario Doméstico; el llamado “impuesto Temu”, que grava con IVA de 22% las encomiendas con franquicia aduanera; y el ajuste al Impuesto a las Rentas de las Personas Físicas (IRPF) para gravar las ganancias de capitales en el exterior e igualarlas a las inversiones locales. A cambio, los cabildantes lograron reasignaciones presupuestales por US$ 31 millones para el Ministerio de Defensa y el compromiso del oficialismo de avanzar en el tratamiento de dos proyectos de ley, uno para limitar la forestación y otro para atender la situación de los deudores.
La propuesta de reasignación de Cabildo Abierto para reforzar Sanidad Militar y aumentar el salario del personal subalterno de las Fuerzas Armadas —incremento que alcanzará al final del quinquenio los $ 1.000 mensuales— contó con el respaldo del Frente Amplio y de legisladores de la oposición. Además, a raíz de una propuesta de la diputada cabildante Silvana Pérez Bonavita, se reasignaron $ 5 millones para un programa que atiende el acoso escolar.
La legisladora cabildante participó de las siete sesiones consecutivas del plenario en que se votó el Presupuesto, salvo en la del viernes 10, cuando se aprobó el paquete tributario, razón por la que —en los pasillos— dirigentes de la coalición republicana asociaron su ausencia con un eventual rechazo a la creación de nuevos impuestos. En sala, votó los impuestos su cuarta suplente, Micaela Manini Ríos, la hija del presidente del partido, Guido Manini Ríos. De todas maneras, Pérez Bonavita dijo a Búsqueda que no participó de esa sesión porque tenía gripe y dijo que lo votado por la suplente representa su posición.
El Frente Amplio anunció el sábado 11, luego de que la cámara aprobara los nuevos tributos, las reasignaciones de recursos propuestas: $ 290 millones para la Udelar, de los que $ 60 millones son para el Hospital de Clínicas; $ 80 millones para la Utec; $ 12 millones para el parque tecnológico de Pando, y otros $ 12 millones para el de Rivera. También se anunciaron partidas para el Ministerio de Educación y Cultura destinadas a programas de alfabetización en cárceles y a los Centros Educativos de Capacitación, Arte y Producción para el teatro independiente, Cinemateca Uruguaya y el Instituto Clemente Estable. Por otra parte, $ 40 millones se reasignaron a la Fiscalía General de la Nación para avanzar en la equiparación salarial entre fiscales y jueces durante el quinquenio, y $ 3 millones para la Junta de Transparencia y Ética Pública. El oficialismo logró la mayoría para aprobar estas reasignaciones de recursos con el apoyo de varios partidos.
En el trámite parlamentario no es posible incrementar el presupuesto global, sino solamente reasignar recursos entre las dependencias del Estado.
Acuerdos y club del trueque
En la última jornada de votación del articulado en Diputados, el miércoles 15, se trataron 261 aditivos y sustitutivos. El Partido Nacional, además de impulsar el desembarco de la Utec en Florida, propuso reasignaciones (y al cierre de esta edición contaba con el compromiso de otros partidos para apoyarlo) con el fin de reforzar políticas inclusivas y atender la discapacidad, tanto en el ámbito educativo y emprendedor como en la accesibilidad y la formación laboral. El diputado blanco Sebastián Andújar dijo a Búsqueda que así se cumple un acuerdo interpartidario que firmaron los candidatos a presidente de la República en octubre de 2024 para implementar una política de Estado en discapacidad.
Además, los blancos propusieron y acordaron con varios partidos financiar dos iniciativas impulsadas por el Hospital de Clínicas: una brinda “una atención oportuna e integral para los pacientes de ASSE en listas de espera quirúrgicas de patología obstructiva urológica” y otra amplía el programa de salud mental e incluye el tratamiento de ciertos casos de depresión con ketamina, especialmente en los pacientes con ideación suicida.
Andújar destacó que la bancada nacionalista asumió el compromiso de “viabilizar” y “mejorar” el proyecto de Presupuesto, y que ese objetivo “se cumplió”, porque “la ley sale mejor de lo que entró” y con el “aporte” de los blancos.
En contrapartida, el diputado colorado Felipe Schipani, de Unir para Crecer, cuestionó el “club del trueque” e ironizó que se trata de “alta política”. Lamentó que la coalición esté “dividida” y que impere una visión sobre el “buenismo con el gobierno”.
En ese marco, Unir para Crecer, con sus cuatros diputados, se desmarcó junto con Identidad Soberana de los restantes 93 legisladores de la cámara a la hora de votar el aumento salarial a la tropa propuesto por Cabildo Abierto. Schipani propuso que esos fondos, que provienen del Ministerio de Defensa y Rentas Generales, se destinen a la educación pública, en particular a la Udelar y a la Utec, y apuntó contra quienes aprobaron el incremento de los sueldos militares. “Se llevan el presupuesto, pero dejan los principios”, expresó.
El diputado cabildante Álvaro Perrone respondió que la negociación de esta reasignación fue “en buenos términos y no desde la extorsión”, y reconoció —en línea con lo planteado por el diputado colorado Juan Martín Jorge, de Vamos Uruguay— que el aumento salarial aprobado “es muy poco”. Perrone dijo a Búsqueda que “en cada Rendición de Cuentas” que vendrá buscará que se incremente el salario de la tropa.
El único diputado frentista que justificó su voto en sala para mejorar el salario militar fue Alejandro Zavala, del sector Ir, que integra El Abrazo. A pesar de que votó a favor, dijo que consideraba mejor que este fondo se financiara con reducción de vacantes del Ejército, recordó que hay 23.000 efectivos en las Fuerzas Armadas y reclamó “menos soldados, mejor pagos, más profesionalizados y mejor equipados”. Destacó que para su sector “es importante” que no se aumente el presupuesto del Ministerio de Defensa, pero que, al mismo tiempo, se atiendan “los salarios sumergidos”.
Un par de errores
Con la ley vigente, los legisladores solo pueden solicitar información a dos dependencias de Presidencia de la República: la Oficina Nacional de Servicio Civil y la Oficina de Planeamiento y Presupuesto.
Con el propósito de lograr mayor transparencia, el diputado colorado Conrado Rodríguez propuso un artículo, firmado por otros legisladores, que obliga a “todas” las “reparticiones” de Presidencia a “proporcionar los datos e informes que soliciten los legisladores”, un planteo que fue aprobado por 50 votos a favor y 49 en contra. Votaron en contra los dos cabildantes y 47 de 48 diputados frenteamplistas, y a favor los de la coalición republicana, la familia Salle y el presidente de la cámara, el frenteamplista Sebastián Valdomir. Esta curiosa mayoría generó algarabía entre los coalicionistas (“bien, Salle, bien”, celebraron algunos) y confusión en el oficialismo, pero, en principio, nadie pidió rectificar la votación. Valdomir dijo a Búsqueda que fue un error suyo y que estaba previsto que al final de la votación se rectificara.
Otra curiosidad: la cámara aprobó, con el apoyo del Frente Amplio, Cabildo Abierto y el Partido Independiente, un incremento salarial para el subdirector general de Secretaría del Ministerio del Interior, lo que fue cuestionado por los diputados Schipani y Juan Martín Rodríguez. El nacionalista planteó que a través de este artículo se le incrementa el salario en $ 25.000 a este jerarca, que ya tiene un sueldo de $ 250.000. Además, dijo que el funcionario en cuestión, Ruben Amato, “fue el responsable de toda la macana de los pasaportes, de que se imprimieran y se tuvieran que reimprimir”, un episodio del que salió “ileso” y, luego de esta votación, premiado.
Tras la protesta de ambos legisladores de la oposición, el Frente Amplio pidió un cuarto intermedio, luego solicitó rectificar la votación y, finalmente, la propuesta no cosechó votos favorables. Tucci dijo a Búsqueda que la aprobación inicial del artículo se debió, también, a “un error”.
El pasaje al Senado
El proyecto de Presupuesto pasa ahora a estudio del Senado, que tendrá 45 días para tratarlo. Un senador del Frente Amplio dijo a Búsqueda que seguramente le harán cambios, por lo que la iniciativa, en ese caso, deberá volver a la Cámara Baja para votarse a “tapa cerrada”; es decir, solo se podrá aprobar o rechazar los cambios.
Por esta dinámica parlamentaria, el senador frenteamplista agregó que seguramente acordarán con Cabildo Abierto “una línea roja” que marque qué propuestas no respaldaría, para conservar de esa manera la mayoría en ambas cámaras.