El ex presidente de Pluna, el argentino Matías Campiani, dijo este miércoles en uno de los juzgados especializados en crimen organizado que “jamás” pensó que la compañía aérea de bandera uruguaya iba a cerrar.
El ex presidente de la empresa reconoció que no tenía experiencia en compañías aéreas
El ex presidente de Pluna, el argentino Matías Campiani, dijo este miércoles en uno de los juzgados especializados en crimen organizado que “jamás” pensó que la compañía aérea de bandera uruguaya iba a cerrar.
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En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáSegún Campiani, el 91% de los cheques que emitió para comprarle combustible a Ancap ya fueron abonados, por lo que la “discusión” se centra “apenas” en el 9% restante.
Campiani y otros ex jerarcas de Pluna SA fueron denunciados por la petrolera estatal Ancap por presunta emisión de cheques sin fondos.
La jueza especializada en crimen organizado Adriana de los Santos y el fiscal Juan Gómez instruyen esa denuncia por la que declararon la semana pasada el presidente y vicepresidente de Ancap, Raúl Sendic y Germán Riet, quienes ratificaron su contenido.
Ayer miércoles 5 fue el turno de Campiani, que concurrió a la sede judicial de la calle Buenos Aires acompañado por su abogado Jorge Barrera.
Según las fuentes, Campiani ingresó al edificio a las 14:27 y saludó con un apretón de manos a los letrados presentes y a los funcionarios que se encontraban a esa hora en la baranda. De inmediato ingresó a la sala de audiencias, de la que recién volvió a salir luego de más de cuatro horas y media de interrogatorio a las 19:12.
Según fuentes que presenciaron la declaración, Campiani ingresó acompañado de una botella de agua mineral —de la que bebía constantemente sorbos— y una carpeta con documentos que aportó a la magistrada a medida que hablaba. Su abogado, Barrera, también ingresó con carpetas que contenían documentos.
La jueza De los Santos comenzó preguntándole a Campiani si reconocía haber firmado un convenio de acuerdo de repago de deuda por combustible, a lo que el empresario contestó que sí. Agregó que en 2008 se firmaron dos tipos de acuerdos con la empresa petrolera: uno que reconocía la deuda hasta el momento y otro respecto al pago de suministro futuro de combustible.
Manifestó que desde noviembre de 2008 hasta su último día de trabajo en Pluna se emitieron 222 cheques, de los cuales 119 fueron cobrados en plazo. Añadió que existieron 103 cheques que fueron emitidos a mayor plazo.
“Eso quiere decir que de los 222 cheques emitidos fueron pagados hasta el día de hoy 201, es decir el 91%. Por lo tanto, solamente van a ser rechazados 21 cheques correspondientes al 9% de la relación contractual que unió a Pluna con Ancap. Y de eso es de lo que estamos discutiendo”, prosiguió.
De acuerdo con los informantes, luego de eso la magistrada le exhibió a Campiani los cheques objeto de la denuncia y el empresario reconoció su firma en algunos de ellos. En los que no reconoció su firma indicó de quién era.
El abogado Barrera preguntó a Campiani cuándo firmó el último cheque y el empresario le respondió que lo hizo el 15 de mayo. “Si tomamos en cuenta que el concurso fue aprobado en la primera quincena de junio tenemos que pasaron 54 días entre que firmé el último cheque y se declaró el concurso. Durante ese tiempo jamás fue rechazado un cheque por falta de fondos”, expresó.
El empresario sostuvo que “era absolutamente imprevisible que no se iba a pagar la deuda”.
“Jamás firmé un cheque sin la convicción de que se iba a pagar. No pensé que 15 días después de mi retiro se iba a producir el cierre de la empresa”.
El fiscal Gómez inquirió a Campiani acerca de si él no veía que se estaban pagando cheques fuera de plazo. El empresario respondió que no lo sabía porque él no pertenecía a esa área de la empresa, pero acotó que durante los 72 pagos consecutivos que se hicieron jamás recibió una intimación por incumplimiento.
“No recibí en las ocasiones en que tuve trato con Sendic molestia alguna por este tema”, aseveró.
Según las fuentes, Gómez le preguntó qué experiencia tenía en el manejo de empresas aéreas y Campiani reconoció que antes de estar al frente de Pluna no tenía ninguna experiencia. No obstante, expresó que recibió una serie de premios y reconocimientos a su trabajo en los cinco años que dirigió la compañía de bandera uruguaya.
El próximo miércoles 12, al mediodía, en el piso tres del Aeropuerto Internacional de Carrasco, el martillero comenzará el remate al alza de los siete aviones de Pluna con una base de U$S 136.885.156 —cifra equivalente al monto adeudado por Pluna SA al Bank Of Nova Scotia—.
Si no hay ningún oferente, se procederá a realizar una subasta a la baja. Desde la base anterior el rematador comenzará a bajar a razón de U$S 100.000 hasta llegar a un mínimo de U$S 100.000.000. El primero en ofertar será el ganador.
En esa instancia el Estado, que es garantía de esa deuda, se juega sus chances de quedar a mano con el principal acreedor de la aerolínea y las esperanzas de recuperar el nivel de conectividad del país.
El diario “La República” publicó el sábado 25 de agosto que el ministro Fernando Lorenzo informó en el Parlamento que hubo “más de una decena” de expresiones de interés y cinco de ellas pagaron para acceder a la información. Sol, BQB y Cutcsa son tres de los principales candidatos a presentarse, ya que anunciaron públicamente que estudiaban esa posibilidad.
Horacio Darré, director de Planeamiento de Sol, aseguró a Búsqueda que “ya tienen una resolución tomada” pero la comunicarían al ministro de Transporte antes de hacerla pública.
Mientras, fuentes del Ejecutivo consultadas por Búsqueda consideraron difícil saber con precisión cuántas empresas participarán por la reserva con que manejan estos negocios y porque entre las interesadas creen que puede haber algunas que se repitan. No obstante, estimaron que los oferentes “podrían oscilar entre siete y tres”.
En el gobierno confían en que el precio final de la venta “no estará lejos de la base”, porque “no es disparatado” el valor que se asignó a los aviones. De todos modos, las autoridades evalúan posibles alternativas ante la eventualidad de que la subasta resulte desierta, de modo de garantizar la conectividad.
Los ex trabajadores de Pluna tampoco conocen quiénes serán las empresas que pujarán por los aviones. La mesa directiva del sindicato estará presente en el tercer piso cuando se realice la subasta, según informó el dirigente César Iroldi, y los trabajadores se concentrarán en el estacionamiento de arribos.