La candidata de la izquierda sostiene que es necesario que los montevideanos “se bajen” del auto y “elijan el transporte público”, porque no se puede “seguir aumentando el tamaño de las calles o de las avenidas”; asegura que está dispuesta a pagar el “costo” de dar la batalla contra los vehículos individuales para priorizar a ómnibus, bicis y peatones