La construcción del puerto de aguas profundas es “la jugada de política exterior más importante de este gobierno”, dijo Mujica

REDACCIÓN  
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Los buques cada vez son más grandes y sólo pueden transportar una parte de su carga por la costa uruguaya. El puerto de Montevideo está colapsado. Productores del norte sacan su producción por Rio Grande mientras que la falta de dragado en los ríos limítrofes con Argentina dificulta la circulación de bienes desde el interior del continente.

Por todas esas razones es que el gobierno considera prioritario construir un puerto de aguas profundas en la costa de Rocha que permita desahogar la congestión logística del país, atraer negocios hacia los puertos locales y tener mayor poder de negociación con los demás países del continente.

El presidente José Mujica considera, según transmitió varias veces a sus allegados, que el puerto de aguas profundas es “la obra” que quiere dejar en marcha una vez que termine su administración.

“Es la jugada de política exterior más importante de este gobierno”, dijo el jefe de Estado a Búsqueda.

Para el mandatario la construcción de esa terminal tiene una “importancia estratégica” para Uruguay, porque tener otro puerto de peso en la región favorece al país para “negociar” con los países vecinos, dijeron altas fuentes del Poder Ejecutivo.

Si la iniciativa prospera, Uruguay va a pasar a tener dos puertos de proyección internacional, mientras que Argentina tendrá solo uno. Además ese puerto podrá ofrecer servicios a otros países de la región, como Paraguay y Bolivia, que no tienen salida al mar.

De esa forma, razona el presidente, “se fortalece la capacidad negociadora” de Uruguay en todos los conflictos regionales.

La semana pasada el presidente recibió el informe de una comisión interministerial formada para estudiar la instalación del puerto de aguas profundas, según informó el sábado el diario “UNoticias”. De acuerdo a ese periódico, la inversión será de entre U$S 1.500 millones y 2.000 millones y el lugar seleccionado es la playa El Palenque, que está once kilómetros al este de La Pedrera.

Se decidió que el puerto se construya por la modalidad de participación público-privada y que se use el mecanismo del “diálogo competitivo”, que prevé que el gobierno convoque a actores técnicos especializados del sector privado para discutir las características que debe tener el proyecto.

En los próximos días Mujica firmará algunas disposiciones que pondrán en marcha el proceso para llamar a interesados para hacer la obra.

Según supo Búsqueda, el gobierno ofrecerá a inversores chinos la posibilidad de participar en el emprendimiento en ocasión de la visita que el primer ministro de ese país, Wen Jiabao, realizará a Uruguay la semana próxima.

Puerto.

La idea de construir un puerto de aguas profundas en la costa atlántica uruguaya tiene ya varias décadas y se anunciaron unos cuantos proyectos sin que nada se concretara.

Pero en la Ley de Presupuesto 2010-2014, un artículo previó que se habiliten nuevos puertos siempre que “se encuadren en la política nacional portuaria de estímulo al desarrollo de una logística de transporte eficiente” y “que se ubiquen en la costa oceánica del departamento de Rocha entre cabo Santa María y el arroyo Chuy”. La norma prevé que la Asamblea General apruebe la habilitación.

Un decreto del 15 de noviembre del 2011 dispuso la formación de una comisión interministerial que analice las opciones para instalar el puerto de aguas profundas en el este, dada “la existencia de diferentes iniciativas, públicas y privadas”.

Al anunciar que una comisión estudiaría el tema, el subsecretario de Transporte, Pablo Genta, informó a través de la Secretaría de Comunicación de la Presidencia, que la idea es desarrollar un puerto de entre 18 y 20 metros de calado.

Además, una nota de esa dependencia gubernamental puntualizó que “intercambios mantenidos entre el MTOP y operadores privados dilucidaron que operadores de Argentina, Brasil, Paraguay y Bolivia podrán ser usuarios de una cadena logística que se iniciaría con el transporte fluvial o ferroviario que podrían utilizar puertos internos del país vecino y Uruguay y salir hacia el mundo a través del puerto a construirse en Rocha”.

En la actualidad hay al menos tres proyectos portuarios que se han presentado al gobierno. Por un lado, la empresa naviera Christophersen y la forestal UPM propusieron construir un puerto maderero en La Paloma

La segunda propuesta fue presentada por la minera Aratirí, que tiene un proyecto en Uruguay pendiente de aprobación y quiere instalar un puerto para su uso exclusivo en predios del Ministerio de Defensa en La Angostura, entre La Esmeralda y Punta del Diablo.

La otra iniciativa es de una empresa de capitales españoles y de otros países, la Compañía Oriental de Desarrollo e Inversiones, de la sociedad anónima Orasba, que quiere instalar un puerto con dos muelles también en las proximidades de La Angostura.

No obstante el gobierno decidió que sólo se construirá un puerto de aguas profundas en el país, por lo que Aratirí deberá coordinar la salida de su producción por esa terminal.

“Decisión estratégica”.

La decisión de instalar un puerto en la costa de Rocha tiene varias explicaciones estratégicas. La más elemental es que los barcos son cada vez más grandes y necesitan puertos más profundos. Otra es la que maneja el presidente sobre el “poder de negociación” que ganaría el país si realizara la obra. De hecho, integrantes del gobierno sostienen que se pondría fin a la eterna “guerra de puertos” con Argentina.

El martes 22 de mayo el ministro de Transporte, Enrique Pintado, afirmó en una conferencia en el Hotel Radisson, que el puerto “resolverá el diferendo” que existe con Argentina desde “antes que la independencia desplazara la colonia: la rivalidad de puertos entre Montevideo y Buenos Aires”.

“Hemos hecho una invitación a los países del Mercosur para que sean socios y propietarios de ese gran emprendimiento que debería ser una muestra de la estrategia y el compromiso regional para posicionarnos como una región que va a tener un enclave fundamental para el transporte de mercancías de la región al mundo y del mundo a la región”, afirmó.

Pero también el puerto en ese lugar tiene importancia comercial por el crecimiento de la actividad en el hinterland (horizonte terrestre), que abarca varias zonas de la región que podrían enviar su producción hacia el océano Atlántico.

El ex presidente de la Administración Nacional de Puertos Eduardo Álvarez Mazza elaboró en 2010 un informe junto a Manuel Vega para la Universidad de Montevideo, en el que afirma que el puerto de aguas profundas sería “complementario de los puertos del sistema de las hidrovías Paraguay-Paraná y Uruguay, del sistema portuario ‘Rosario al mar’ (Argentina) y el puerto de Nueva Palmira (Uruguay), así como de los puertos de Buenos Aires, La Plata y Montevideo, y en competencia con el puerto de Rio Grande (Brasil)”.

El puerto de Rio Grande creció en los últimos años hasta superar al de Montevideo en la cantidad de contenedores movilizados.

En una disertación organizada por ACDE en mayo del 2006, el entonces presidente de la Administración Nacional de Puertos, Fernando Puntigliano, actual gerente general de la minera Aratirí, dijo que emprendimientos forestales, sojeros, minerales y graneleros de varios países necesitan un lugar por donde sacar su producción.

“Nosotros tenemos un puerto que está congestionado y tenemos todo un plan de desarrollo, y empiezan a venirse otras discusiones, como que Weyerhaeuser piensa que una posibilidad es sacar la carga por Rio Grande, lo cual desde el punto de vista de una visión integral de la región es muy razonable, y es un mercado donde podemos entrar a competir”, sostuvo.

Afirmó que la “estrategia” es intentar “captar ese mercado” que se va a Brasil.

“Y si no tenemos superficie suficiente, empiezan a abrirse discusiones como el famoso puerto de La Paloma que todo el mundo tiene miedo a mencionar, por pasar por despistado, pero en definitiva es una alternativa —agregó—. Solamente puede ser una alternativa si hay tres cosas: si hay carga, si hay una escollera, y si hay un ferrocarril. Sin esas tres cosas no hay puerto”.

El ferrocarril todavía falta pero la carga sobra, y ese parece ser motivo suficiente para que el gobierno apunte con seriedad a realizar la obra.

Desarrollo
2012-06-14T00:00:00